Dulce Provocación #DP

.25.

25. ¿Qué ha pasado aquí?:

Gracias a Isa y Elena por ayudarme con el capítulo❤️

BETH POV's

Mark y yo habíamos decidido dejar solos a Ian y Em en el centro comercial.

Un cuarto de hora después llegamos a su casa, subí a su habitación y me tiré sobre la cama. Estaba agotada, podría pasar todos los días que me quedaban de vida durmiendo.

- Cariño.- Esa simple palabra despertaba tantos sentimientos dentro de mí.- ¿Quieres tomar algo?- Gritó desde la cocina.

- No, gracias.- Sin duda Mark era el hombre de mi vida, a pesar de llevar tan poco tiempo juntos sentía que era la persona indicada. Podía contarle mis problemas y él me escuchaba con atención sin quejarse, me apoyaba en las decisiones y no quería mi dinero, sino a mí.

Al entrar en la habitación me observó tumbada sobre su cama y se aproximó hasta llegar a mi lado. Yo había cerrado los ojos y tan solo oía sus pasos sobre el suelo, permanecieron cerrados en todo momento pero intuí que seguía mirándome. Tanto su respiración como la mía eran agitadas.

Al abrir los ojos comprobé que su mirada estaba tan atenta a mis movimientos que si le hubieran lanzado algo en aquel momento, lo habría golpeado.

Sus ojos se dirigieron a la parte baja de mi espalda, donde la falda se había subido dejando ver parte de mi culo.

- ¿Mark?- Me senté sobre la cama acomodándome la ropa.

- Dime cariño.- Dijo aproximándose más, si es que eso era posible.

- Quiero que seas el primero y el último. - Mi mirada se dirigió a su rostro y la fijé ahí. Él me observó sin decir nada, pero en sus ojos había adoración y ternura.

- Beth, sabes que eres muy importante para mi, pero no quiero que te arrepientas- suspiró.- Antes de dar este paso debes estar totalmente segura. No quiero que porque yo te desee y quiera hacer de todo contigo, acabe en desastre y te sientas presionada.- La forma en la que lo dijo, dejando salir esas palabras de entre sus labios, me confirmaron que perder la virginidad con él sería perfecto.

- Oh Mark.- Susurré levantándome de la cama y lanzándome entre sus musculosos brazos, que me sostuvieron sin dudarlo. Caímos sobre la alfombra, juntos, y lo besé hasta quedar sin respiración.- Eres lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo.- Aquellas palabras parecieron dar respuesta a su pregunta interior, pues me cogió de la cintura y me pegó todo lo que pudo contra él.

Me besó lentamente, lamiendo y mordisqueando mi labio inferir tantas veces como le fueron posibles. En una de esas mordidas me hizo gemir y él aprovechó la oportunidad para introducir su lengua dentro de mi boca.

Nuestras lenguas luchaban provocando que lo que al principio fue un beso tierno pasara a ser caliente y desenfrenado.

Pasó sus manos por mi espalda hasta llegar a mi trasero y lo agarró entre sus manos acercando su miembro ya erecto a mi cadera.

Me separé escasos centímetros de él y lo miré a los ojos, su mirada lujuriosa me dio a entender que era el momento.

Las piernas me temblaban por los nervios, pero estaba completamente segura de que quería dar ese paso tan importante, porque sabía que jamás conocería a alguien que me hiciera sentir lo que Mark lograba provocar.