Gracias Honey 💕
30. Te necesito:
Subidos en el Jeep, preparados para lo que parecía ser una noche de lo más prometedora.
Cuando llegamos al lugar que acordamos con Mark empecé a arrepentirme. Ian no estaba junto a él, el cual nos esperaba en la entrada del local, así que supuse que se estaba preparando para su pelea oculto bajo la mascara de "El Mago". Le dediqué una mirada asesina a Beth por haberme llevado de nuevo a una pelea de Ian, pero la evitó lanzándose a los brazos de su novio. Ignoré sus caricias y me adentré en el lugar. Al entrar un fuerte olor a tabaco me invadió, mis manos comenzaron a sudar y mis piernas temblaron ante la emoción de ver al animal pelear con otro adversario que no fuera yo.
El presentador dio inicio a la pelea, Ian iba cubierto con una capucha y sus ojos ocultos bajo una mascara al igual que su oponente.
"El Mago" ignoró durante un par de segundos a su rival y centró sus oscuros ojos hacía donde estábamos nosotros. El tiempo pareció detenerse, sus ojos entraron en contacto con los míos, en aquel instante dejé de oír los gritos de las personas que esperaban impacientes la pelea. En aquel momento perecíamos ser tan solo nosotros dos. Una corriente de electrizante energía recorrió mi cuerpo de pies a cabeza.
- ¿Por qué te mira así?- Cuestionó Beth, su expresión había cambiado a una un tanto furiosa. Supe al instante que su cabeza estaba empezando a imaginar cosas, que seguramente serían verdad pero que nunca afirmaría frente a ella.
- No tengo ni idea de lo que me hablas.- Contesté sin romper el contacto visual con Ian. Alguien me agarró de la cintura y me atrajo hacia su cuerpo para besar mi mejilla, el contacto visual se rompió y pareció no haber existido. Me giré y regañé a Stefan por haber interrumpido lo que hubiese sido aquello. Cuando volvía mirar al cuadrilátero Ian ya había recibido un par de golpes y estaba golpeando al otro chico. lo tiró al suelo y se sentó sobre él para propinarle un puñetazo en la cara causando que un hilo sangre asomara por su amoratada nariz, si seguía golpeándolo así lo mataría. El presentador pidió que se detuviese, pero Ian parecía no escuchar a nadie. Se separó unos pasos de su rival y miró a la multitud intentando encontrar algo, la gente gritaba, pero cuando sus ojos se detuvieron en los míos pareció envolverme en la misma burbuja en la que se encontraba él. Dejé de oír ruido, me separé de Stef y dí un paso decidido hasta el cuadrilátero, pero un golpe en su rostro causó que todo volviera a la normalidad. Ante la sorpresa solté un grito que llenó todo el lugar. Salí corriendo para posicionarme frente a él, su cara estaba llena de sangre, no se movía, fue en ese momento en el que mis oídos se entaponaron con los acelerados latidos de mi corazón y el miedo se apoderó de mi.
- ¡Ian!- Susurré.- Por favor háblame.
IAN POV's
El tipo me pegó un puñetazo que me dejó tirado en el suelo. Mi cuerpo no respondía, pero podía oír a la perfección las palabras de Em. ¿Emily?, ¿Por qué me estaba llamando por mi nombre si se suponía que iba oculto?. Intenté abrir mis ojos pero se negaron a obedecer mis ordenes.
- ¡Ian!- Volvió a susurrar.- Háblame.- Repitió.- Idiota.- Escuché como su voz salía con dificultad desde lo más profundo de su garganta.- Por favor.- Rogó.- No te vayas, te necesito. No se si mañana me arrepentiré de lo que siento por ti, ¿quien dice mañana?- Rió.- Quizás me arrepienta en unos segundos.- Maldita sea. Emily se estaba declarando a unos centímetros de mi y no podía abrir mis estúpidos ojos para hacerle saber lo profundamente loco que estaba por ella.- Pero en este preciso momento siento que es lo correcto.- Sentí como tomó aire entre las lágrimas y lo expiró trayéndome su exquisito olor a caramelo. Quería levantarme, acabar con la pelea y besar a la chica más adorable del maldito planeta.- Te quiero, no se cuando empecé a sentir esto por ti.- Acercó su mano y rozó la mía intentando pasarme energía.- Pero te quiero, hoy, mañana y quien sabe si en un futuro.- Soltó una carcajada ante su propio comentario. Su risa era música para mis oídos. Se notaba tan sumamente preocupada, me hubiese gustado levantarme del suelo y envolverla entre mis brazos para hacerle saber que todo estaba bien, que esta a salvo.
En cuestión de segundos, el movimiento llegó de nuevo a mis músculos, permitiéndome que mis ojos se abrieran. Al principio la luz me cegó pero poco a poco me fui acostumbrando. Frente a mi esta Emily, con la cara enrojecida a causa de las lágrimas que seguían saliendo de sus hermosos ojos azueles y caían por sus mejillas hasta desaparecer. Parecía un sueño, increíble y perfecto. Alcé una de mis manos y la acerqué hasta su rostro para limpiar los restos de rimel de sus suaves mejillas. Si no hubiese estado en mitad de la pelea me hubiese acercado a ella y unido nuestros labios.
El árbitro inició la cuenta atrás, pero me levanté como pude, antes de que le diera la victoria al otro chico. El amigo de Emily, cuyo nombre desconocía, se acercó hasta su lado y la cogió de la mano para que se separase del cuadrilátero. La mano que le quedó libre la colocó en su cadera provocando que una corriente de energía negativa recorriera todo mi cuerpo, los recuerdos de la noche anterior se instalaron en mi cabeza, era demasiado tarde, la rabia se había apoderado de mi. Le lancé una mala mirada a Emily, la cual parecía totalmente sorprendida y me volví para acabar de una vez con la maldita pelea.
Los espectadores estaban ansiosos por saber el resultado final, tan solo podía quedar uno en pie y tenía bastante claro que ese debía ser yo.
Mi rival parecía asombrado, puesto que no esperaba que me levantara después de los golpes que me había asentado. Dejé de pensar en Emily y en su amigo para centrarme en obtener la victoria.
Me posicioné de lado e intenté como pude esquivar uno de los golpes que me había lanzado. Gracias a horas de entrenamiento pude separarme rápidamente y asentarle un buen puñetazo en la madíbula, lo que ocasionó que cayera al suelo y yo pudiera arremeter contra él.
Pero la mala suerte me acompañaba ese día, porque justo cuando iba a finalizar con la maldita pelea, fijé mi mirada de nuevo en Emily y la vi con sus hermosos ojos cristalizados y junto a ella su amigo la consolaba, lo que causó que mi vista se nublara de rabia y diera golpes al azar. Impresionado con mi actitud y comportamiento, mi adversario intentó volver a noquearme pero al sentir mi rabia en las venas pude propinarle un buen golpe y dejarlo inconsciente en el suelo del cuadrilátero. La multitud gritaba el nombre del ganador y vitoreaba en aquel viejo y pequeño almacén.
En el momento en el que el árbitro levantó mi mano dándome la victoria, mi vista se nubló y comenzaron a pesarme los párpados. Antes de darme cuenta de lo que me estaba pasando caí al suelo de rodillas y todo a mi alrededor se cubrió de una oscuridad plena. Me había desmayado.EM POV's
Ian se desplomó a los pies del que había sido su adversario. Había ganado, pero ¿a que precio?.
El silencio reinó durante un largo período de tiempo, todo el mundo tenía los ojos fijos en el cuerpo derribado. Todo pareció detenerse, los gritos de la multitud, las palabras que salían de la boca del árbitro... Los cuatro nos miramos sin dejar de lanzar miradas a la bestia, estábamos en shock.
Fue Beth la primera en salir del estado en el que nos en el que nos encontrábamos, acarició la mano de su novio y este volvió en si con ella. Mark parpadeó un par de veces para asimilar lo sucedido y fue a por su amigo.No olvides darle a la estrellita 🌟 si te ha gustado.
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Dulce Provocación #DP
RomansaSeamos sinceros, ¿Quién se enamoraría de mí y mis mil demonios? ¿Quién se enamoraría de mí y mis cicatrices? Todo empieza con un viaje que sin saberlo, lo cambiará todo. Entre el amor y el odio, la pasión y el deseo pero sobre todo entre los secreto...