Criminal |Cameron Monaghan| +18

10.

-¿Como va estar doctor?-. Oí una voz que preguntaba, sentía un fuerte dolor en la cabeza y todo mi cuerpo prácticamente, apreté mis ojos para así poco a poco abrirlos.

-Va estar bien, tiene unas costillas rotas pero pude arreglarlas solo que no podrá moverse por lo menos unas cuantas semanas, por suerte no hubo heridas internas sino tendría que ir al hospital-. Dijo una voz masculina, me sentía algo desubicada pero mire a todos lados y note que estaba en mi habitación mi vista fue hacia la esquina de la cama donde estaba Gretta con un hombre.

-Mi niña-. Dijo ella quien se puso a mi lado con una pequeña sonrisa cálida yo trataba de sonreír pero pues no podía me dolía la cara.

-Bien aquí esta la receta de las medicinas que tiene que tomar y digale al señor Monaghan que cuide más a su esposa con permiso-. Con eso se fue el médico, pero porque Cameron tendría cuidado conmigo él me golpeó pero no se que fue lo que paso después de caer inconsciente, mire a Gretta con una expresión un tanto preocupada.

-Gretta... ¿Qué paso?-. Pregunte trate de moverme pero simplemente sentí dolor que me hizo gemir o más bien casi gritar.

-No cariño no te levantes-. Dio un pequeño suspiro, tomo mi mano para después mirarme a los ojos algunas lágrimas salieron de ellos pero aún así comenzó hablar-. Cuando te oí gritar fui por las llaves de la habitación pero cuando entre Cameron había parado de golpearte jamás había llegado a ese extremo de golpear a una mujer con el cinturón, solo una vez lo vi así de loco a gritar y golpear hace muchos años no pensé que el volviera hacerlo, mi niña-. 

Acarició con delicadeza mi mejilla su caricia era tan calidad ella me hacia sentir como si fiera alguien especial y Gretta me hacia sentirla como una madre.

 La puerta de la habitación se abrió haciendo que saltara del susto pensado que era Cameron pero no me equivoque era Dylan quien se veía agitado y con la morada completamente preocupada, camino hacia mi para ponerse a mi lado, Gretta come sonrió y se levanto de la cama para así dejarnos solos.

-Emilly...Emilly yo lo siento no se porque te bese no debí eres la prometida de mi hermano no debí haberlo echo estuvo mal de mi parte pero es que eres una chica tan linda y divertida y yo...-. 

Puse dos de mis dedos en su boca y negué con la cabeza, quite mis dedos baje la mirada a mis manos por un momento.

-No le pidas disculpas solo sentiste el impulso, Dylan eres un chico muy lindo pero hay algo que tienes que saber-. Subí la mirada para ver a Dylan a los ojos, seria capaz de decirle que su hermano me compro ya que mi madre supongo yo hizo un trató con él aun sigo un poco confundida porque realmente no se si de verdad mi madre me vendió pero ya lo descubriera-. Tu...tu hermano me...-. 

Ya no pude seguir diciendo cuando el susodicho apareció serio y firme, Dylan se levantó de su lugar se acercó a mi para darme un beso en la frente y salió de la habitación no sin antes darle una mirada asesina a su hermano, la habitación quedo en silencio por un momento pero yo quite las cobijas de mi cuerpo para así poder salir de la cama pero el fuerte dolor me invadió por completó sentí unas manos a mi alrededor.

-No debes estar pie-. Dijo Cameron pero yo simplemente quite su mano de mi de golpe no quería que me tocara después de lo que me hizo.

-¡No me toques pervertido de mierda!-. Gemí otra vez y volví a la cama, quería llorar pero no quería mostrarle débil ante él.

-No puedo creer que seas tan terca, después de que te acuestas con mi hermano no me dejas ayudarte-. Gran descarado de mierda, lo mire mal pero muy mal.

-¡Nunca me he acostado con tu hermano pero prefiero hacerlo antes de casarme contigo! ¡No te quiero cerca de mi ni un maldito segundo de mi jodida vida, ahora largarte!-. 

Él no dijo nada y lo único que hizo fue salir de mi habitación sin decir nada y me alegraba no lo quería cerca de mí, como quisiera estar muerta en este momento y no verle la cara este idiota, porque me tenia que pasar esto a mí porque.