52.

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Este lugar me causaba escalofríos, las ventana estaban llenas de rejas, las mesas eran de metal frio que sentía que mi trasero se estaba congelando, Matt jamás me dijo que me harían una revisión profunda pero por suerte lo hizo una policía que no fue tan dura conmigo. Anoche no puede pegar el ojos pues tenia muchas ansias de venir a verlo, no sabia como iba reaccionar cuando lo viera o como iba él iba a reaccionar como solo verme, tal vez no le daría felicidad, ahora mi mente estaba algo negativa eso hacia que los nervios se me pusiera de punta. 

El sonido de una campana y una puerta siendo abierta hicieron que me girara de mi lugar para poder ver quien entraba a lo mejor era otro preso que tendría un vis a vis, solo era yo y otra señora, al girarme bien fue ahí cuando lo vi, él me estaba mirando con seriedad, yo me puse de pie los dos comenzamos a caminar hasta quedar completamente cerca, por un momento mi cerebro no supo que hacer pero ahora creo que el que tenia el control de mi cuerpo era mi corazón (que loco) pero me abalance hacia Cameron para poder abrazarlo al hacerlo él me correspondió, mis lagrimas comenzaron a salir mojando un poco su playera amarilla. Lo echaba de menos, sentía como su brazos me brindaban calor y seguridad. 

Nos alejamos, él acuno sus manos en mis mejillas haciendo que lo mirara, pero sus labios fueron hacia los míos para darme cortos besos, amaba su besos, lo amaba a él, amaba al mayor idiota que haya habido en la tierra.

-No puedo creer que este aquí....Emilly te echaba de menos no sabes cuanto espere este momento pensé que Matt no te había encontrado ya que no había venido en días-. 

Pase mis manos hacia sus  hombros para poder sostenerme porque tantas emociones encontradas sentía que me iba a caer. Tomamos asiento en los asientos de metal frio, nos tomamos de las manos y comenzamos hablar. 

-Yo también te estaba buscando, Ben no me quería decir donde estabas pero ahora que Matt vino a verme me dijo que estabas aquí y que tu también me estabas buscando, sentí tanta alegría al saber que estabas bien-. Beso los nudillos de mis manos que hizo que sintiera mariposas en el estomago. 

-Fui un imbécil al no haberte dicho la verdad, te lo quería decir pero tenia miedo de que te alejaras de mi, cuando me llevaron preso no sabia que había pasado contigo hasta que Matt me dijo que una doctora de logro salvar de seguro no es fácil para ti vivir con tu padre después de lo que paso-. 

Al decir eso sentí que era el momento que estaba esperando para mostrarle algo que de seguro le haría mucha alegría, me gire para mirar a la policía a quien le dije que le iba a dar una señal de que dejara pasar a la otra persona, Cameron me miro un poco confundido pero cuando se oyó que la puerta se abrió me puse de pie para cuando la policía entrara me entregara a mi bebé, tome a mi pequeña que estaba despierta con su chupón en la boca, Cameron su puso de pie sin poder creer lo que sus ojos estaban viendo, vio a Adelein y después a mi. 

-Ella es Adelein y es tu hija Cameron-. Los ojos de Cameron se abrieron al máximo sin poder creérsela. 

-Mi...mi hija-. Sonrió con nostalgia-. Puedo...puedo cargarla-. Asentí con la cabeza, se la di con cuidado para que estuviera en sus brazos, el volvió a sentarse en la silla para poder estar más cómodo y yo también lo hice, Cameron beso la mejilla rosada de Adelein quien solo seguía con su chupón mirándome-. Es la bebé más hermosa que haya visto en toda mi vida-. 

Las lagrimas nuevamente no tardaron en salir, esto era algo que jamás se me iba a olvidar, la imagen de Cameron cargando a su hija. Él me miro con otra sonrisa preocupada. 

-¿Donde está viviendo?-. Pregunto. 

-Ahora estamos viviendo en una casa rentada de mi padre, yo estoy trabajando en un súper mercado de lunes a miércoles, la vecina cuida de Adelein. No nos hace falta nada ella es una niña muy tranquila-. Cameron asintió y miro a la niña.

Algo dentro de mi creció, algo me decía que tenia que salvarlo, quería sacarlo de este agujero en el que estaba metido, lo necesitaba en mi vida, quería que estuviera en nuestras vidas. Cameron era el amir de mi vida, estaba profundamente enamorada de él y ahora que lo veía con su hija en brazos me confirmaba a un más que él tenia que estar a fuera de la cárcel y yo no esperaría ningún maldito juicio para saber lo que sucedería con él, Cameron saldría de ahí sin importar lo que tendría que hacer ni el riesgo.  

-Cameron-. Le llame alzo la mirada de su hija para mirarme a mi-. Saldrás de aquí-. 

Él frunció el ceño por unos segundos

-¿De que estabas hablando Emilly?-. Pregunto sin entender a lo que me refería. 

-Todo saldrá bien Cameron ya lo veras-. 

Eso fue lo ultimo que dije, ahora hare lo que una vez hizo conmigo, salvarme.  

Criminal |Cameron Monaghan| +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora