Criminal |Cameron Monaghan| +18

17.

Y entonces paso que hoy se cumplía otro mes de estar en esta maldita casa con Cameron Monaghan, durante el transcurso den mes no le había dirigido la palabra para nada, lo único lo que así era: Levantarme, bañarme, comer en mi habitación, leer un buen libro, ver películas en Netflix (que por cierto Cameron contrato para mi para que yo no le aburriera) salía al jardín para o rearme y por último ayudar a Gretta en la cocina, ella al principio no quería pero le había dicho que quería aprender a cocinar para cuando me casara pudiera atender va mi esposo como se debía, Gretta estaba encantada con toda esa historia barata y ya cuando Cameron volvía del trabajo yo ya había preparado todo de mi cena y no me veían hasta la mañana siguiente. Pero bueno lo mejor de todo era que empezaban las fiestas navideñas y eso le hacia muy feliz, la navidad en la época de todo el año que amo, pero la verdad no se si Cameron festeje la navidad el podría ser un Grinch y dejarme sin ella.

Me levante de mi cama para poder darme un merecido baño, me estire un poco para hacer que mi espalda tronaran y así después tomar mis cosas del armario y entrar al baño, comencé a tararear una canción navideña, cuando abrí la puerta del baño solté un gran grito.

-¡Ah! ¿Qué haces aquí?-. 

Él me miró sin darme mucha importancia, tenía una toalla que le rodeaba la cintura cubriendo su parte intima, válgame dios este hombre si que hacia ejercicio, su espalda estaba muy bien trabajada. Concéntrate Emilly  deja de verle la espalda...pero que trasero tiene "puta madre".

-Es mi casa y son mis habitaciones puedo entrar cuando quiera y a la hora que quiera-. Comenzó afeitar sus mejillas-. Además la regadera de mi baño no comenzó a salir agua y como eres la habitación más cerca de la mía vine aquí-. Es un maldito descarado.

-Si pero al menos pudiste avisar de que ibas a venir a bañarte aquí, que tal si yo entraba desnuda o si estaba en una situación intima-. Me cruce de brazos, camero se giro para verme de frente y yo pude ver lo bien trabajado que estaba su abdomen " de seguro hace mucho ejercicio, maldición otra vez".

-Seria una oferta muy tentadora verte desnuda o incluso verte masturbándote, créeme no hay cosa más erótica que ver a una chica darse placer-. 

Camero comenzó a caminar así mi y yo daba pasos hacia atrás pero la maldita pared se interpuso en mi huida, él sonreía con victoria al haber acorralado. Mis pulso estaba acelerado y mi respiración se hacia cada vez más irregular, su solo a cercanía me causaba escalofríos. 

-¿Que pasa Emilly? Acaso te pongo caliente como tu a mi-. Sin poder evitarlo mire hacia abajo cuando vi un enorme bulto creciendo, mis manos fueron a mi boca sin poder creer lo que estaba viendo me iba a mover pero Cameron me tomo de la cintura y me pego a él y solté un gemido.

-Ah...n-no C-Cameron-. Él se limpio la crema de afeitar y se acerco a mi cuello para darme pequeños besos en mi cuello, mis piernas comenzaron a temblar, mis manos fueron hacia sus brazos.

-No te resistas mi pequeña-. Llevo mis manos a su cabello para que yo enterara mis dedos en su rojizo cabello, tomo mi trasero y hacerme dar un brinco para colocar mis piernas en su cintura, joder al alzar la mirada vi nuestra imagen en el espejo, esto era muy erótico, parecía la película de Tom Cruse y Nichole Kidman cuando hacen el amor frente al espejo. Cameron comenzó a mover sus caderas para hacer fricción con las mías para hacer que nuestras intimidades rozaran, en este momento agradecía que tuviera short delgado sino, no podía sentir esta sensación tan placentera. 

Sus labios no dejaban para nada mi cuello, baje una de mis manos hasta llegar a la toalla que lo cubría para así quitársela, joder tenia un hermoso trasero.

-Ah Cameron-. Comenzó a moverse con más rapidez que mis gemidos no podían ser controlados.

-¿Te gusta Emilly? Te gusta como se siente mi verga cerca de la tu coño húmedo, lo puedo sentir Emilly, siento como te pones húmeda-. 

Sus palabras por alguna extraña razón me gustaron, me prendían cada vez más. Yo como pude moví las mías para también darle placer a él, beso nuevamente mi cuello, joder esta era la sensación más deliciosa y exquisita. Estaba en el maldito cielo lo hacia como un maestro, no me lo imaginó dentro de mi ahí si me voy a morir.
Estábamos a casi nada de llegar a ese punto delicioso cuando de pronto.

-Emilly...-. La voz de Gretta nos saco de ese transe, ella cerro la puerta y yo me baje de Cameron, Mierda que pena con ella porque sabía cuanto odiaba a Cameron.