The Boy Next Door ©

»Capítulo 40«

- ¿Qué chico trae a su novia de compras?- Lo miré a los ojos.

- Yo lo hago.- Guiñó el ojo.- No salgas todavía.

- Ehm... Okay...- Suspiré y me quité el cinturón mientras veía a Jake caminar de su lado a mi puerta. Si imaginaron que me abrió la puerta, imaginaron bien.

- ¿En serio Jake?- Salí del auto.

- Si, en serio.- Rodeó mis hombros con su brazo.- Esto es otra cita, por si no lo sabías.- Rodé los ojos mientras sonreía.

Vuelvo a repetir, no puedo perder a Jake. Es...Como que me llena. Jake es el entusiasmo por las mañanas. Jake es la intriga de saber que va a hacer por mi, la intriga de saber si se va a sacrificar por salvarme la vida a mi... Tal vez yo no sea suficiente para Jake. Tal vez Jake y yo no debamos estar juntos...

Jake y yo entramos por las puertas automáticas, por un instante pensé en soltar su mano, pero no creo que logre zafarme por la manera en que la estaba agarrando.

- ¿A que tienda quieres ir?- Me miró sonriente.

- Ehm...- Miré alrededor, ¿cuál tienda puede despejar mi mente de mi súbito cambio de humor?- Esa.- Señalé una al azar. Jake sonrió y caminó aún sosteniendo mi mano.

¿Por qué no arriesgarme? ¿Por qué no disfrutar del ahora sin preocuparme del mañana? Lo que tenga que pasar, pasará y será por una buena razón.

Jake camina a mi lado sonriente, mientras yo tengo una batalla mental.  Entramos a la tienda e inmediatamente pego un chillido. Jake me aferra más a él y su mano se acerca a su cintura.

- ¡Que hermoso ese vestido!- Corrí hacia el vestido de mi color favorito.

- ¡Heavenly!- Miré a Jake quien parecía enojado.

- ¿Qué?

- No vuelvas a hacer eso, mujer. Me vas a sacar el corazón de sitio.- No pude evitar estallar en risas.

- Perdón. Es que no me puedo-–Volví a chillar.- ¡Mira esos zapatos!

- ¡Heavenly!- Ignoré a Jake y corrí a los zapatos.

Después de todo no fue mala idea venir aquí.

(...)

Jake y yo estábamos sentados en el FoodCourt, comiendo unos deliciosos nachos con queso. Ahora solo observaba a Jake comer, pensando si en verdad debo estar con él... Y a la vez pensando en que debo dejar de pensar eso y pensar que sí debo pensar en estar pensativamente con él... No, olviden el "pensativamente".

- Jake.- Me miró, se veía tan tierno con queso en las comisuras de sus labios. Me quedé en silencio por unos segundos.- ¿Me amas?- Lamió el queso en las comisuras de sus labios y se enderezó.

- Más que a mi vida, y lo digo en serio. Mi vida apestaría si tu no estuvieras conmigo.- No sonrió, tampoco yo porque entendí que hablaba en serio.

Sentí mi pecho calentarse y como si mi corazón se estuviese inflando. Definitivamente me tengo que quedar con él. Es tan dulce que me tortura, me hace sentir como si no lo mereciera. Jake me hace sentir más segura de mi misma y eso es lo que siempre quise en una relación.

- ¿Por qué la pregunta?- Lo miré a los ojos, no sé porqué rayos me puse tan nerviosa.

- Bueno... Digamos que en estos días... Estoy teniendo problemas de autoestima...- Entrecerró los ojos.

- ¿Acaso estás... en esos... días..?- Asentí nerviosa, no era del todo mentira... Olviden eso.- Ah...- Ambos nos callamos, y esta vez si era un silencio incómodo.

- ¿A que tienda vamos después?- Pregunté tratando de romper el silencio.

- Tú decides.- Sonrío.

- ¿Quieres ir a una tienda de videojuegos?- Juro haber visto que su rostro se iluminó.

- ¡Sí! Quiero decir...- Se aclaró la garganta.- Si, ¿por qué no?- No pude evitar estallar en risas.

Ya, Jake es simplemente perfecto.

- Me gustó eso de que tu lado infantil saliera a la luz.- Dije entre risas.

- Shh... Tú no viste nada.- Me dedica una sonrisa torcida, haciéndome entender que hay una risa que quiere esconder.

(...)

- Entonces, ¿éste o éste?- Señala los dos videojuegos  que tiene en mano.

Señalo uno de carreras, ya que el otro es de matanzas y esas cosas que no me gustan. Puagh. Y en estos momento no creo que ayude.

Jake insertó el CD en el DVD y encendió la tele de mi habitación. Conectó los controles de PlayStation que ya tenía a la tele y se sentó a mi lado sonriendo como un niño. Me quedé mirándolo, se veía tan tierno.

- ¿Te gusta lo que ves?- Río.

- Ay no, pfff... Por favor. Solo miraba la monstruosidad que está a mi lado.- Giró su cabeza lentamente mientras su boca se abría a la par.- No te hagas, sabes que es sarcasmo.- Rió y me abrazó, casi tumbándome al suelo.

¿Y saben que es mas tierno? Me está dando besitos por toda la cara. Parece que en verdad quiere derretirme.

- Gracias por acompañarme hoy.- Sonrió. 

- Gracias a ti por llevarme.

La cara de Jake estaba cerca de la mía mientras miraba mis ojos con esos ojos tan tiernos que ahora tenían como una chispa.
Inesperadamente, los labios de Jake ya estaban acariciando los míos. ¿Qué no les digo que quiere derretirme?
Se despegó lentamente y besó mi mejilla.

- Te amo, nunca lo dudes. ¿Me escuchaste?- Asentí.- Ahora, a jugar.- Sonrió y me entregó uno de los controles.

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Perdooooooooooooooooooóoooooooonnn! Lo sé, otro capítulo corto. Pero se los debía y estaba desesperado por ello. Y perdonen si está aburrido. El próximo capítulo será más interesante... Bueno probablemente porque ustedes son quien lo deciden.
Jeje

Chao <3 no me maten pliz