The Boy Next Door ©

»Capítulo 32«

Ya habíamos... Más bien... Jake había ordenado y pagado los mantecados para cada uno. Le insistí que yo pagaría el mío pero se negó rotundamente, hasta me obligó a sentarme y amenazó con que no compraría el mantecado hasta que me sentara. Como soy muy buena actora, le pedí otro sabor de mantecado que no sería de chocolate como siempre lo pido, solo para confirmar que lo que dije hace un rato que supuestamente estaba pensado era supuestamente cierto.
Por fin, llegó con mi mantecado de "Cookie dough" y se sentó en el asiento que estaba frente mío con una ligera sonrisa.

- Gracias.- Sonreí ligeramente mientras Jake empujaba el pequeño vasito con mantecado hacia mi.

Tomé una cucharada y comencé a masticar las pequeñas chispas de chocolate, miré a Jake quién comía su mantecado entretenidamente y volví a mirar mi vasito. ¿De verdad le gustaré? Sé que ha hecho varias cosas que lo demuestran, pero tengo el mal hábito de dudar. Siempre he dudado desde lo que pasó con Michael. Y ahora gracias a eso me estoy preguntando si de verdad le gusto a Jake.

- ¡Heavenly!- Mis ojos volaron a los suyos.- Te estoy hablando.

- Perdón, ¿qué dijiste?- Dije tranquilamente.

- Pregunté que si te gustó tu mantecado.- Arqueó una ceja.

- Ah si...- Volví a mirar mi vasito de mantecado mientras tomaba otra cucharada.

- Hey, ¿qué te pasa?- Su rostro se veía claramente preocupado.

- Oh, estoy bien...- Le sonreí mientras el entrecerraba sus ojos.

- ¿Segura?- Asentí.

- Solo me... Estaba...pensando...- Volví a mirar mi vaso.

- ¿Se puede saber de qué?- Metí una bocanada del mantecado a mi boca.

¿Por qué tiene que ser tan curioso?

- Mmfj hujum...

- Para, para, para...- Dijo rápidamente.- Primero traga y luego habla, yo aquí puedo esperar.- Sonrió medio maliciosamente.

Suspiré rendida y tragué.

- Solo estaba pensando ehm... Sobre mañana, mañana vamos al nuevo instituto y eso... ¿Me pone nerviosa?- Entrecerró los ojos.

- ¿Me lo dices o me lo preguntas?- Rodé los ojos.

- Mi li dicis y mi li priguintis...- Susurré para mi misma.

- Escuché eso.- Volvió a entrecerrar sus ojos.- Y, ¿por qué tanto problema con decirme en lo que estabas pensando? Sabes que puedes confiar en mí, ¿cierto?- Su rostro me daba una pista de que se sentía un tanto decepcionado.

- Si, lo sé.- Murmuré mientras dejaba la cuchara en el vasito de mantecado y lo miraba los ojos.- ¿De verdad te gusto?

Eso Heavenly, ármate de valor.

Noté como sus pómulos tomaban un ligero color rosado mientras miraba su vasito y jugaba con su mantecado. Y eso no pudo ser más tierno.

- Sí...  Y mucho.- Crucé mis brazos.

Ahora usaré una técnica que se me acaba de ocurrir. Consiste en decirle que me describa, si se vuelve al menos un poco poético, es probable que de verdad le gusto. Aunque de verdad no creo que funcione pero intentémoslo.

- Entonces descríbeme.- Noté que se tensaba un poco.

- Mm... Para empezar, eres hermosa, no puedo evitar no decirlo. Lo más que me gusta de tu personalidad, es esa chispa que tienes. Por más triste que estés, siempre estás sonriendo. También la forma en que alegras el día de las personas, por más cansada o triste que estés. Como tratas de ayudar a las personas con sus problemas,– Sentí como se formaba un nudo en mi garganta por el simple hecho de que Jake es la primera persona que por fin reconoce que a veces me cargo con los problemas de los demás.– Como eres amable con todo el mundo, incluso con las personas con las que estás molesta... Excepto por Carter, pero él se lo merece.- Reí ligeramente.- Todo eso y muchas cosas más... Solamente el hecho de que seas tú misma me encanta.- Sentí mis mejillas calentarse.

Volví a mirar el vaso pensando en todo lo que acababa de decir, analizando cada una de las palabras que dijo, provocando mariposas en mi estómago. Siempre había dudado de todo el mundo, incluso de Kate y mucho más cuando descubrí (gracias a mis amigos agentes) que el número desconocido que me enviaba mensajes de texto era ella, pero ahora en este instante me siento culpable de haber dudado de Jake. Jake sin duda es un chico bueno y amable, se preocupa por los demás. No puedo imaginarme el dolor que sintió y que todavía siente por lo que le pasó a su hermana.

(...)

Mi estómago se revolcaba con cada paso que daba alrededor del mismo parque iluminado al que habíamos venido antes mientras nuestros dedos estaban entrelazados. Otra vez, tenía una sonrisa que no podía esconder. Ambos estábamos en silencio, uno relajante, hasta parecía que nos comunicábamos en silencio.
Jake paró de caminar, me detuve también y lo miré.

- ¿Qué pasa?- Me miró a los ojos sonriente.

- ¿Por qué me pediste que te describiera?- Sentía que buscaba algo en mi mirada.

- Mm... ¿Para saber si era verdad..?- Dio un paso acercándose a mi.- ¿P-Por qué?- Sentía que mis mejillas se calentaban a medida que Jake se iba acercándose.

- Solo quería saber.- Ya estaba suficientemente cerca de mi, como para que su respiración rozara en mi rostro.- En verdad me enamoras Heavenly.- Mi corazón dio un brinco.

Enamorar y gustar son cosas sumamente diferentes, y Jake me acababa de confesar que estaba ENAMORADO de mi. Mi corazón latía fuerte y rápido, si te fijabas bien, podías ver mi pecho brincar. Lo que más me emociona ahora mismo, es ver que el pecho de Jake brincaba ligeramente al igual que el mío.

- ¿Cuánto te gusto Heav?- Lo miré a sus brillantes ojos.

- No me gustas.- Su sonrisa se desvanecía lentamente.- Me encantas, también estoy enamorada de ti.- Dije en voz baja, pero lo suficientemente alto para que Jake me escuchara.

Bajé mi cabeza ligeramente a la vez que sentía mis mejillas calentarse. Jake tomó mi barbilla con delicadeza, obligándome a mirarlo.

- Mírame.- Miré sus ojos.

Sus ojos miraban los míos atentamente. Probablemente mi cara se ve como la de una inocente niña pequeña cuando le está pidiendo algo a su mamá.

- Heavenly, eres lo mejor que se ha cruzado por mi vida, lo digo en serio. Me sentía vacío antes de que tú llegaras y ahora no, me siento completo. Antes buscaba algo que me hiciera feliz y justo cuando pensé en darme por vencido llegaste tú.- Su mano se movió hasta debajo de mi oreja, tomando parte de mi mejilla la cual estaba acariciando con su pulgar.

Mi corazón se aceleraba más al igual que mis mejillas se calentaban más. Su rostro se acercaba al mío, con sus ojos fijos en mis labios al igual que los míos en los suyos.

- Jake... No sé be...- Unos cálidos y suaves labios me interrumpieron.

AHORA SI ESTOY MUERTA. ¡¿DÓNDE ESTÁN LOS PARAMÉDICOS?!

Su mano libre se posó delicada y dudosamente en la parte trasera de mi cadera, apegándome más a él mientras nuestros labios seguían en su lenta y suave danza. De pronto sentía que no me quería despegar, no quería perderlo. Quería quedarme aquí con él. De pronto no me importa nada más que él.
Abrí mis ojos al notar que sus labios se despegaban de los míos.

¿Cuando enrollé mis brazos alrededor de su cuello?

Aún sosteniéndome cerca suyo, miró a mis ojos y la mano que estaba en mi mejilla pasó por mi cabello.

- Te amo Heavenly.- Sonrió.

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¡¡¡¡¡¡¡POOOOR FFIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIINNNNNNNNNNNNNNNNN!!!!!!! ¡POR FIN TUVIERON SU BESOOOO! *se limpia las lágrimas*

Tenía el corazón acelerado mientras escribía xD
Espero que hayan deeesfrutado de este capítulo (sé que si lo disfrutaron xD), yo disfruté muchísimo escribirlo, me imaginaba sus reacciones xD

LLEGAMOS A LOS 3K!!!!!!!!!! 
Quiero darles las gracias a toditas a ustedes termitas por todo su apoyo. He visto como de solo 10 votos en un capítulo ha aumentado a 60, e incluso hasta 100. Millones de millones de trillones de gracias ^–^

Baii <3 Os quierooo!