Lucas estaba pletórico. Con toda la suerte del mundo y gracias a la intervención de Adela, no solo había conseguido una buscadora para el equipo de quidditch de Gryffindor, sino que habían ganado contra Hufflepuff.
Sylvia había jugado bien, aunque estuvo muy nerviosa durante el partido.
Todos sabían lo inquieta y activa que era la menor de los Long, lo que nadie imaginaban es que padeciera de pánico escénico. Tal es así que había estado a punto de abandonar el campo de quidditch después de que los comentaristas la presentaran en su salida ante todo el público. Desde las gradas, pudieron ver como Lucas, haciendo honores a su capitanía, conseguía calmar a Sylvia con palabras serenas (aunque por dentro estaba más revuelto que un mar durante una tormenta).
Así, Sylvia despegó y recorrió rápidamente la pista de juego antes de que soltaran la snitch. Lucas la había alentado, pero la chica seguía nerviosa y sus hermanas lo percibían desde las gradas.
- Por favor, dime que no has tenido un sueño gris sobre Sylvia últimamente. – dijo Adela a Rose mientras miraba con preocupación los nerviosos movimientos de su hermana en el campo. Ganar o perder contra Hufflepuff era lo de menos, temía mucho más que Sylvia se cayera de la escoba.
- En realidad hace tiempo que no tengo ningún sueño gris. – le respondió Rose negando con la cabeza. Así era como llamaba a los sueños premonitorios donde ocurrían cosas malas o negativas. – Sin embargo, hace dos días tuve un sueño morado sobre Margo. Creo que sacará muy buena nota en el siguiente examen de Herbología. - Los sueños morados eran donde ocurrían cosas buenas o positivas. Rose había decidido llamarlos así porque el morado era su color preferido.
El partido transcurrió tranquilo y limpio: los jugadores de Hufflepuff eran demasiado honrados para cometer faltas y Gryffindor no hizo grandes jugadas. Aunque el estilo de los leones era mucho más perfecto que el de los tejones. La diferencia entre ambos equipos era evidente, pero fue un partido tan tranquilo que para muchos fue hasta aburrido.
Gryffindor tuvo durante la mayor parte del partido la posesión de la quaffle, marcando un tanto detrás de otro. El guardián de Hufflepuff era nuevo y parecía estar pasándolo peor que Sylvia. Pero Lucas, el guardián contrario, jugó mejor que nunca, parando la gran mayoría de tiros.
Después de casi tres horas de partido – transcurridas las dos horas y media, muchos alumnos e incluso algún que otro profesor habían llegado a abandonar las gradas-, fue el buscador de Hufflepuff, y no Sylvia, quien atrapó la snitch. Automáticamente se anotaron 150 puntos, sumando un total de 210 puntos para los tejones. Pero por desgracia para ellos, Gryffindor había anotado un total de 220 puntos.
La teoría más comentada durante los días siguientes al partido fue que quizás el buscador de Hufflepuff, encontrándose desesperado después del largo partido, apreciando la paliza que le estaban dando los leones, había decidido atrapar la snitch para acabar de una vez por todas con el sufrimiento. No le supuso la victoria, pero al menos el agonioso partido terminó. Tantas horas en el campo de juego acabaron agotando a ambos equipos. No eran profesionales, y fue notable por todos durante los últimos minutos del juego.
Lucas lo había celebrado tanto en la Torre de Gryffindor que alguien que hubiera entrado nuevo en Hogwarts podría haber llegado a pensar que habían ganada la Copa. Adela recordaba haber visto a Melinda y Zoe sentadas aparte, mirando recelosas al feliz capitán. Era obvio que a Melinda no le había gustado que su ex novio se lo estuviera pasando tan bien el mismo día que lo habían dejado.
Sylvia también estaba muy contenta a pesar de no haber conseguido la snitch y recibió unas gratificantes palabras del resto de compañeros del equipo, animándola y dándole consejos para el próximo partido. Ella, que era la más pequeña y menuda del grupo con diferencia, había asentido con la cabeza a todo lo que le decían, prometiendo que superaría su pánico escénico a base de entrenamientos.
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Historias de Hogwarts II: el Volumen
FanfictionEl profesor Jake Blake de Alquimia ha desaparecido y Alice, Adela y Megan continúan investigando más acerca del Proyecto Décima y la mujer de pelo rojo, que ahora sabemos que se llama Fabianne Aglier. La Décima se unirá como nunca antes lo había he...