Capítulo 45

315 30 17
                                    


-Jefa ¿no le quedan más cigarrillos? –pregunto la chica de cabellos castaños oscuros y un flequillo color turquesa cubriendo su ojo izquierdo.

-Ten –le extendió la cajetilla a la oji turqués la cual tomo uno de los cigarrillos bajando la mascarilla roja con el símbolo de venus y colocando el tubo entre sus labios –¿necesitas fuego? –pregunto Keiji.

-No gracias, ya tengo –dijo tanteando los bolsillos de la ramera que llevaba en esos momentos encontrando el objeto metálico, dio un par de vueltas a la rueda hasta que la llama encendió colocándola en la punta del cilindro blanco.

Ambas estaban a unas calles del instituto, en ese momento Keiji detuvo a la chica quien vio sin entender a su líder, con el rostro serio la rubia extendió una nota a la chica que tomando el cigarro con la diestra vio el papel que le extendía la rubia.

-no lo abras hasta que lleguen las cuatro en punto –ordeno firme mientras la oji turqués tomaba el sobre.

-¿Qué es esto? –cuestión viendo por ambos lados el sobre sellado.

-nada, solo haz lo que te diga bien –dijo para continuar el camino a lo cual la otra solo asintió guardando el sobre entre sus pocas cosas.

.:OoO:.

-no pensé que hoy también vendrías –comento Ayano mientras caminaba a un lado del mayor.

Como el día de ayer se lo había encontrado a unas cuantas calles en dirección a su hogar, no entendía la manía que le había dado a Yamada pero no se quejaba en lo absoluto ¿Por qué lo haría? Era su amado quien le acompañaba a la escuela, mientras más tiempo fuera capaz de pasar con él le hacía sentir mejor. Aunque aún tenía asuntos pendientes para poder ser finalmente feliz con Taro, y con asuntos se refería tanto a Rida y al molesto Gakusei, aunque de este no se preocupaba tanto prácticamente no podía acercarse a Taro porque este le repudiaba, una sonrisa maliciosa escapo de sus labios al solo pensar en lo frustrado que debía estar el oji azul.

-¿ocurre algo? –pregunto el azabache menor ante el silencio repentino del menor.

-¡¿Eh?! A-Ah n-no nada, nada no te preocupes –rio Ayano tratando de pasar desapercibido aquel pensamiento.

-oh...bueno –Yamada tampoco estaba muy bien, eso preocupaba al menor, tenía unas ojeras bajo sus ojos y no parecía estar muy animado, era obvio que había dormido mal pero al preguntarlo solo esquivo la pregunta.

Ambos continuaron su camino hasta el instituto, lentamente los estudiantes hacían su aparición por las distintas calles, jugueteando, bromeando entre ellos. Los ojos ónix de Ayano se fijaron en una cabellera pelirroja para su persona, trato de acercarse pero fue tomado de la muñeca por el otro.

-¿Qué ocurre? –cuestión aun sintiendo su muñeca aprisionada por el contrario.

-E-Esto, yo ¿p-por qué vas tan apresurado? –pregunto vendo fijo a Ayano.

-es solo que...creí ver a un conocido –respondió, cosa que sin darse cuenta molesto al mayor pero este lo disimulo, su agarre no se soltaba de la muñeca del menor.

-No, no te preocupes –rio Taro –tal vez lo veas al rato.

Si preguntar el menor asintió continuando con su camino junto al mayor pasando por alto la escena de casi celos de Taro. Al llegar al instituto los nervios del mayor se crisparon al ver de pie en las puertas del instituto al presidente del consejo con su sonrisa arrogante rodeado de un tumulto de chicas, el mayor esta vez tomando la mano del menor, el cual se sonrojo fuertemente, acelero el paso tratando de pasar lo más desapercibido que podían.

Just Love Me.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora