Just Love Me.

Capítulo 34

-En verdad gracias por ayudarme, a veces los chicos dejan todo desordenado –comento el de cabellos cian mientras colgaba las máscaras en su respectivo lugar en la pared, cercando a la utilería y vestimentas colgadas en los percheros.

-No hay de que, siempre estaré encantado de ayudarte –Comento mientras dejaba algunos vestidos y prendas sueltas en los baúles.

-He, Haruki eres un chico demasiado amable –comento el oji celeste mientras terminaba de colgar aquellas mascaras viendo a su alrededor si faltaba algo pero ya estaba todo ordenado –Bien eso es todo –Dijo soltando un suspiro, vio como el otro tenía problemas para cerrar el baúl.

-V-Vale, déjame terminar aquí y –Pero antes de que terminara las manos del otro se posaron sobre las suyas, de manera inmediata sus mejillas se tiñeron de un fuerte rojo que se extendía hasta sus orejas.

-No me creo que te cueste cerrar esto –Dijo mientras ejercía presión cerrándolo por fin, el otro solo callo –¿Haruki? –cuestiono mientras se levantaba viendo al otro que seguía en el mismo lugar.

-¡¿E-Eh?! ¡A-Ah no, no nada! Bien, como veo ya está todo listo –Hayato se levantó lo más rápido que pudo mientras aplaudía quitando el poco polvo que tenía en sus manos.

-Esto...Haruki podríamos irnos juntos hoy, claro después de encargarme del club –dijo el oji celeste rascando sus cabellos.

-C-Claro ¿Por qué no? He, he, he~ -Rio nervioso, se acercó a la mesa de madera donde su chaqueta y la del contrario reposaban mientras ordenaban aquel salón.

-Bien –Con cautela Sora se acercó al más joven viéndole con calma, a un par de pasos tras Haruki, quien trataba de arreglar las mangas desordenadas de su chaqueta, se abrazó al cuerpo de este sorprendiéndole, sus brazos se aferraron a la cintura del más joven y su cabeza se apoyó en el hueco entre el cuello y hombro del oji verde –Nos vemos en la tarde Hayato –murmuro mientras depositaba un suave beso en el oído del menor para luego separarse tomando sus cosas marchándose, dejando a un muy sonrojado Hayato mordiéndose el labio.

.:OoO:.

-Capitán –Llamo Shima, el oji negro levanto la cabeza que mantenía pegada en el suelo viendo a la chica de cortos cabellos castaños.

-¿Eh? ¿Qué ocurre Shita? –pregunto Budo, todos los miembros del club le veían preocupados.

-Capitán ¿está bien? –cuestiono esta vez Juku –Desde el lunes ha estado así ¿se siente mal o algo? –pregunto al castaño claro.

-Yo...realmente no lo sé, es...algo personal –Dijo desviando la vista.

-¡Vamos Masuta-san!¡Cualquier cosa nosotros estaremos aquí apoyándole –Dijo animada Rai. Budo soltó una suave risa aun con la cabeza gacha.

-Gracias...

.:OoO:.

-Nada, no hay huella de Shin –Murmuro Hido viendo el puesto vacío, con simpleza salió del club dejando a los otros cuatro con su lectura.

Los pasillos normalmente repletos de estudiantes se encontraban vacíos, muy probable por la temprana hora, pero aun así se sentían horriblemente fríos, a metros de llegar a la escalera una fuerte y fría brisa choco contra su nuca.

-¿Qué? –voltio notando a la chica pálida, con los ojos blancos le veía con suma tristeza, ya la había visto un par de veces pero esta era la primera vez que la notaba tan cerca de su persona –¿n-necesitas algo? –pregunto tratando de no molestar al ente.