¿Como era Paola capaz de tanto? Sin pensarlo mucho tenía que responderle su pregunta, con sinceridad, sin mentiras.
-Si. -No pude decir nada más, que poca ética, de mi parte. Pero no sabia que hacer.-
Se levanto, me abrazo, me beso y me agradeció
No entendí jamás porqué agradeció, no le hice un favor. Yo siempre quise casarme, y Paola era el amor de mi vida. Entonces, ¿Qué me pasaba? ¿Por qué me comporté de tal manera?
-Paola, te amo y me hace muy feliz que me hayas pedido unirme a ti de tal manera.
-Perdóname Samantha, pero tus emociónes demuestran lo contrario.
-Es tan solo que.... ¿Dónde nos casaremos? Esta sociedad solo sabe juzgar, y encontar dónde casarnos no será tan fácil.
-Mi amor, estamos en ¡Bélgica! aquí esta legalizada la unión entre personas del mismo sexo. Casate conmigo ahora mismo.
-Pero la familia, los preparativos....
-Al demonio todo eso mi amor, vamos a casarnos y ya.
-Pero.... Vamos a buscar donde casarnos.
Nada era más emocionante que la adrenalina corriendo por mis venas, y por alguna razón, esta "aventura" producía que dicha sustancia se liberara en mi. Ahora solo me encontraba pensativa por los preparativos de la repentina boda.
-Pero deja de preocuparte, aún nos quedan 28 días aquí, es mucho tiempo. ¿Por qué te preocupas tanto? deja qué las cosas se den como deben darse... Ven, vayamos a otro lugar. Solo te traje aquí para pedirte que fueses mi esposa.
-Jamás me permites planear algo.
-Imposible, yo te prometi este viaje...
Dejamos de hablar tanto y subimos al auto. Tomamos el camino que nos llevaba de vuelta a la ciudad. Y mientras íbamos en el carro, nadie mencionó una sola palabra, no comprendía que ocurría y suponía que esto era mi culpa, porque quizá mi reacción no fue la correcta, ni la más esperada. Es solo que yo no entendía que me estaba ocurriendo, no sabia si esa era mi manera de alegrarme. Pues si, me sentía feliz de que esto fuera a pasar, pero es como si yo hubiese entrado en una especie de shock o de trance, del que me resultaba complicado salir. Para cuándo dejé de pensar en tales cosas, ya estábamos llegando a la ciudad. Paola me pregunto si me apetecía comer, y con mucha cordialidad le respondí que yo no conocía nada de este país. Ella debía ingeniárselas.
-Me gustaría saber lo que te ocurre, estás a la defensiva.
-De verdad, no tengo nada amor.
Yo realmente no sabia que me ocurría, pero eso ya pasaría. Mi próxima futura esposa, tan paciente como siempre y tan maravillosa conmigo, me llevo a comer a un lugar bastante particular. Era pequeño, y no era lujoso, lo que para mi era maravilloso y perfecto. Tenía un ambiente basado en la magia, la hechicería... Era realmente hermoso, especial, único y diferente. Esto último siempre me cautivaba, me encantaban las cosas que marcarán la diferencia. Quizá por eso me encantaba Paola. Por cierto, mientas almorzábamos yo pensaba que decirle, quizá ella creyó que yo no estaba feliz con su proposición. Pero, yo debía hacerle entender que me había hecho la mujer más feliz del mundo. Entonces empece a analizar cada palabra que le diría, pero su hermosa mirada me desconcentraba, sus labios solo me incitaban a besarles por toda una eternidad, podría pasar horas besándola... ya por fin estaba volviendo a mi normalidad, me sentía mas segura de mi misma. Así que, me decidí a hablar.
Justos cuando abrí mi boca para hablar, una mujer se paro frente a nosotras, bueno realmente frente a Paola. seguidamente me dio la espalda y la saludos con un mucho aprecio y como si la extrañase mucho, dejando escapar de su boca y quizá del corazón la frase: "Mi Amor" .
Quede sorprendida, ¿alguien podia explicarme aquello y lo sucedido luego? Si, porque luego le planto un enorme beso en la boca.
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¿Amigas?
RomancePaola y Samantha son mejores amigas desde su niñez, pero han notado qué su amor sé ha tornado diferente y sentirán la necesidad de amarse una a la otra. No será fácil pero lucharán por su amor y por vivir una intensa relación.