Tamara
Aspen parecía la misma de siempre mientras se maquillaba, bastante natural, frente a su cómoda. Un vestido azul ceñía su caderas, aferrándose a cada sensual curva que poseía, incluído el bulto de su bebé de cinco meses dentro de su vientre. Esta no era más que una reunión de secundaria, pero por las miradas que Eric le lanzaba al pasar, no le importaba nada más que su esposa yéndose de la casa viéndose tan atractiva, y sin él.
—Sólo creo que es demasiado peligroso que salga con ese bebé dentro de ti. Podrían golpearla o algo.— dijo con el ceño fruncido cuando le pregunté por qué actuaba así, gruñendo cada vez que pasaba frente a la puerta de la habitación.
—Creo que sólo lo usas de excusa. Admite que te molesta que se vaya.— le susurré, viendo a Aspen ponerse un par de pendientes.
—¿De qué serviría? Ella se va a ir, sin importar lo que diga. Sin importar que yo podría ir con ella.— gruñó, sentándose en la cama con Cameron dormida en sus brazos.
—Creo que le gustará algo de celos, ¿A qué chica no le gusta eso?— pregunté, aunque por dentro yo misma estaba respondiéndome. Ciertamente, a mí no me gusta sentir los celos. Y que Aaron fuera la pareja de Aspen esta noche me molestaba aún más.
Claro, claro, Aaron y yo no éramos nada más que "follamigos", algo que se nos daba muy bien, pero que ellos de repente fueran tan cercanos y secretivos entre ellos, que Aspen me ocultara algunas cosas y el pequeño rumor del que Chad no quería hablar, me hacía sospechar terriblemente y los celos que me provocaban eran espantosos. Que mis hormonas estuvieran alborotadas con el embarazo no ayudaba.
—A Sexy no le gustan, ella dirá "¿Y quién te crees para decirme que hacer, Eric Briggs? ¿Qué está mal contigo? Bla, bla, bla, la revolución femenina y esas cosas." — dijo fingiendo su voz femenina. Me permitió que tomara a Cam de sus brazos, tan distraído que ni siquiera notó que Aspen estaba justo a su lado.— Por supuesto que la quiero aquí, conmigo, o allí afuera, juntos. Trabajo demasiado y cuando tengo un día libre, y quiero pasarlo con ella, se va de aquí para cenar con quién sabe cuantos fracasados. Quisiera poder ser desconsiderado, un maldito cavernícola que golpee su cabeza con un mazo, gruña "Tú, mi propiedad, mía" y la arrastre a una cueva, que bien podría ser cualquier sitio con ella en mis brazos...
—Deja de ser dulce, Eric Briggs, o no voy a poder irme esta noche.— murmuró Aspen, haciendo que Eric diera un pequeño salto por la sorpresa. Aspen se sentó sobre su regazo de lado y abrazó sus hombros, apoyando su frente en la suya.— Casi haces que quiera quedarme.
—Tú, mi propiedad, mía...— repitió Eric, abrazándola con fuerza y Aspen rió, dándole un pequeño beso, que le siguió a otro más.
Oh-oh, el monstruo de la envidia y celos estaba despertando de nuevo. No podía evitarlo. Estaba en presencia de la relación más perfecta que vi existir en la vida. En frente de la mujer que, no sólo tenía un buen esposo, sino que también iba a salir con MI follamigo. Así que, sí, Aspen no sólo me demostraba que no importaba a quién encontrara en mi vida, nunca podría igualar su situación, sino que también se llevaba a la distracción más grande que tenía afuera, a solas. Sólo ellos dos.
—Te diré algo, podemos salir a cenar mañana.— dijo Aspen con un guiño y Eric le dio una mirada que no entendí.
—¿No te lo dije ya? Hay reunión de banda mañana, para arreglar el tema de la gira y...
—Perfecto. Tú, la banda, Tam y yo.— dijo Aspen añadiéndome y la miré sorprendida. ¿Fui muy obvia con los celos? Quiero decir, ¿Mi cabello se había puesto rojo de la envidia o algo? Aspen sabía que Aaron y yo estábamos teniendo sexo pero sabía que no éramos nada más que eso, que no salíamos en citas ni nada. Además de eso, sin importar cuanto ocurrió, Intense aún era mi banda favorita y estar con ellos y oír cualquier adelanto de canción podría matarme de emoción.
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Bésame y prométeme un para siempre (Sonríe y dí que me amas #2) [TERMINADA]
Romance*LA SEGUNDA PARTE DE "SONRÍE Y DÍ QUE ME AMAS" YA ESTÁ AQUÍ! Dos historias. Dos amores. Un bebé. Y muchas dudas... Justin Newton ha sufrido bulimia desde que es un adolescente, ha tenido recaídas pero finalmente consiguió superarlas gracias...