Capítulo 33

38 0 0
                                    

Al día siguiente ya estaba mucho más tranquilo. El dolor de cabeza se había detenido y mi humor había mejorado también.

-Cariño, el desayuno ya está listo -escuche una voz que venía desde la entrada.

Me puse de pie y estire mis músculos, tome una toalla que encontré en el closet y camine fuera de la habitación, pero me congele al verla.

Era el mismo rostro, los mismos ojos, la misma nariz, la misma sonrisa, todo era exactamente igual, con la excepción de que este rostro parecía tener muchos años de experiencia, sin embargo la dulzura en la mirada era la misma.

-Hola -me sonrió- ¿Tienes hambre? Adelante, toma lo que quieras

Podía sentir mis mejillas arder, sabía que estaba muy ruborizado. Porque para empezar estaba en calzoncillos, y mi bóxer no era el apropiado para ese momento ¿Por qué me traicionas Bob esponja?

-Por favor Patrick, toma asiento -me dijo ella- ¿Quieres un poco de jugo?

-Si gracias -le sonreí y tome asiento- Usted es su...

-Soy su madre -sonrió ampliamente- Es agradable por fin conocerte, aunque debo ser honesta, no esperaba verte aquí

Quede muy impresionado, creí que jamás conocería a su madre, pero debí suponerlo al ver el increíble parecido entre ellas. Su madre era exactamente igual a ella, la única diferencia era que el cabello de Cassie era castaño y su madre era rubia.

-Mucho gusto, es un placer conocerla -extendí mi mano- Siento mucho haberme aparecido así, pero...

-No te preocupes, entiendo -me hizo un guiño- Ahora sírvete, ella vendrá pronto

Estaba muy nervioso pero no te voy a mentir, el desayuno estaba delicioso, ella hizo una torre grande de wafles, huevos, tocino, pan de pasas y un café delicioso.

-Listo mamá, ya regrese -entro ella por la puerta.

-Es justo lo que necesitaba -ella tomo la mermelada y la unto sobre una rebanada de pan.

-Buenos días -me susurro y beso mi mejilla.
-¿Esta muy rico cierto? -me pregunto riendo.

-Delicioso -le respondí, con mi boca llena de wafles.

La mañana estuvo excelente, su madre es un rayo de sol, tal como lo es ella. Es demasiado amable, atenta y sobre todo divertida, en muchas ocasiones dijo una que otra broma, y a decir verdad la pase muy bien. No solo porque ella jamás pregunto porque estaba ahí en calzoncillos, sino porque me dijo y la cito "Eres un buen hombre Patrick, por favor cuida de Cassie. Puedo verlo en tus ojos, sé que la amas. "

Ese mismo día por la tarde estaba en el sofá de casa junto a Ally, había llegado muy alterada, las lágrimas aun caían por sus mejillas y yo aún estaba esperando que me dijera que era lo que le ocurría.

-¿Ya estas lista para decirme que pasa? -le pregunte.

Ella negó con su cabeza, ocultada su mirada a toda costa de la mía. No podía entender que era aquello que la estaba preocupando tanto.

-Ally entiende que esta situación me preocupa... -le dije- No quiero presionarte

-Patrick, yo amo a James -me dijo- Lo amo con todo mi corazón, es un gran hombre, es muy inteligente, y sé que me ama

Hasta ese momento me miró. Sus ojos estaban hinchados y de un rojo muy intenso.

-Pero eso no es motivo para llorar -le dije- Es una buena noticia, entonces ¿Por qué el llanto?

-No quería hacerlo -me dijo- No estamos listos para esto, es demasiado

-Ally... -le susurro- No entiendo nada

Ella saco un sobre de su bolsillo y me lo entrego. Lo tome algo confundido porque aparentemente ese sobre era el motivo de su tristeza.
Cuando lo abrí no lo podía creer, era una noticia impresionante, inesperada, no tenía palabras para decir, literalmente podía sentir las palabras aculándose en mi garganta pero no podían salir.

-Es una inesperada noticia -le dije.

-No sé qué hacer Patrick...

-Todo estará bien -la abrace- Estoy aquí para ti

La historia que nunca contéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora