Un día mientras estaba caminando con Theo por el parque me encontré con Avan. Tenía en sus brazos una pequeña caja y un ramo de flores.
-No esperaba encontrarte aquí -le dije.
-No sabía que eras dueño del parque... -dijo molesto.
No se miraba bien, su rostro parecía cansado y pálido, tenía unas enormes ojeras debajo de sus ojos, los cuales estaban de un intenso color rojo.
-¿Has venido solo? -me pregunto.
-Mi sobrino esta por allá -señale- ¿Y tú?
-Solo...
Theo llego corriendo a nuestro lado, sus mejillas estaban de un carmín muy fuerte, su cabello un poco despeinado y su gran sonrisa lo hacían ver muy tierno.
-¡Patti! Yo quiero un globo -me dijo mirando hacia arriba.
-Vale -le dije riendo y buscando mi cartera.
-Espera, déjame comprárselo -dijo Avan tomando un billete de su bolsillo.
-No te preocupes -le dije- Tengo dinero
-Patrick, quiero comprarlo -dijo él muy serio.
Cuando el señor le entrego el globo a Avan este se inclinó frente a Theo, quedando a su misma altura. Lo miro por un par de segundos y sonrió al entregarle el globo.
-Gracias -le dijo Theo sonriendo.
-No es nada amigo -el alboroto su cabello y lo observo admirado- Sabes, me recuerdas a alguien
-¿A quién? -pregunto mi sobrino.
-A mi hermano... -de pronto su voz se quebró.
No podía creerlo pero podía jurar haber visto una lágrima en los ojos de Avan.
-¿Puedo abrazarte? -le dijo a Theo, el asintió.
Entonces lo elevo en sus brazos, Theo coloco sus pequeñas manos sobre sus hombros y recostó su cabeza sobre su pecho. Avan lo sujetaba fuerte, mientras cerraba sus ojos. Y cuando Theo se apartó de él sus ojos estaban llenos de lágrimas.
-Él también te extraña -coloco su pequeña mano sobre la mejilla de él- Eres un buen hermano
Estaba demasiado sorprendido, por alguna razón mi corazón se encogió, no conocía ese lado de Avan. Él regreso a Theo al suelo y le sonrió.
***
-Yo quiero un tequila -dijo James.
-Por favor, con calma -dijo William.
-¡Déjalo que disfrute! -le dije- Es su noche libre
Estábamos en un bar, era un sábado por la noche, por primera vez en muchos meses James no debía estar con Ally, y William...solo digamos que tenía la noche libre, por otra parte yo buscaba tener mi mente ocupada.
-Por favor quiero pensar en cualquier cosa menos en novias -dijo James- ¿Saben lo molesto que es no poder comerme un trozo de carne?
Ally era vegetariana.
-Mira el lado bueno, tu colesterol nunca estuvo mejor -dijo William riendo.
-Eso no es nada comparado con conocer a sus padres -dije bebiendo mi trago.
-¡Conocer a la suegra es lo peor! -dijeron ambos al unísono.
-Sientes que quieren matarte -dijo James- Aunque a veces creo que Ally lo hará con sus propias manos
-Tienes que admitir que aquella chica pelirroja estaba muy buena -dije riendo.
-Casi lo deja sin descendencia -susurro William.
-Aunque eso no supera la noche de mi cumpleaños, donde Edward llego -dije.
-¡Eso fue tan perturbante! -dijo James riendo- ¿Por qué rosas?
-¿Alguna vez han usado un par de medias? -William se puso de pie- Es extremadamente cómodo
-¡Pero no era necesario usarlas con las ligas!
-¡Combinaban! -William levanto sus brazos- Además, Edward lo disfruto mucho
-¡Por favor cállate! -estalle en risas- ¡Lo vimos con nuestro propios ojos!
Cuando gire para tomar mi trago encontré un rostro conocido entre la multitud, una sonrisa encantadora y unos ojos preciosos, los reconocería en cualquier parte. Les dije a los chicos que había encontrado a una vieja amiga, aunque estoy muy seguro que ninguno me escucho; me acerque a ella, cuando estaba lo suficientemente cerca toque su hombro.
-¿Lexi? -le pregunte sonriendo.
-¡Patrick! -salto a mis brazos- ¡Oh dios! Eres tú, no puedo creerlo
-¿Cuándo regresaste? -dije riendo- Han pasado años
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La historia que nunca conté
Romance"No la mires demasiado. Esos mundos cerrados y a la vez prohibidos suelen tener un poder de atracción" ~Mario Benedetti |Editada| Trailer: https://youtu.be/mLn1xmM8_NU