La historia que nunca conté

Capítulo 35

-Por favor Julio dame solo unos días más te prometo que estará listo

-Patrick, ¿Qué has hecho en estas últimas dos semanas?

"Vivir. Intentando no morir en el intento." Pensé.

-Se supone que debería estar listo -me dijo.

-Lo sé, lo sé pero tuve un inconveniente con mi fuente -le dije- Y aun no sé cómo arreglarlo

-Me dijiste eso meses atrás -me miro- No sé qué decirte Patrick, yo necesito el trabajo actualizado

Suspire hondo y ajuste la correa de mi bolso a mi hombro. La culpa era solamente mía.

-Por favor, solo necesito 48 horas -le dije- Solo eso te pido, estará listo, lo juro

Lo pensó un par de segundos.

-Vale, pero tienes solo eso, sin excusas, ni retrasos
-De lo contrario no estará a tiempo para presentarlo ante la junta directiva

Realmente no sabía cómo solucionar el problema. Porque por si no lo recuerdas la señorita Madelyn me había echado de su despacho y la última carta había sido muchos meses atrás. Porque como entenderás no podía verlas el mismo día que ella las enviaba, era mucho tiempo después. Así que si estaba muy atrasado.

-¡William! -le grite.

Estaba en la cancha de baloncesto, practicando sus tiros.

-¿Qué pasa? -me dijo sin mirarme.

-Tengo un problema -le dije- Necesito tu ayuda

-Si tiene algo que ver con el accidente en los baños... -arrojo el balón- No sé nada sobre eso

-No es... -le dije- ¿Qué paso en los baños?

-Nada importante -lanzo otro balón- ¿Qué sucede?

***

-No puedo creer que lo lograras -le dije.

-Soy el mejor -me dijo riendo- Todos lo saben

William era muy bueno cuando se trataba de abrir cerrojos. Él podía abrir desde una puerta hasta un casillero, sin que nadie se diera cuenta, y si piensas que el entro a la oficina de la señorita Madelyn sin su permiso y robo todas las cartas... Estas en lo cierto. Lo hizo.

-Necesito estas cartas -le dije- Es parte de mi trabajo

-Claro... Lo que tú digas -tomo un poco más de su sándwich.

-¿Qué significa ese tono? -lo mire acusadoramente.

-Patrick -masticó- Ambos sabemos que esto no es solo por tu trabajo...

-¿Qué otra razón tendría para ver estas cartas? -le pregunte.

-No lo sé -tomó un poco de jugo- Pero debe ser muy bueno para que te arriesgaras tanto

-Estas chiflado -le dije riendo.

-Por favor Patrick, te conozco demasiado, pero vale... piensa lo que quieras, yo sé lo que digo

Salí más temprano de la universidad para poder actualizar el trabajo. Eran un total de 7 cartas. Tome la primera y la abrí.

"Querido amigo:
Quiero creer en él. Quiero creer que él no me lastimara. Quisiera explicarle tantas cosas, decirle que no todo es verdad, pero me detengo, porque no quiero perderlo. En sus brazos me siento tan segura, como si al abrazarlo las piezas rotas regresaran a su lugar. "

Tome nota. Siguiente carta, #2

"Querido amigo:
Fui a visitar a mamá. Extrañaba su limonada.
Amo infinitamente a mi mamá, no estaría aquí sino fuese por ella, no necesito a nadie más si la tengo a ella. Porque sé que ella nunca me dejara sola. Así que no te preocupes, no dejare jamás a mi madre sola. Porque ella nunca me dejaría a mí."

Al parecer no estaba del todo mal, aún amaba a su madre, quiere decir que ella no estaba en depresión constantemente era solo por periodos cortos, y a veces largos.

Carta #3

"Querido amigo:
Se muy bien que no puedo tenerlos a ambos. Pero no puedo escoger, porque mi novio me ha amado tal como soy, con todas mis heridas. Y luego está él... quien sin importar todo lo que poco a poco sabe, aún está ahí, con su sonrisa dispuesto a continuar besando mi mejilla y enamorándome con pequeñas acciones cada día."

Es muy común que al iniciar una aventura sentimental con alguien tengas las esperanzas muy altas, el amor por nuevo crea falsas expectativas. Porque esperas demasiado de este nuevo sentimiento que te encuentras en una nube de fantasía, a la que muchas personas se aferran.

Carta #4

"En los últimos días intento recordar porque hago todo esto. Entonces te recuerdo. Todo esto lo hago por ti.

Pero pronto caerá la máscara, perderá la luz su intensidad, y entonces vendrás gritando por el desastre que he creado.

No quiero dejarte atrás. No, no quiero dejarte atrás.

Necesito dejarte ir. "

Lo primero que note fue la ausencia del saludo inicial, no estaba, esta vez estaba remplazado por el nombre de alguien más, que si bien no estaba escrito era más que claro que no era para la psicóloga. En segundo lugar, ella había creado algo solo para esa persona, pero por lo que parecía no podía mentir más.