No me dejes

7K 633 971
                                    

Tú (P.O.V)

¿Era una actuación? ¿Estaba tratando de manipularme, otra vez, para correr a sus brazos y seguir jugando conmigo? Fuera lo que fuera, no soportaba ver a Light de aquella manera.

-No... No llores- posiciono mis manos sobre sus mejillas y limpio las lágrimas que caen por ellas-. Calma, estoy aquí... Estoy aquí, soy la misma (T/N) de siempre.

Todos en la cafetería nos seguían viendo, especialmente una chica rubia a unas mesas de nosotros, ¿Qué no tenían cosas más importantes que hacer?

-Vamos a tu casa, ¿sí?

Yagami solo puede asentir y pararse del suelo con la cabeza gacha. Agarro mi mochila a la velocidad de la luz, dejo cualquier dinero sobre la mesa y salimos del establecimiento con los ojos de la rubia siguiendo cada uno de nuestros pasos. Si la volvía a ver, le iba a pegar un tiro en la mitad de su frente maquillada. 

Caminamos tan rápido y en tanta tensión, que ni Ryuk se atreve a abrir la boca. Light va todo el camino sollozando y cubriéndose la cara, provocando que sienta un vuelco en el corazón.

Entramos a casa de la familia, donde solo se encontraba Sachiko haciendo de comer:

-¡Mamá, ya llegamos!- Light habla con la voz temblando, pero su mamá parece no darse cuenta-. (T/N) viene conmigo, si nos necesitas, estamos arriba.

Subimos las escaleras lentamente y al entrar en la habitación, Ryuk decide quedarse fuera. Inmediatamente cerramos la puerta con seguro, me abalanzo sobre él y presiono mis labios con los suyos. Yagami me sigue el beso deseoso.

-Escúchame...- susurro con desesperanza-, nunca te voy a dejar, te lo prometí. Yo soy la misma chica que conociste en la primaria y lo seré por siempre.

-No me dejes- Light se aferraba a mí con todas sus fuerzas.

-Nunca- tire a Yagami a la cama, besándolo con fiereza-, Nunca, ni aunque mi vida dependiera de ello.

Yagami se apresuró a quitarme la camisa mientras yo besaba su cuello. No lo iba a dejar ir, no iba a dejar que nos separaran... Primero muerta que sin él.

*A la mañana siguiente*

Desperté con Light sobre mi pecho, acurrucado contra mi piel tratando de acercarme a él lo más posible. Acaricie su cabello con ternura, gozando de verlo en tanta paz.

Me gire a ver la habitación en busca de Ryuk, pero el Shinigami no se encontraba ahí, por lo que asumí que se debía de encontrar aún afuera. Sobre el escritorio, en una bandeja, había dos tazas de té y dos platos con algo de fruta. Las mejillas se me tiñeron de rojo y sentí la cabeza darme vueltas, solo había una manera posible de que la bandeja haya llegado hasta ahí: Sachiko había entrado y la dejo.

¡Qué pena que nos viera en tales circunstancias!

-Cariño- muevo un poco a Light para despertarlo-. Amor, tenemos que irnos a la universidad.

-¿Y si mejor te llevo a ver una película?- Yagami levanta la cabeza para verme y deposita un beso en mis labios.

-Tengo examen hoy... En serio tengo que ir.

-De acuerdo. Toma un baño en lo que yo veo que te puedo prestar.

-Tú mamá entró- señalo el desayuno sobre el escritorio y Light se sonroja un poco.

-Creo que tendré una larga plática con ella y papá- parece un poco nervioso.

Nos quedamos unos minutos más sobre la cama, antes de levantarnos y comenzar a arreglarnos. En lo que yo me ducho, Yagami busca algo de ropa en su closet y cuando salgo del baño, él se mete. Reviso mi celular y descubro varios (en extremo) llamadas perdidas por parte de mi hermana y padre. Decido marcarle a mi progenitor:

*Llamada telefónica*

-¡(T/N! ¿Dónde demonios te habías metido?- mi padre estaba enfurecido.

-Perdóname, me quedé en casa de Light- no veía ninguna necesidad en mentirle.

-¿Te quedaste en casa de Yagami, EN LA NOCHE?

-Sí, nos quedamos despiertos hasta tarde trabajando en unos proyectos... Ya nos vamos a la universidad, llego a casa como a las cinco.

-Vamos a tener que hablar otra vez, (T/N)

-Sí, papá... Te veo al rato.

*Fin de la llamada*

Cuando llegara a mi casa se iba a armar un infierno danzante ahí, pero no me importaba. Amaba pasar la noche con Light, era el único momento en que sentía que estábamos fuera de todo aquel drama de Kira.

Entre pensamiento y pensamiento, no noto cuando Light sale del cuarto de baño hasta que se acerca por mi espalda y comienza a besar mi cuello.

-¿Qué haces?- su voz me provoca escalofríos. Me giro para verlo a los ojos.

-Mi familia estaba preocupada por mí- aviento el teléfono hacía la cama y abrazo a mi amigo.

-Oye, esto significa que... ya sabes...- me rio ante su actitud-. ¿Podemos volver a retomar nuestra relación?

-Solo si prometes dejar de ser tan dramático y cruel conmigo.

-Prometido.

Beso a Light ligeramente en los labios antes de separarme de él y ponerme algo de ropa. Entre los dos comemos rápidamente lo que nos había dejado Sachiko y bajamos las escaleras de la mano.

-Buenos días, muchachos- la casa me arde de vergüenza al oír a la mamá de Light.

-Buenos días, mamá- pasamos corriendo frente a la cocina, directo a la salida.

-¡(T/N), cariño! Te deje algo en tu abrigo- señala Sachiko, en lo que Light y yo nos ponemos los zapatos.

Reviso la bolsa de mi abrigo solo para encontrarme con una pastilla rosa. Light ahoga su risa detrás de mí cuando la ve y yo lo asesino con la mirada.

-¡Gracias, Yagami-san!- abro la puerta aún abochornada y ambos salimos de la casa con las manos entrelazadas.

-¿Quién es Takada?- pregunto de repente, recordando el nombre de alguna conversación con Peggy.

-Una chica de mi curso, pero no tienes por qué preocuparte, yo solo tengo ojos para mi diosa- Yagami se acerca a mí y besa mi frente.

-Les di toda una noche, podrían parar de ser tan melosos unas horas, ¿por favor?- irrumpe Ryuk.

-Olvide que existías- comento, recordando de repente la existencia del Shinigami.

-Sí, bueno, me tendrás por aquí un buen rato.

Koi No Yokan (Light Yagami y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora