Redención (Final de temporada)

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El aire frio de la madrugada inglesa me escocia la piel, pero estaba tan concentrada en la tumba frente a mí que eso poco importaba.

A deseos de Ryuzaki, cuyo verdadero nombre resultaba ser Elle, su cuerpo había sido trasladado hasta Inglaterra, su país de origen. Su petición además incluía que se le enterrase junto a la tumba de una amiga de su infancia de quien nunca nadie había oído hablar.

En circunstancias normales mi padre nunca habría permitido que saliera de Japón solo por un funeral. Sin embargo, cuando escuchó mi dolor cuando mencione que viajaría, él mismo me cedió los boletos. Por su parte, Soichiro se había comprometido a cuidar de mí mientras estábamos fuera.

El sepulcro del que en su momento había sido el detective más inteligente de todo el planeta consistía de una escultural cruz hecha a piedra, con adornos de ónix en la base. La tumba que reposaba a lado suyo era la de ángel de mármol con la inscripción de Livany Fogelberg, la antes mencionada compañera de L.

-(T/N), cariño- me llama Yagami-san-. Nos iremos al hotel ahora... ¿Vienes?

-¿Podría quedarme unos minutos más, por favor?

-Por supuesto. Light se quedará contigo.

No quiero que Yagami se quede conmigo, mucho menos en estos momentos, pero aún si me niego él se quedará.

Todos se dirigen al hotel dejándonos a Light y a mí detrás. Una vez que todos se han ido, me permito derramar las lágrimas que me había estado guardando durante todo el funeral y me arrodillo frente a la fría piedra.

-L porfin se ha ido- menciona Ryuk detrás de mí-. Supongo que ahora no podré esperar que las cosas sean muy interesantes.

Estoy dispuesta a reclamarle al Shinigami, pero cierto sonido provoca que me detenga. Light comienza a reírse, primero con suavidad y luego con psicopatía.

-¡Todos los que se interponían en mi camino se han ido!- lo volteo a ver atónita-. ¡Todos creen en mí! ¡Es solo cuestión de tiempo antes de que manipule a la policía!

Light se arrodilla a mi lado, enterrando las manos en la tierra fresca alrededor de la piedra y encarando a la cruz como si del mismo Elle se tratase.

-¿Qué opinas de eso, L?- retrocedo intimidada por su comportamiento-. ¡Mi victoria es absoluta! ¡Gané!

De un momento a otro, las facciones de Yagami pasan de la excitación a seriedad, pero no se quita de sobre la tumba.

-Ryuk, ¿no esperas que las cosas sean muy interesantes? Eso no es cierto... De aquí en adelante, podrás observar el nacimiento del nuevo mundo.

Al escuchar esas palabras es como si algo dentro de mí hiciera clic y la cara me hierve de furia. Horrorizada y atormentada por la culpa y todo lo que había dicho mi ahora ex novio me abalanzo sobre él y hago que me mire a los ojos.

-¿De qué te sirve un nuevo mundo cuando el dios de el mismo no es mejor que los demonios del anterior? Te regocijas en tu trono, pero no eres más que un maldito asesino.

-Lo siento, ¿acaso lastime tus sentimientos? ¿Estas triste por ese bastardo?- Light me ve con cinismo-. Lamento informarte que eres mi cómplice en esto, de principio a fin.

-No necesitas recordármelo... Maldigo el día en que me enamoré de ti- me levanto del suelo y me acomodo el abrigo-. Solo déjame sola, por favor.

-Como desees- Yagami me toca levemente la mejilla antes de irse.

La furia se combina con mi tristeza y no puedo hacer otra cosa más que llorar. Me giro a ver la cruz y entre gimoteos y lágrima trato de buscar una respuesta a mi dilema... ¿Y ahora qué se supone que haga?

"-Solo intentaba protegerte, mantenerte a salvo- le digo a la tumba frente a mí-. Era como si tuviera un trabajo... Tenía un solo trabajo y lo arruiné. Lo estropee y por eso lo siento. Supongo que eso es lo que hago, decepciono a la gente que amo. Lo hice con mi madre... Y ahora, supongo que se supone que debo defraudarte también."

La sensación de culpa es tal que siento me volveré loca en cualquier momento. Giro el brazalete de Ryuzaki alrededor de mi muñeca mientras sigo hablando.

-¿Cómo puedo? ¿Cómo se supone que viviré con eso? ¿Qué se supone que debo hacer, Ryuzaki? Lo siento, no quería que todo esto nos trajera hasta este punto. Perdóname por mi estupidez, por no escucharte y dejar que Light se saliera con la suya.

Todo esto es mi culpa, mía y de Light por supuesto.

Sé que no lo merezco, pero por favor... Discúlpame. 

Koi No Yokan (Light Yagami y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora