El valor para enfrentarse a la fiera

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POV Emma

¿Qué hacer cuando se tienen ganas de matar a una persona, pero un agente de la ley está a tu lado? Sentí deseos de tirarme al cuello de Neal cuando gritó en voz alta y bien claro que yo había llegado con mi novia. Es verdad que todos tenían conocimiento de mi relación con una mujer, pero yo pretendía enfrentarme a la situación de una manera más tranquila, sosegada, cosa que ya no sería posible en cuanto el idiota de mi hermano abrió la boca.

«¡Hijo de mala madre!» le dije al oído en cuanto se acercó a abrazarme

«¡Eh, que es la tuya también!» bromeó Neal y no me contuve en darle unos buenos golpes

«¡Ay! ¡Emma! ¿Estás loca? ¿Viniste de Nueva York para agredirme? ¡Graham, haz algo! ¡Mira esto!, ¡Ay, estúpida! ¡Para!»

«No tengo nada que ver en eso. ¡Apáñenselas ustedes, granujas!» mi amigo y Ruby saludaban a Archie y esposa.

«¡Te lo mereces! ¿Tenías que gritar la palabra novia?» me enfadé

«¡Ya todo el mundo lo sabe!» decía mientras intentaba huir de mí

«Ya, lo saben por tu culpa. ¡No tenías derecho a abrir esa bocaza!» le tiré de la oreja como hacía cuando éramos pequeños «¡Yo lo iba a contar, pero a mi manera y en el momento en que considerase oportuno, entrometido!»

«¡Ah, Emma, relax! ¿No me vas a presentar?» mi hermano miró hacia Regina que estaba visiblemente avergonzada ante lo sucedido.

«Amo...Regina, esta es la cruz que cargo en mi vida. Tú, desgraciado, ella es...»

«¡Tu novia! ¡Wow! ¡Rubia, me llenas de orgullo! Regina, es un placer conocerla. Es mucho más bonita de lo que mi hermana decía y...wow de nuevo, mucho más bonita de lo que imaginé»

«Gracias, Neal. Eres muy amable. También es un placer conocerte» Mills respondió con la educación y la elegancia que le son innatas.

«¿Conoce mi nombre?» él se extrañó

«¡Claro! Emma habla mucho de su familia» ella exageró. Habíamos conversado algunas veces sobre ellos, pero nada que pudiera ser clasificado como "mucho"

«Me encanta que hayáis venido. Papá ha preparado una gran fiesta mañana. Bebidas, mujeres...»

«¡Dejar de ser mentiroso, Neal!» Ruby se reía de las bromas de mi hermano

«¡Tonta! Cierra la boca y déjame soñar...» se acercó a las parejas que charlaban a pocos metros de nosotras.

«Emma, esto...no va a salir bien. Siento que...» mi morena susurró cuando mi hermano se hubo apartado, pero fue interrumpida por la voz de mi padre

«¡Hija!» sentí sus fuertes brazos apretándome «¡Qué bien que hayas venido! Aunque lo confirmaste, tenía dudas de que a última hora te arrepintieses. ¡Estás tan linda!»

«No dejaría de venir, papá» estaba con la respiración entrecortada, no sé si por el abrazo, por la emoción de volver a ver a mi familia, o si por el recelo ante la reacción de ellos con mi novia «Papá...esta...esta es Regina» bajé la cabeza y cerré los ojos en un gesto ridículo de huida del posible escándalo que comenzaría

«Es un placer. Sea bienvenida a nuestra casa. Estoy...hum...» él también estaba nervioso, pero lo intentaba ocultar «...contento que le esté haciendo bien a Emma. ¡Nunca la he visto tan radiante!» Regina sonrió aliviada.

«Señor Nolan, solo procuro devolverle lo que ella hace por mí»

«David, por favor. Solo David»

El dulce sabor de la rutinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora