El Otro Talento de Nathanaël. AdrieNath (Yaoi-Gay)

Capítulo: 64

Narrador Omnisciente:

Llevaban unos veinte minutos nadando.

-¡Oye, Nath!.-

El pelirrojo se dio la vuelta y sintió un gran peso sobre él tirandolo y haciendo que se undiera en el agua.
Era Adrien.
Los dos salieron a la superficie y se pusieron de pie ya que la laguna no era tan profunda.
Ambos reían, pero cuando Nathanaël se iba a acercar para decirle algo Lila surgió del agua entre ellos dos. Justo frente al rubio. Muy cerca.
Era obvio lo que trataba de hacer.

-Ay, lo siento Adrien...- Dijo en un tono bastante falso.- No calculé cuanto nadé,  siempre fui buena en eso.- Continuó tratando de presumir.

Se le había acercado un paso y Adrien lo había retrocedido.

-A-Ah, ¿si?. N-No lo sabía.- Dijo nervioso mientras volvía a retroceder otro paso al ver como Lila trataba de acercarse de nuevo.

Nathanaël lo veía todo. No iba a permitir que se le acercara así a su novio.
Otro paso más por parte de Lila.

-Oye, te iba a preguntar si esta noche quieres que nos escapamos y regresemos aquí.  Tal vez te pueda enseñar a nadar como yo...-

-¡Lila, TIENES UNA ARAÑA EN EL CABELLO!.- Se escuchó el grito por parte del pelirrojo.

Todos se dieron vuelta y vieron como la chica de cabellos castaños se ponía pálida.

-¡¿QUE?!. ¡QUITENMELA!.- Gritó mientras reían por su reacción.

Mientras la chica corría por todos lados Adrien dirigió su mirada al pelirrojo el cual lo veía con una sonrisa inocente.
El rubio entendió que lo había echo para que se alejara Lila.
Frmó con sus labios la palabra "GRACIAS" y el pelirrojo le guiño un ojo con una pequeña sonrisa.
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La noche había llegado y todos se habían ido a sus tiendas con sus respectibas parejas.
Adrien y Nathanaël habían arreglado todo para estar lo más cerca posible. 
Se habían quedado despiertos un rato más.
Ambos estaban sentados uno al lado del otro escuchando música desde el celular del pelirrojo mientras uno de ellos usaba su celular y el otro dibujaba.

-Oye, ¿qué te dijo Lila en la laguna?.- Le preguntó el menor sin separar su visita del dibujo.

-¿Celos?.-

-Si, y muchos. Ahora dime.-

Adrien rió un poco y le contestó.

-Me dijo que era muy buena nadando y que si quería en la noche escapanrme con ella a la laguna y enseñarme a "nadar" como ella.-

El mayor guió su vista hacia su novio.

-Oye, calma. Vas a romper el lápiz por la mitad.- Le advirtió al ver como sostenía el lápiz con una de sus manos y con uno de sus dedos ejercía fuerza en este.

Nathanaël estaba tan concentrado recordando en como esa chica se le había acercado a su novio que no notó cuando este lo abrazaba.

-Calma. Sabes que yo nunca podría engañarte. Y menos con ella, no importa que ropa se ponga. Siempre pensaré en ti.-

El pelirrojo soltó el lápiz ya calmado y correspondió al abrazo.
Luego de un rato se separaron y se volvieron a sentar como antes.

-Y... ¿Me vas a mostrar tu cuadernillo?.-

El menor levantó un poco la vista y su rostro se tornó del color de su cabello.

-¿Qué pasa?.- Le preguntó el rubio con una pequeña risa.