Capítulo 93:

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Narra Nathanaël:

Las nubes que veía por la ventana se estaban aclarando, estaba amaneciendo. 
 Adrien estaba dormitando sobre mi pecho. Me encantaría poder tenerlo más tiempo así, pero sería peligroso para él. 

—Adrien.— Lo llamé mientras movía uno de sus hombros. Su respuesta fue un quejido y acurrucarse más contra mí. 

—Vamos — Le insistí.— Está amaneciendo. 

Levantó la cabeza y me miró con los ojos entrecerrados, algo molesto. No pude evitar sonreír frente a eso. 

—¿Qué hora es? 

—Las seis menos cuarto.— Le contesté para luego darle un pequeño beso.

Él frunció el seño y volvió a su posición anterior, abrazándome con más fuerza, dejándome sin aliento durante un instante.  

—Oye, mis pulmones.— Me quejé mientras él reía muy bajito. 

El pensar que dentro de unos momentos se tendría que ir me angustió un poco, pero no dejé que lo notara. Se estaba riendo y eso es lo que importaba. 

Lo dejé estar un rato más así y luego volví a insistirle en levantarnos. Esta vez lo hizo y los dos nos vestimos para después ir a comer algo. 

—¿Feliz con tu croissant?— Le pregunté, viéndolo asentir con una expresión casi infantil que me hizo reír. 

Terminamos un pequeño desayuno en el cual no hablamos casi nada, sólo pasábamos el rato. Y lo que seguía a continuación era la despedida. Hablamos un poco más de lo que le diría a su padre, pero ya no había nada más que decir, solo hacía falta esperar. 
 Se transformó en Chat Noir y con un último beso y algunas palabras más me quedé sólo. 
 La angustia y nervios volvieron otra vez, pero con menos fuerza que antes.  

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Bueno...

Complejito el año, ¿eh? 
¿Qué cuentan? 

El Otro Talento de Nathanaël. AdrieNath (Yaoi-Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora