Capítulo 38:

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Narra Nathanaël:

Me desperté con la respiración agitada y con mucho calor.
El sueño que tuve era de... Ay, no.
Bajé mi vista y me encontré con un pequeño-gran problema.
Si Adrien se llega a enterar... ¡Que vergüenza!.
Él seguía dormido, pero tenía su brazo alrededor de mi cintura.
Tenía que ir al baño sin que se diera cuenta.
Con mucha delicadeza levanté su brazo y me comencé a sentar al borde de la cama, pero cuando estuve a punto de sentarme por completo su brazo volvió a rodearme la cintura causandome un pequeño susto y tirando de mí haciéndome quedar otra vez mi espalda contra su pecho.

-¿Crees que no te escuché anoche?.- Me susurró al oído causandome un escalofrío.- Gemias mi nombre dormido algo fuerte.- Me estaba muriendo de la vergüenza.

-Y-Yo... Adrien...-

Él me interrumpió.

-Me despertaste hace una hora. Dime, ¿que soñabas?.- Me preguntó en un tono juguetón.-Es lindo despertarse así.- Dijo con el mismo tono y dándome un beso en la nuca. Eso me hizo soltar un jadeo.

Di vuelta mi cabeza un poco y noté que él estaba mirando hacia abajo.
Estaba mirando mi... ¡Que vergüenza!.
Él pareció notar eso y me dio un beso en la mejilla.

-No tienes por qué tener vergüenza. Soy tu novio ahora.- Me dio otro beso ahora en una parte baja de la mandíbula.

Sentí la mano que estaba en mi cintura comenzar a bajar.

-¿Q-Qué haces?... Adrien, ayer...-

-Lo se. Se de lo que hablamos. Solo voy a ayudarte.-

Sentí que su mano bajaba más hasta casi el borde de la playera que utilizaba.
Me volví a poner nervioso y pareció volver a notarlo.

-Nathanaël, calma. No sientas vergüenza. ¿Confías en mi?.-

Yo asentí.

-¿Me haces caso en lo próximo que te voy a pedir?.-

Dudé un poco y volví a asentí.
Sentí que se acercó más a mi oído y me dijo en voz baja.

-Dejate llevar.- Su voz era tranquilizadora y al mismo tiempo había mordido mi oreja.

Tomé un poco de aire y le respondí.

-Esta bien.-

Relajé mi cuerpo y cerré los ojos.
Sentí como su mano bajaba un poco más hasta llegar al final de la playera e introducirla debajo acariciando mi torzo. También sentía algunos besos y mordidas en mi nuca y cuello.
Intentaba reprimir mis gemidos y jadeos, pero cuando sentí que la mano que estaba dentro de mi playera bajaba más me dejé llevar por completo.
Se adentró en el pantalón del pillama y mi ropa interior.
A penas sentí su mano en contacto con esa zona tan sensible solté un gemido.

-Ahhh.-

Él sonrió pegado a mi nuca.
De a poco bajó mis prendas inferiores dejando mi miembro expuesto.
Volvió a acariciarme haciendome soltar otro gemido bajo.
Envolvió con su mano mi miembro y comenzó a moverla de arriba a bajo de forma lenta.

-Ha... Ha... Ahh... A-Adrien.- Dije su nombre de forma involuntaria.

Los movimientos de su mano se hicieron más rápidos.
Sentía como mi temperatura aumentaba y la respiración de ambos se aceleraba cada vez más.

-A-Adrien.-

Pude mi mano sobre su antebrazo de la mano con la que me masturbaba, clavé mis uñas por instinto y pude escuchar como jadeó en mi oído.

El Otro Talento de Nathanaël. AdrieNath (Yaoi-Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora