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Editado 11/01/21

—Tendrá que ser otro día porque nosotros ya nos vamos— dice Axel con un tono bastante amenazador.

—Sólo será un segundo— su gruesa voz viaja por mis oídos y la piel se me pone de gallina. Está demasiado molesto y ni siquiera se toma la molestia de esconderlo.

Dejo salir un suspiro y me desprendo del cálido abrazo de mi hermano.— Tienes cinco minutos David— digo intentando esconder lo aterradora que me resulta la situación, sin embargo mi voz me delata cuando tiembla al decir su nombre.

—Sígueme— demanda.

En cuanto se da la vuelta comienza a caminar rápidamente hacia la parte trasera de las gradas. Bajo con lentitud las hileras de asientos vacíos mientras me abrazo las costillas que me palpitan por los golpes de la bruja.

—¿Acaso no te basta con arruinar mi familia? ¿También tenias que joder mi relación con Claudia?

Lo primero que sale de mi boca al escuchar sus palabras es una risotada. De verdad que me esperaba cualquier otro tipo de regaño, todo menos eso. David definitivamente no aprende, el mundo no tiene siempre que ver con él.

—Si ves, tu solo quieres hacer polvo mi vida, no puedes evi-

—Escucha niño bonito. Yo no tengo absolutamente ninguna razón para ponerle atención a lo que haces o no haces y mucho menos para arruinar tu vida como tu lo crees. Ahora crece de una vez por todas y deja de joderme la vida que yo no tengo tiempo para escuchar tus estupideces. Y por favor ponle bozal a tu perro. La rabia es contagiosa" Una vez terminado mi hermoso discurso me doy media vuelta y vuelvo con mi hermano caminando con la frente en alto.

—No vuelvas a hablar así de ella. Yo en verdad la aprecio, puede que sea un poco intenso mantener una relación con ella y yo lo sé más que nadie, pero por favor a ella déjala en paz— por primera vez en todo el día suena ofendido y me doy cuenta de que esta diciendo la verdad, de que en verdad tiene sentimientos por Claudia, por mas sorprendente que sea, él la quiere.

Ignorándolo sigo caminando con pasos rápidos y prontamente me reencuentro con mi hermano.

—¿Estas bien?— Su voz es dulce y cariñosa, hace que me sienta como en casa.

—Sí, pero ya me quiero ir.

*******

Es viernes en la tarde y estoy con Axel en la casa del lago viendo películas para pasar el rato. La semana se pasó volando desde aquel incidente el lunes y aunque la pelea fue de lo mas hablado durante toda la semana por los estudiantes, de un modo u otro logré evitar a Claudia y a David.

—¿Volvemos? Mamá ya debe estar esperándonos para la cena— Insiste Axel apagando el televisor con el control remoto. Desde hace tres días mamá andaba dichosa por razones desconocidas, cuando le pregunté lo único que me dijo es que el viernes cenaríamos en la casa y nos diría a que le debe tanta felicidad.

Después de dejar la cabaña cerrada con las luces apagadas y las cortinas cerradas nos subimos a la camioneta y volvemos a casa.

Lo primero que noto cuando estamos lo suficientemente cerca es el carro extra que está aparcado justo en frente de la casa. Y no es cualquier carro, es el de Marcos y lo primero que se me pasa por al cabeza al verlo es que bajo ningún motivo deseo ver a David y mucho menos después del incidente del lunes.

—Creo que a mamá se le paso decirnos que tendríamos compañía— Comenta Axel mientras apaga el motor de la camioneta y se quita el cinturón de seguridad.

—Por lo que veo así es— me paso las palmas de las manos por los pantalones para secarlas del sudor que me causan los nervios.

No quiero verlo.

Mi Hermanastro ©|+18| [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora