024

18.2K 1K 79
                                    

Editado 19/01/21

Cuando veo a Axel estirar la mano para tomar un pedazo de madera del desastre que ahora es  su estante de libros dejo salir un grito y corro hasta el para detenerlo.

David está debajo de mi hermano intentando evadir la mayor cantidad de golpes que le es posible en esa posición mientras con una mano se tapa la nariz que tras un golpe le comenzó a sangrar.

Reúno todas mis fuerzas y me abalanzo sobre Axel para quitarle el tablón de madera de las manos antes de que haga algo de lo que se arrepienta—. Ni se te ocurra Axel, el no tiene la culpa— digo entre dientes lanzándole una mirada asesina.

En ese instante mi hermano lanza la tabla hacia la pared haciendo que un fuerte golpe resuene por toda la habitación. Con cuidado me levanto de su espalda y tomo su antebrazo para ayudarlo a levantarse. Axel me pasa de lado arrancando mi mano de su brazo a la vez y me mira sobre su hombro con disgusto.

Ruedo los ojos ante su inmadurez y me apresuro en ofrecerle una mano a David que la toma agradecido. Lo ayudo a ponerse de pie y lo acompaño hasta su habitación. 

—Espera, voy a traer algo para limpiarte esos golpes —murmuro con un nudo en la garganta al verle la cara llena de sangre a mi costa.

Bajo las escaleras y me encamino hacia la cocina donde por desgracia  encuentro a Axel sacando hielo de la heladera para ponerse en los nudillos—. Si no hubieras sido un patán tal vez no estarías con la mano morada —menciono con rencor en cada palabra. Sin prestarle atención a su mirada fulminante abro la nevera y saco un par de hielos en un tazón. Me doy media vuelta y tomo una toalla del estante para envolver el hielo y limpiarle la sangre.

Con pasos fuertes y decididos me encamino a la alcoba de David para limpiarle la cara por segunda vez desde que me enteré del compromiso de mamá. 

—¿Te duele mucho? — Cuestiono poniéndome de cuclillas frente a David mientras envuelvo unos cuantos cubos de hielo en uno de los trapos que traje.

Él niega con la cabeza y observa cada uno de mis movimientos. Con mucho cuidado coloco la toalla con hielo sobre el puente de su nariz y con la otra limpio la sangre de su boca.

Cierro los ojos sintiendo cómo David se retuerce bajo el contacto de la tela con sus heridas y dejo de lado la toalla que usé al limpiarle el rostro para acariciarle el cabello de manera reconfortante—. Yo... No sé cómo decir esto Karen. No es por ofender lo que estoy a punto de decir, de hecho me pareces una chica increíble, eres preciosa y últimamente has estado apoyándome en todo, y... ¡Mierda! Soy pésimo para hacer estas cosas, el punto es que-

Antes de que David termine con su discurso decido cortarlo y ahorrarle el trabajo. Tomo un profundo respiro y le quito el hielo  de la nariz para poderle ver a la cara sin ningún obstáculo. 

—El punto, David es que lo que hicimos está mal. No es necesario que digas toda esa basura de que te parezco una buena persona ni nada, yo solita puedo darme cuenta de que está bien y que no —a pesar de mis intentos mi tono resulta algo amargo y otro tanto dolido, después de todo acababa de ser rechazada por Jason y ahora, David. Aunque sé muy bien que aquello no puede volver a ocurrir, muy en el fondo una llamarada de esperanza batallaba para convencerme de que quizás había algo más.

Lo sé, soy una ilusa de primera, también sé que teniendo en cuenta todo lo que acababa de pasar con Jason lo más prudente hubiese sido mantener distancia de cualquier contacto masculino que pudiese llegar a involucrar sentimientos. Pero una vez más, no es que yo sea la persona más cuerda en este preciso instante. 

Mi Hermanastro ©|+18| [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora