Mi Hermanastro ©|+18| [✔️]

Especial 1

Editado 11/01/21

POV David:
015 :

Siento como el viento salado me golpe la cara mientras los incontrolables sollozos salen de mi boca.

Cierro los puños de ambas manos y trago saliva.

Odio llorar, lo aborrezco.

Pero mi papá no para de querer hacerme la vida imposible, por más que no odie del todo la idea de tener hermanastros desprecio el hecho de que Marcos ya este con alguien, con una persona que no es mi mamá.

Estoy tan sumido en mis propios pensamientos que no me doy cuenta de que Karen ha venido a buscarme hasta que aclara su garganta.

Doy un pequeño salto sorprendido aunque sé muy bien que no debería estarlo, después de todo Karen nunca deja pasar nada por alto.—  Vete—  murmuro con la voz ronca a la vez que uso la manga de mi suéter para secarme las lágrimas de ambas mejillas.

Es la primera vez que alguien me ve llorar y tiene que ser Karen, de todo el mundo tenía que ser ella.

Dejo salir un suspiro agotado y me preparo para sus regaños de cómo debería aceptarlos y bla bla bla.

Sin embargo, estos nunca llegan.

En cambio, Karen se sienta a unos cuantos centímetros de mí.

— Sé que ya hemos hablado de esto, pero creo que es bueno que lo dejes salir todo. La forma en que lidias con esto no es buena, simplemente maldices a todo aquel que se cruce en tu camino y no expresas lo que realmente sientes— siento cómo pone su mano en mi espalda y el calor que su tacto emite parece extenderse por todo mi cuerpo haciendo que una sensación que no me esperaba me recorra. De repente su presencia me resulta extrañamente reconfortante.

También me llevo una gran sorpresa con sus palabras, son ciertas y aunque me cueste admitirlo, tal vez debería hacer lo que ella dice. Llevo meses tragándome todo lo que siento y nunca nadie me había hecho caer en la cuenta de que tal vez me estoy haciendo daño a mí mismo.

Entonces hago algo que nunca, pero nunca habría hecho. Algo que ni si quiera he hecho frente de mi novia, quien se supone que es la que debería ayudarme en momentos difíciles como este.

Lloro.

Lloro como nunca antes lo había hecho.

Y lo mejor de todo es que se siente bien, se siente de maravilla saber que hay alguien ahí para mí, alguien que está dispuesto a verme hacen un berrinche y que esa persona no me va a juzgar.

Karen dibuja círculos en mi espalda mientras dejo salir todo lo que me había tragado desde que se murió mi mamá.

Pronto, recuerdos de la mujer a la que más amo llenan mi mente, tan lúcidos que parece como si en realidad estuviese allí.

Recuerdo cuando se me cayó mi primer diente y llegué a casa muy emocionado a contarle a mamá, la primera vez que fui a una fiesta y ella me llevó.

También recuerdo la última vez que la vi.

Era viernes y estaba apurado porque iba a llegar tarde a la fiesta de Claudia, apenas llevábamos siendo novios un par de meses e íbamos en serio, así que no la quería decepcionar llegando tarde.