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Los días siguientes pasaron y cada uno estuvo en su mundo de vuelta. Dustin en su universidad y haciendo charlas algunos días. Yo en la universidad haciendo resúmenes. Nos juntamos con nuestros amigos el siguiente fin de semana, había pasado nueve días de nuestro fantástico día en Universal Studios con Dustin y todavía no podía superarlo, ni siquiera nuestros amigos.

-No puedo creer aun que se hayan ido al parque y no nos invitaron. –esa fue el reproche de Stephie.

-Fue idea de Dust. Yo no lo sabía. –exclamo.

-Ni siquiera me lo dijiste a mí. –Brandon suena ofendido, haciendo que nos riamos un poco.

-Eso quiere decir que ustedes... ya... -entendí a lo que Darren se refería, yo ignoré su vista y fruncí los labios. Que Dustin respondiera.

-Ya somos amigos, de nuevo. -no dije nada a sus palabras, sin embargo volteé los ojos a mis amigos simulando que no me dolía.

He quedado en la friendzone más veces que Nick Jonas con Demi Lovato, pero sin embargo yo sabía que él se gustaba de mí. Si Annie lo dijo en su momento es porque así era. A decir verdad me enfadaba que él no quiera formalizar nuestra relación, o el intento de relación que llevábamos teniendo hace meses.

Sé que si no íbamos a tener nada yo debería de tratar de olvidarlo, de alejar mis sentimientos de él pero eran imposibles, me llevó a Universal Studios y prácticamente tenía una sesión de fotos con él. Mucho menos cuando le decía que iba a salir con mis compañeros de la universidad. Hasta parecía una escena de celos cuando mencionaba a Cody o Tristán, incluso a Jeremy.

Una vez no me habló por dos días y yo nuevamente tuve que escribir un mensaje a preguntar que rayos le sucedía. Me tocó ignorar pero con entusiasmo aquellas escenas.

Ahora estábamos tomando jugos locos que preparó Annie, los padres de Brandon y los de Stephie y Darren también estaban aquí, incluso los padres de las mellizas, ya que íbamos a festejar otro mes de que a Crazy Sugar le estaba yendo de maravilla con las ventas. Los chicos se nos separaron un poco mientras jugaban videos juegos en la TV, y con Stephie y Annie estábamos en el sofá, hablábamos de la próxima fiesta de cumpleaños de las mellizas y Annie estaba queriendo saber dónde podrían festejarlo, Stephie tira ideas de alquilar todos juntos un jate e ir al mar a enloquecernos y me agrada la idea. Volteo hacia los muchachos un segundo y veo que mi chico soñado sale del grupo de sus amigos y viene hacia nosotras. En su casa no usa mucho el bastón, por lo que ahora no lo trae.

-¿Vienes conmigo, Liv? –pregunta. Yo miro a Stephie y Annie algo confundidas, ellas se encogen de hombros.

-Sí. –logro decir a Dustin.

Lo sigo hacia un ala de las habitaciones. Él rosa las paredes con los dedos, tiene un jean oscuro y una camisa azul cielo, la cual está remangada a sus codos, luciéndolo increíblemente sexy. Se detiene en la puerta de su dormitorio y lo sigo dentro.

Se sienta en la cama y yo lo imito, colocándome a su lado.

-Me contactó alguien. –empieza a decir y lo observo. Tiene sus codos sobre las rodillas y juega con sus dedos. –Es un skater muy famoso, no creo que lo conozcas pero... me dijo que había visto tu página y me preguntó si aún estaba interesado en abrir la fundación.

Sonrío.

-¿De verdad? Eso es fabuloso. –le digo con verdadera emoción.

-Sí. No sabía si aceptar eso porque aún no termino la universidad pero esto del modelaje me ha venido bien monetariamente y también ya tengo un puesto para trabajar en la empresa de Christopher, este skater del que te hablo. También es empresario. –me cuenta. –Y pues acepté el poder colaborar con él para abrir la fundación.

Nueve en puntoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora