MIS DÍAS CONTIGO | FANFIC

Capítulo 42 - ¿Mentirita blanca?

MARATÓN 1 DE 3

POV Christopher 💟

— ¿¡Que hiciste qué!? —pregunto sorprendido a Estefa y juro que quiero matarla. Simplemente no puedo creer que se le ocurrió hacer semejante barbaridad.

Lo siento, Joel, pero te quedarás viudo antes de tiempo.

—No sabía que decirle, fue lo primero que se me ocurrió —dice apenada y se encoje de hombros.

— ¡Por Dios, Dan debe estar hecha pedazos! ¿No pudiste pensar en eso antes de decirle algo así?

—Pues le hubieses dicho al tonto de tu amigo la gran idea que tenías y solucionábamos todo esto, así que no me eches toda la culpa a mí —menciona ahora enfadada. — ¿Qué se supone que me iba a inventar para que viaje de la nada hasta acá? ¿Que se me daba la gana de saludarla en persona?

Tenía razón, pero meterse con algo de esa magnitud es algo muy grave.

—Tengo que comunicarme con ella —digo un tanto desesperado.

— ¿¡Qué!? ¡No! Arruinarás la sorpresa, Christopher.

—Eso no importa ahora, hay que tranquilizar a Dane.

— ¿Acaso quieres tirar mi muerte a la basura? ¡No voy a morir en vano, no señor!—dice negando y alzando la ceja.

—No vas a morir, Estefa.

—Eso es lo que tu crees, Dane me va a matar cuando se entere que todo lo inventé—explica y se sienta en el sofá decaída—Tenemos que continuar aunque eso implique hacerla sufrir un poquito.

— ¿Un poquito? Apuesto mi cabeza a que no está sufriendo solo "un poquito"—digo haciendo comillas con mis dedos. Empiezo a caminar de un lado a otro desesperado.

—Creo que Estefania tiene razón—al fin dice algo la señora Rebecca, quien solo se había dispuesto a escuchar y mirar mi discusión con Estefania. —Si Estefania ya hizo todo eso para que mi hija venga hasta acá, lo mejor es esperar a que llegue y luego explicarle todo— menciona tranquilizadora y luego dirige su mirada hasta Estefa—pero Christopher tiene razón, no debiste haber hecho eso... no te imaginas cuanto Diane ama a su hermano, debe estar volviéndose loca donde quiera que esté ahora.

Todos nos quedamos en silencio varios minutos y veo a Estefa algunos segundos, al parecer quiere llorar porque se siente culpable. Me siento a su lado e intento abrazarla.

—Listo, ya pasó. La Sra. Rebecca tiene razón... ahora hay que esforzarnos mucho más para que la sorpresa supere todo esto por lo que está pasando Dane —menciono y ella asiente. Lleva su mano a sus ojos y limpia de ellos rastros de lágrimas que querían salir.

—Pues bien, manos a la obra entonces—dice la mamá de Dane y ambos asentimos más tranquilos.

Intentábamos hacer todo lo más rápido posible. Calculando el tiempo, Dane estaría aquí en una hora y media al parecer y todo tenía que estar listo, tal y como lo planeé.

La Sra. Rebecca estaba encargada del menú (obviamente tenía que ser alguien que sepa cocinar bien, no quería que todo sea un desastre), mientras que Estefa, Mau y yo estábamos encargados de decorar el pequeño jardín de la parte trasera de la casa, donde habíamos armado una pequeña tarima improvisada. Estefa se había encargado muy eficientemente de conseguir los equipos necesarios gracias a el negocio de su papá. 

Las risas iban y venían, hay que aceptar que Mau es un payaso con potencial, por eso me caía extremadamente bien, porque creo que somos iguales. Aún así por momentos no podía dejar de pensar en Dane, en el cómo se estaría sintiendo justo ahora y lo mucho que quizá debe estar llorando.