Capitulo 43

621 65 35
                                    


Hola a todos losMarvelitos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hola a todos losMarvelitos. Para que entendáis todo lo que va a pasar en estecapitulo y en el siguiente, tenéis que saber que este lo escribí eldía previo y el siguiente el mismo día de San Valentín, así queno os sorprendáis si veis más dulzura de lo normal aquí.


Este capitulo va a serenterarme Stony, así que, si alguien necesita ponerse la inyecciónde insulina para no morir con tanto azúcar, ya os aviso yo quecorráis a ponérosla, porque hasta yo misma me estaba sorprendiendodel azúcar que me estaba saliendo por las orejas mientras loescribía (y no os imaginéis eso)


Además, he tenido labuena suerte de encontrar unas imágenes que se parecían a lo que mehabía imaginado, así que he podido ambientarlo todo mejor. Hoymismo he encontrado una imagen que es perfecta para el capitulosiguiente, aunque, claro......Eso no lo podréis ver hasta la próximavez jejejejee.


Ya sé. La maldad mesale por el mismo sitio que el azúcar mientras escribía esto.


Supongo que todos losanuncios por todas los canales de televisión, escaparates de tiendasy demás han acabado surtiendo efecto dentro de mí. Así quedisfrutad de este capitulo, porque estoy segura de que os va agustar.


CAPITULO 43


............................


El resto de la cena fue más de lo mismo, para desgracia de Steve.


La mano de Tony parecía demasiado entretenida como paraapartarse de su cuerpo, así que al joven rubio no le quedó de otramás que sentir como la comida se le atascaba en la garganta cada vezque aquella mano salía en su busca, necesitando echar mano a su copapara poder pasarla.


-Tony, de verdad....- le advirtió este.


-¿Qué? A mí me parece que, por mucho que te quejes, enrealidad te gusta.


-¿Y qué te hace pensar eso?- le soltó este a su vez,procurando mantener un tono bajo.


No olvidaba que podía haber un camarero al otro lado de esacortina. Y esa parecía ser una de las diversiones de Tony aquellanoche.


-No sé. Que has estado así toda la cena- le indicó este,colocando la mano directamente sobre su entrepierna, donde la durezaera bien palpable através de la tela.


-Eso ha sido cosa tuya. Yo no he querido que se levante.


-Pero no me digas que eso no ha hecho la cena más interesante-le dijo Tony a su vez, dirigiéndole una de sus sonrisas juguetonas.

You are my destinyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora