Capítulo 4

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Hola les traigo un capitulo adelantado...lean, voten y comenten por favor



Los presentes vieron con mucha sorpresa a la bruja supuestamente blanca atacar al capitán Levi ¿Por qué atacaba a su salvador? Y lo más alarmante ¿Cómo osaba a atacar al mejor caballero del reino y quizás de los tres grandes reinos juntos? ¿Acaso aquella muchachita era tonta sin remedio? Si bien la fama del capitán se esparció por los tres reinos y era como una celebridad, los que miraban ignoraban que la chica estuvo apartada del mundo por tanto tiempo que había perdido un poco de contacto con el mundo en el que vivía, por lo cual ella no sabía mucho de política, famosos, algunos sucesos importantes, etc.

Los tres subordinados apenas vieron a la chica hacerle un corte con su magia al capitán, se pusieron en guardia y atacaron, pero Hanji se puso en su camino impidiendo que le hicieran daño a la chica.

-Señorita Hanji ¡Apártese! – Exclamó Gunther furioso con la mujer que no les dejaba avanzar.

- ¡Tenemos que detener a esa mocosa loca antes de que lastime al capitán! – Dijo Aurou preocupado por el capitán y algo aterrado por la adversaria de este.

- ¡No pueden intervenir así nada más!- gritó Hanji intentando llamar su atención – Tenemos que ayudar a Levi sin hacerle daño a la bruja, la misión es llevarla con vida ante el rey.

- Al diablo con eso, esa salvaje nunca podrá ser reina la muy...- Aurou no pudo continuar por morderse la lengua al tropezarse con una hendidura en el suelo mientras hablaba. Lanzó una maldición de dolor.

Los tres hombres pasaron a llevar a Hanji ignorándola por completo mientras ella miraba preocupada ideando un plan rápido. Cuando los muchachos estuvieron cerca de la bruja ella los miro y dio un golpe con su puño en la tierra, la cual tembló y abrió una brecha en el suelo rodeándola a ella y a Levi separándolos de los demás. Ese asunto era entre ella y de ese enano desgraciado que le había quitado la vida a su única amiga en el mundo.

-¡Deja de moverte tanto maldición! – Gritó la bruja exasperada con la velocidad de su contrincante, si bien logro hacerle varias heridas ninguna daba en algún lugar importante, pero al menos estaba sangrando por varios lugares y en algún momento tendría que cansarse y así podría hacer, al menos, un ataque directo al cuello y arrancarle la cabeza para después ir a por sus compañeros uno a uno.

Levi mientras esquivaba los ataques de su rival, intentaba pensar en cómo detenerla sin tener que matarla. Sabía que era lo suficientemente rápido para poder llegar hasta ella apenas se cansara y atravesarla con su espada, pero si lo hacia la misión se iba al carajo y si moría él y sus hombres también se iría al carajo.

Hanji con una habilidad increíble saltó la brecha y se fue encima de la chica deteniendo sus ataques, pero apenas pudo zafarse del agarre se separó y extendió el brazo en dirección a ella para apretar el aire y Hanji de repente sentía que no entraba aire a sus pulmones y su cuello más apretado. Levi al verse libre de la bruja e incapaz de dejar a una compañera morir frente a sus ojos (por más molesta que pudiera llegar a ser), no era su estilo atacar por la espalda pero fue lo único que se le ocurrió: apenas estuvo distraída la golpeó fuertemente con el mango de su espada y la dejó inconsciente.

-Por poco. – Dijo risueña Hanji.

- Al fin y al cabo los rumores mentían...no es ninguna bruja blanca. – Dijo monótonamente el capitán, pareciendo darle lo mismo que la misión fuera una perdida de tiempo pero por dentro hervía en rabia.

Una historia que el mundo olvidóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora