Después de cambiarse de ropa Alyz se sentó a esperar a Alekxander en la pequeña salita, la lluvia caía a raudales pero no parecía haber truenos de por medio, aun así ella se sentía muy nerviosa. Se levantó y comenzó a dar vueltas por la habitación. Estaba a punto de ir a buscar a Alekxander cuando él apareció por la puerta seguido de varios sirvientes que entraron con un reflector, películas, comida y muchísimas almohadas. Ante la mirada sorprendida de la chica comenzaron a mover los muebles y montar todo.
-¿qué es todo esto?- pregunto Alyz
-supuse que estarías nerviosa por la lluvia así que, qué mejor que una tarde de películas para distraerse- contesto el como si fuera cualquier cosa.
Tardaron poco todos los sirvientes en montar un cine improvisado, en cuanto terminaron se despidieron y dejaron solos a Alekxander y a Alyz. El zar se sentó en los mullidos almohadones que habían puesto en el suelo y le hizo señas a la joven para que lo acompañara, ella contenta no objeto y se sentó junto a él. Juntos escogieron varias películas y se dispusieron a verlas. Tal y como había dicho el Zar, aquello sirvió para que Alyz olvidara por completo la tormenta.
Ya iban por la cuarta película cuando Alyz comenzó a cabecear, el sueño la invadía poco a poco hasta que se le hizo difícil mantener los ojos abiertos, por lo que se recargo en lo primero y más calientito que encontró, el brazo de Alekxander.
-¿quieres ir ya a la cama?- pregunto Alekxander suavemente
-no- contesto Alyz entre sueños
-si te quedas dormida aquí amanecerás adolorida- dijo Alekxander levantándose, pero Alyz lo sujeto.
-no importa, no te vayas, quédate conmigo-
Alekxander hacia un esfuerzo enorme por luchar contra sus impulsos y no besar a Alyz en ese mismo momento, por lo que solo apago el reflector y se acurruco junto a ella.
***
-¡Alyz va a amar el vestido que le traje!- decía por décima vez Mirna
-Es muy bonito- volvió a decir Andrey aun contento por los perfectos días que habían pasado juntos.
-¿qué crees que hayan estado haciendo esos dos mientras no estábamos?-
-no lo sé, pero espero que hayan estrechado su relación, será perfecto para lo que planeamos hacer- contesto Andrey.
Mirna se mordió el labio inferior nerviosa, Andrey lo noto inmediatamente.
-no me digas que aún lo estás dudando, pensé que ya habíamos llegado a una decisión-
-no estoy dudando, lo vamos a hacer es solo que... estoy nerviosa por la reacción de Alyz, ¿y si piensa que todo este tiempo le mentí? ¿y si piensa que soy una traidora?-
Andrey la abrazo suavemente y le dio un beso rápido.
-no estés nerviosa, Alyz lo entenderá, estoy seguro-
Justo en ese momento llegaron frente a la puerta de la habitación y entraron alegremente.
-¿no están? ¿Abran salido a desayunar?- pregunto Mirna al ver la habitación vacía.
Entonces Andrey le hizo señas para que miraran por encima de los sillones que habían movido. Y ahí entre almohadones y frazadas se encontraban durmiendo aun Alekxander y Alyz, ella aun sujetando el brazo del Zar. Mirna no pudo evitar dar un pequeño grito de emoción que hizo que Alekxander se despertara.
-¿Ustedes que hacen ahí?- pregunto Alekxander intentando levantarse, aunque cuando sintió que Alyz lo sujetaba volvió a tumbarse.
Aunque ya era demasiado tarde Alyz también había despertado y al ver a Alekxander junto a ella todo el sueño se desvaneció y se levantó rápidamente para ver tras el a Mirna y Andrey.
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Flor de sangre
Manusia SerigalaAlyz es una chica tímida, con una vida normal, con un trabajo normal, pero toda su vida se vera cambiada de la noche a la mañana por el capricho de un alfa. ¿el amor lo puede todo? ¿y que pasa cuando el amor viene acompañado de violencia?