Winx Club. Nueva Generación: La Venganza De Las Trix.

Capítulo 17.

—Creo que voy a vomitar.—admitió Adora sobándose el estómago.

Ya casi era hora de la cita, Lux estaba ayudando a la princesa de Eraklyon a alistarse para su gran noche.

—No han tenido la primera cita ¿Y ya te dejó embarazada? Arwen es mágico.—bromeó la hija de Tecna cepillando el cabello de su mejor amiga.

—¡Lux! No es gracioso,—hizo un puchero.—estoy nerviosa ¿Y si nos descubren? ¿Y si la reservación se cancela? ¿Y si me rompo un tacón? ¿Y si las Trix llegan y nos atacan? Pueden pasar muchas cosas.

—Tranquilízate, mujer. No los van a descubrir, mi plan es infalible. Llamé al restaurante en la mañana para confirmar la reservación. No se te romperá el tacón y no te preocupes por las Trix, dudo mucho que ataquen hoy.—respondió todas las incógnitas de la pelirroja.

—Tienes razón, puff, me estoy preocupando por nada.—admitió observándose al espejo, al detallarse, se dió cuenta de algo que no cuadraba en su cara. Abrió mucho los ojos.—¡Lux! ¡Aún tengo el grano en mi nariz! ¡Es el fin!.

—Relajate, ¿Arwen no había dicho que le parecía lindo?.—recordó frunciendo el ceño.

—Oh vamos, Lux, eso lo dijo por cortesía ¡A nadie le parece lindo un grano!.—exclamó angustiada caminando en círculos por toda la habitación.

El hada de la electricidad estaba harta de las inseguridades de su amiga, no entendía tanto drama. Bueno, al fin y al cabo, es una princesa, y quiera o no fue criada como tal.

Se paró en frente de ella y la tomó por los hombros para detenerla, Adora frenó y antes de decir otra estupidez, Lux le dió un par de bofetadas.

—Deja de comportarte de esa manera, así no eres tú y Arwen se enamoró de tí ¡Demuéstrale como eres todo el tiempo!.—le animó soltandola.

—Soy un fracaso todo el tiempo.

—No seas ridícula y termina de maquillarte, no lo dejes esperando.

(...)

—Hermano, solo les deseo una feliz velada pero no se diviertan demasiado. Mira que quiero que mi hermana sea virgen mínimo hasta los 18.—comentaba Tristán a un lado de un muy elegante Arwen.

Estaban en frente de la habitación de las chicas esperando a que Adora estuviese lista, Arwen no lo demostraba, pero estaba nervioso, quería que todo fuera perfecto.

—No prometo nada.—se limitó a decir el rubio con una risita.

Escondidas detrás de una planta, Soraya y Marga observaban con curiosidad a los chicos. Soraya había esperado a Tristán todo el día fuera de su habitación y en cuanto vió a su hermano en traje formal, quiso saber que tramaban.

—Soraya ¿Tengo que repetirtelo de nuevo? Tristán está con Lux. Todos estos días han estado muy juntos.—le recuerda la morena ya cansada.

—Él será mío, estamos destinados a estar juntos.—citó como hipnotizada por el pelirrojo.

Marga suspiró, que tercos eran en Solaria.

—¿Por qué tu hermano está vestido de esa forma?.

—Posiblemente tenga una cita con Adora.

—Pero ¿Donde? Se tiene prohibido salir de la escuela y no hay sitios románticos aquí.—analiza mirando fijamente a los chicos.