Adora se levantó de la cama mientras bostezaba, se había quedado dormida después de aquel beso que le dió a su príncipe azul. Observó su alrededor y no había nadie ¿Se había levantado tan tarde?. Sin darle mucha importancia, se paró y caminó hasta el baño, se sentía extraña, no escuchaba ningún ruido, pura paz y armonía. Algo andaba mal.
Revisó la sala, la cocina, los cuartos y baños. Nada. No había ni un alma ahí.
—¡Tristán! ¡Lux!.—llamó saliendo del departamento, caminaba por los pasillos y tampoco habían especialistas o algún profesor.—¿Qué ocurre aquí? ¡Tía Flora! ¡Tío Helia! ¡Alguien!.
¿La dejaron sola? No, jamás harían eso. ¿Y Arwen? ¿La abandonó?.
Quería alejar esos malos pensamientos de su mente, debía tener una explicación todo esto y la encontraría. Mientras más corría por los pasillos en busca de alguien, sus nervios aumentaban, poco a poco se iba dando cuenta de que su peor pesadilla se estaba cumpliendo: quedarse sola.
—No.—susurró asustada.—No, no, no, no.—repetía una y otra vez desesperada con las lágrimas empezando a salir.—¡Arwen! ¡Marga! ¡Alguien por favor!.—se detuvo en frente de un salón, el rostro lo tenía empapado de lágrimas y no sabía que hacer.—¡No quiero estar sola!.
Escuchó un ruido dentro del aula, ¡Al fin! Encontró a alguien. Con la mayor esperanza del universo atravesó esa puerta con una gran sonrisa solo para que a los segundos se le borrara. Un grito desgarrador salió de sus labios al presenciar aquella escena.
Sus padres, su hermano, sus tíos, amigos, primos, Arwen... Todos tirados, sin vida... El cuerpo de cada uno tenía un hoyo en el corazón y diversos cortes en las extremidades, sangre esparcida por todo el lugar, los cuerpos de Corde y Soraya estaban clavados en las paredes, manchando de sangre las mismas, las Winx y sus esposos estaban en una pila arrinconados en la esquina, como si fuesen basura, Eloy estaba colgado de un ventilador en el techo con los ojos muy abiertos, Marga y Esmeralda estaban atadas en unas sillas con cortes profundos en sus estómagos, a Lux le salía sangre por la boca y sus manos habían sido mutiladas, Tristán estaba tirado en el suelo con una espada en el cuello. Adora ahogó un grito estando shockeada y asqueada por esa imagen que jamás saldrá de su mente, le entraron unas inmensas ganas de vomitar, pero se contuvo. Sus manos temblaban y las lágrimas no paraban de salir, ahora se sentía más sola que nunca, no podía seguir mirando tal atrocidad, le daban arcadas y sentía un fuerte dolor en la cabeza, se desmayaría en cualquier momento.
Y como si quisieran lastimarla aún más, de la nada surgieron las diabólicas Trix, riendo como si sus vidas dependieran de ello. Se posicionaron frente a la jóven que lloraba descontroladamente por su familia, Adora alzó la vista, encontrándose a Icy.
—¡Eres una maldita!.—con las pocas fuerzas que le quedaban, trató de darle una cachetada, la bruja la evitó fácilmente.
—Gracias, niña. Me han dicho cosas peores.—comentó con voz maternal, burlándose de ella.—Y creo que esto es tuyo. Que lo disfrutes.
La mujer de hielo tenía una mano en su espalda, ocultando algo. Llevó su brazo al frente revelando la imagen más traumática que Adora jamás verá.
La cabeza de su príncipe azul, Arwen, decapitada.
La chica soltó otro grito desgarrador, sus piernas le fallaron y cayó al suelo de rodillas. No, Arwen no. Él no se merecía eso. La parte del cuello goteaba sangre y la cabeza era sostenida por el cabello, Icy lo tenía como un saco. Algo insignificante.
Las tres hermanas reían a su alrededor, volando en círculo. La hija de Bloom gritaba que se detuvieran, pero no le hacían caso. Puso ambas manos en sus orejas y se colocó en posición fetal, esperando que parasen o la muerte. Lo que viniera primero.
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Winx Club. Nueva Generación: La Venganza De Las Trix.
FanficUn nuevo año ha llegado a la nueva generación, donde se pondrá a prueba a los mayores. Las Winx y los Especialistas creyeron que sería un año normal y felíz, pero se equivocaron. La llegada de las Trix alarmó a toda la dimensión, aún más con su nuev...