Capítulo 18.

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- ¿Qué rayos haces aquí Harry? - grité.

No podía creer lo que veía. El chico que me corrió de su habitación, gritandome... ahora estaba aquí, en mi habitación. Mía.

- ¡Oye!, calmate. - Caminó hasta el sofá en el que yo estaba y se sentó. Rápidamente salté de ahí.

- ¿Cómo rayos entraste?

- Estaba abierta

- ¿Y los guardaespaldas?

- Hablé con Jhon, y me dejaron entrar. - Estiró los brazos a lo largo del respaldo del sofá.

- ¡Que hiciste! ¿Qué le dijiste?

- Que... ¿necesitaba hablar contigo?

- ¡Oh, si!, ¡Y él te creyó! ¿Cierto?

- Sí. - suspiré, muy sonoramente. Era obvio que Jhon les creyera más a esas "caritas de ángeles", a mí. - ¿De qué te quejas?, Muchas chicas me quisieran en su habitación.

- Si, claro. Como ninguna de esas chicas saben como eres realmente... pobres. - suspiró ofendido. - Ahora... ¿qué haces en mi habitación?

- Vine... porque quiero.

- Te lo estoy diciendo bien Harry.

- Ay, bueno. Vine a... a... - su mirada estaba fija en el piso, como si las palabras que iba a decir, se le hubieran caído de la boca, y éstas ahí se encontraran.

- ¿Viniste a pedirme una taza de azúcar?

- ¡No!... Yo vine a... - suspiró. - a... disculparme.

- ¿A disculparte?, ¿hablas enserio?

- Si ____, joder. - reí sarcásticamente.

- Oh, si, si. Ya, Harry, para, que vas a matarme de la risa.

- Es enserio, he venido por eso. ¿Apoco crees que vine a verte? ¿A platicar?... ¡oh, ya sé!... ¿a besarnos y tener sexo? - susurró con una sonrisa perversa.

Oh, que asqueroso. Pero, ¿enserio vino a disculparse?, ¿a estas horas?, ¿él?, ¿Harry Styles, la persona más idiota del mundo?, ¿estaba soñando?.

- ¡Eres un asqueroso! ¡Claro que no! - rió, muy, muy fuertemente. - ¿Enserio vienes a disculparte? ¿tú?

- Joder, basta. Hieres mi persona.

- No te creo.

- ¿Por qué?, oh, espera... No me importa. - rodé los ojos. Patético, simplemente patético. No me la creería ni en un millón de años.

- ¿Haz venido porque tú te haz sentido mal, ó te mandaron?

- Me mandaron.

- Ahora entiendo.

- Así que... emm... - tosió, aparentemente, incómodo. - ¿Me... per... donas?

- No lo sé.

- ¿Qué tal si mejor hacemos un trato?

- ¿Cuál?

- Pues... ¿Qué tal si volvemos a repetir la cena de hoy?

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Oh mi Dios.

jajajajaja, ¿ustedes aceptarían? ¿o se negarían?

jajajaja, l@s quiero♥.

La Famosa ______Donde viven las historias. Descúbrelo ahora