La Famosa ______

Capítulo 25.

Llegamos al hotel, ó puede que sólo yo haya llegado, ya que nunca ví a ningún músico (sí, estaba sola en un gigantesco camión).

Al bajar, me topé a una gran cantidad de fanáticas a los alrededores del hotel. Me entró un poco de temor, ya que, eran muchas.

Saludé a algunas, e incluso, noté que en menor parte, había fans míos. Mis hermosos fans. ¿Pueden creerlo? Me estaban esperando. Ellos, son los únicos que pueden alegrar un día como el que he tenido.

Los de seguridad me pidieron que ya entrara al hotel, lo cuál hice. Me dieron una habitación en la que había dos recámaras con una cama matrimonial cada una.

« No tendré privacidad, genial. »

Pocos minutos después vinieron a dejar mis maletas, y seguido de ello, llegó Paul.

- ¡Hola ___! - Parecía cansado, se notaba en su tono de voz que había ido a verme por obligación, no porque desea saber cómo he llegado.

- Hola Paul. - Respondí con sequedad. Realmente no me apetecía saber que los pequeños momentos de privacidad que podría tener en ésta habitación, no los tendría. Me preguntaba quién sería con el o la que compartiría habitación. Esperaba que no fuera alguno de los chicos, ya que, eso sería una gran desgracia para mí.

Me imaginaba bajo los pies de Paul rogándole que me cambiara de habitación, llorando como un niño pequeño.

Paul sólo miraba al suelo. ¿Qué, sólo se quedara ahí ó quiere que le haga un pastel?

- Y... ¿Con quién dormiré? He notado que hay dos camas. - Me atreví a decir.

- Oh, eso. No te preocupes, será con mujeres. Bueno, una es algo pequeña.

- ¿Con dos mujeres? ¿Quiénes? - Estaba emocionada, ¡No dormiré con ninguno de eso chicos molestos!. No podía borrar la sonrisa de mi rostro. Será con mujeres, espero sean amables.

- Es la estilista de los chicos. Tuvimos que ponerlas en la misma habitación por dos razones. Una: ya no había más; Dos: son mujeres y así no se sentirán incómodas.

- Oh. ¿Los chicos tienen dos estilistas? Has dicho que dos mujeres.

- ¡Oh! ¡No, claro que no! - soltó una carcajada. - También viene su pequeña hija. Siempre acompaña a su mamá.

- Oh, entonces, está bien. - Sonreí.

No me llamó mucho la atención lo de la "pequeña hija", espero que no sea una niña traviesa o algo por el estilo.

- Entonces, ya todo aclarado, me voy. - Se dio media vuelta y se dirigió a la puerta.

- Paul... - Él volteó. - ¿Me quedo aquí ó salgo?

- Quedate sólo por hoy, me gustaría saber si ya todos están en el hotel o no.

- Está bien. - Sonrió y se fue.

****

Ha pasado un par de horas y no ha llegado la chica y su hija. Y para matar el aburrimiento, decidí acomodar mis cosas en una de las habitaciones.

Luego de unos minutos, escuché que abrían la puerta principal, y me asomé a ver que era lo que pasaba. Y ahí estaban ellas. La misma chica que ví en los ensayos, y la pequeña niña de cabellos rubios que jugaba unos asientos a lado mío.

- Lux, ya te dije que mañana te las compraré, si no, no comerás hoy. - La chica (cuyo nombre desconozco), se dirigía a la niña. Levantó la vista hacía mí, y me sonrió. - Hola. Dime Lou. - Me tendió su mano, la cuál estreche.