La Famosa ______

Capítulo 34.

- Bien. - Me dirigí a mi recamara. Con un Harry borracho y en bóxer.

Será una noche larga sí se despierta.

Empecé a acomodar una cama improvisada con cobijas y almohadas que encontré en un cajón.

Harry se veía tranquilo, en paz.

Y sin darme cuenta, ya estaba dormida.

Escuché ruidos que provenían del cuarto de baño.

- ¿Pero qué...? - Dije para mi misma.

¿Qué estaba haciendo en el sofá-cama? ¿Por qué dormí aquí?

Harry.

Miré hacia la cama y sólo había sabanas enrolladas. Él estaba en el baño.

Otra vez debió haber vomitado. Joder, ¿qué hago? ¿Estará molesto conmigo?

Calmate, puede que sólo esté
haciendo sus necesidades. Me regañó mi mente.

Tiene razón, sólo debe estar haciendo sus... Se escuchaba como Harry tosía y volvía a vomitar. Estaba vomitando. Realmente, estaba vomitando.

Me paré del sofá-cama rápidamente, y toqué un par de veces la puerta. Harry no respondía.

- Harry... ¿Estas bien? - Sólo se escuchaba como vomitaba. Claro que no te va a contestar con la boca llena de vómito, idiota.

Fui a la cocina tratando de no hacer ruido para no despertar a Lou y a su pequeña hija. Tendría que aprenderme el nombre de aquella niña.

Llené un vaso de agua y agarré pastillas del pequeño botiquín del hotel.

Sabía cuales eran las pastillas correctas, ya que tuve que soportar las borracheras de mi mejor amiga... Oh Dalila, no sabes cuánto te extraño.

Dejé mi momento melancólico de lado y me dirigí con Harry.

Al entrar a la recámara, Harry salía del cuarto del baño. Estaba pálido y sus labios rosas estaban secos. Me acerqué preocupada.

- ¿Quieres... umm... agua? - Ahora miraba claramente, Harry ya no estaba tan ebrio como ésta noche.

- Si, gracias. - Tomó el vaso de un sorbo. Se suponía que aquella agua era para que se tomara el medicamento.

- ¿Estas bien? ¿Te duele algo? ¿Quieres que llame a un doctor? Aquí tengo medicamento, sé que te servirá ya que... - Harry interrumpió mi momento sobre protector, ó como decía Dalila, en mi "momento mamá".

- Me siento bien, normal, no te preocupes. Sólo me duele un poco la cabeza y la garganta. - Harry sólo sonreía sin mostrar los dientes y me miraba. ¿Qué pensaba? Seguro se estaría burlando mentalmente de mi.

- Estas pastillas te servirán, lo sé. - Insistí. No quería que mañana tuviera una jaqueca terrible, por su propio bien y por el mío. Ya que, recuerdo que ésta noche todos me voltearon la cara.

- Bien, las tomaré porque realmente siento como si esta habitación diera vueltas. - Me sonrió. Sus ojos brillaban bajo la luz de la luna, ya que la habitación sólo estaba iluminada por ella... si, estábamos a oscuras. Y él se veía muy guapo.

- Bien, iré por más agua. Si... umm... si quieres puedes recostarte en la cama.

- Bien. - Me dí media vuelta y fui por más agua. Esta vez, procuré llevar una jarra llena. Al regresar, Harry me miró burlón. - No tenías por qué exagerar.

- Callate. - Traté de no reírme ante su comentario, pero fallé. Me senté en la cama junto a él, y tomó sus pastillas.

- ¿Puedo preguntarte algo?

- Ya lo hiciste. - Reí ante mi broma. Vaya que había sido buena. Él rodó los ojos.

- Otra.

- Bien, adelante.

- Umm... ¿Cómo terminé en bóxer?

Oh, lo había olvidado.

- Oh... umm... - Me miraba directamente a los ojos en espera de una verdad que no iba a recibir. - ... Dijiste que así te se sentías mas "libre". - Utilicé mis dedos para hacer las comillas.

Le mentí. Me sentía sucia. Él nunca me ha mentido, mientras que yo lo desnudo y le digo que él solo lo ha hecho. Que vergüenza.

- Oh... bien. - Se limitó a decir. ¿Y si no me creía?. Miraba fijamente mi cama improvisada y volvió a fijar la mirada en mí. - ¿Dormiste en eso?

- Si.

- ¿Por qué?

- Umm... te veías muy cansado y no quise levantarte de mi cama.

- Debiste haberme levantado y no dormir ahí. Ésta es tu cama, ____.

- No importa. Puedo dormir ahí por esta noche.

- Por supuesto que no. Buenas noches. - Se puso de pie y se dirigió al sofá-cama. Se acostó y comenzó a taparse con las cobijas. Escuché que inhalaba profundamente. Seguro estaba cansado y yo le hacía dormir ahí.

- No, no, no. Ven a dormir aquí, yo dormiré ahí. No te preocupes, Harry.

- Buenas noches. - Cortó.

- ¿Cómo hago para que te duermas aquí? - Parecía que él pensaba, ó ya se había dormido. No podía dejar que él durmiera ahí, ya había dormido ahí por... ¿media noche? Ahora me tocaba a mí. - Anda, la vez anterior dormiste por un momento en ese sofá, me toca a mí.

- No pasa nada. Dejálo.

Se me ocurrió algo, espero que funcione y no me arrepienta mañana de esto.

- Harry...

- ¿Si? - Aún no volteaba a verme.

- ¿Quieres dormir conmigo? - Se giró. Me sentía como una terrible puta. Sólo van a dormir, sólo van a dormir, sólo van a dormir.

- Umm... ¿Estas segura? - ¿Por qué lo hacía tan difícil?

- Si.

- Umm... bien. - Parecía inseguro. Se puso de pie y vino hacia la cama... conmigo. Comencé a acostarme y a taparme, esperando a que Harry también lo hiciera.

- ¿Estas borracha? - Reí nerviosamente.

- No. Buenas noches, Harry.

- Buenas noches, ____. - El tiempo pasaba y no podía dormir sabiendo que Harry estaba en la misma cama que yo. No sabía cuanto tiempo había pasado.

La anterior vez, había sido diferente. Pero era porque no sabía que Harry era el que estaba en mi cama. Pensaba que era un sueño, y el que me abrazaba era Zac Efron. Pero al despertar, ví los característicos rulos y tatuajes de Harry. Y ahí fue cuando la burbuja rosa se rompió y salí de la cama sin despertarlo. Se veía tan sexy durmiendo. Harry todo el tiempo se veía sexy, y no llegaba a entender cómo lo hacía.

Harry interrumpió mis pensamientos.

- ____....

- ¿Si?

- Puedo... umm...

- ¿Puedes, qué?

- ¿Puedo... abrazarte? - Oh.

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| Maratón 1/3 |

Opino que levantemos firmas para que Harry se case con todas nosotras.

¿Qué opinan de éste Harry tierno y ebrio? :D

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