había pasado un mes desde aquel día en el cual la pelirroja se comprometió con el castaño, este mes fue uno de los mejores para la chica Andrea se había quedado con ella tres semanas en las cuales William se había ido de viaje a Seattle, si al fin sabia su nombre, había escuchado como lo llamo su padre aquel día que lo conoció, luego de persuadir a su única amiga un poco sobre la pintura de una pelirroja que hay en el despacho de james, pudo saber un poco sobre Madeleine la madre de Molly.
También que samanta no era nada de Molly en realidad. Solo una clase de tutora que quería acostarse con su amo.
William era un hombre muy influyente en el país y sus empresas eran muy reconocidas no solo en estados unidos, también en el mundo, ya que, tenía varias sucursales en diferentes países, gracias a su dedicación a tiempo completo.
En ese mes supo más de lo que se imaginó y se dio cuenta que el quizás no era tan malo y tan perverso en realidad.
A su llegada y desde este día Madi empezaría a dormir con el cómo su mujer, la boda seria dentro de tres meses, se realizaría en california en una de las mansiones de los Smith herencia de William.
Me desperté muy temprano pues hoy al mediodía llegaría William, me duche con agua tibia para luego cambiarme con un vestido suelto amarillo y unos zapatos de piso, mi pelo lo deje suelto, me maquillo un poco y salgo de la habitación como todo una señorita educada, suspiro estaba tan feliz de su lejanía, ya había olvidado como se sentía el infierno. Se me permitía salir al jardín acompañada, además podía comer, siempre que quisiera en mi habitación evitando así la interacción con Samanta y Molly.
Desde los grandes ventanales de la sala puedo apreciar los radiantes rayos del sol, me acerco al ventanal que esta frente al jardín y puedo apreciar las hermosas rosas que lo adornan y los hermosos árboles repletos de hojas amarillas.
Por fin en muchos años puedo estar tranquila y sentir la paz de la madre naturaleza, coloco la palma sobre mi vientre y una sonrisa se forma en mis labios, una sonrisa con un brillo resplandecido, una sonrisa sincera, una sonrisa de amor, de un amor puro y verdadero.
No dejare que nadie dañe lo único bueno que me ha pasado en la vida, mi bendición entre tanta mierda, mi futuro ángel, mi salvación.
Miro a mi alrededor una vez más, si este bebe nace, ni Molly podrá tocarme al fin y al cabo seria heredero del imperio de mi querido prometido, quizás después de todo hasta su violación trajo algo bueno. Ahora sería fuerte, más que nunca y le demostraría a William que era digna de ser la madre de su hijo.
Sigo mirando por el ventanal mientras dejo mis pensamientos fluir, mi madre siempre decía que toda desgracia trae una lección o una bendición, y yo ya estaba en espera de la mía.
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Te Pertenezco (Editando)
RomanceMadison Smells y Madelaine Gruh tienen en común dos maldita cosa, ambas son pelirrojas y ambas son el capricho de un hombre roto y perdido. ¿Qué final puede tener una niña que fue abandonada a sus 3 años en un orfanato, con tan solo un peluche de f...