Despierto cansada como siempre, aún adormilada me entro a bañar. Salgo del baño y me coloco una bata para llamar a Cristina y pedir mi rico helado de chocolate.
—Hola bebe, te encanta tener a mamá durmiendo todo el día. — hablo mientras acaricio mi pansa de casi 5 meses.
Debido a mi sueño intenso, William decidió cancelar nuestra luna de miel.
Suspiro mientras pienso en sus ojos azules y en la magia que hace con su lengua cuando esta entre mis piernas.
¡Malditas hormonas!Bajo las escaleras encontrándome con Molly, la cual mira mi pansa con odio y recelo. Le devuelvo la mirada. Esa mocosa no me intimidará, he hecho lo imposible por agradarle y si no lo he logrado es por su puta actitud.
—Pareces una vaca — comenta despectivamente, lo que me hace enfurecer — gracias, a menos si amo a mi hijo y no tomo pastillas ni dejo de comer para matarlo.
Me arrepiento cuando termino de hablar y veo los ojos brillosos de la niña.
Andrea conoció a su madre, una mujer obsesionada con la belleza, y con tener un cuerpo escultural. Por lo que sé era modelo y sólo estuvo con James por su hija, embarazo que nunca deseó. Pero, el castaño estaba totalmente enamorada de ella he hizo lo imposible por que lo amara.
La arpía espero que la niña cumpliese los dos años y se escapo con un amante, con el cual murió en un accidente horas después.
Desde ese entonces James se dedico a cuidar a su niña, hasta que cumplió 7 años y decidió mandarla fuera del país a vivir con Samanta, mientras el se concentraba en buscar una mujer, que desgraciadamente fui yo.
James
Llego a casa pensando en las ganas de follarme a Madison. Subo las escaleras cansado y como cada noche paso por la habitación de mi hija.
Antes de pararme en la puerta siento sus brazos rodear mi cuerpo y su cuerpo temblar mientras llora.Mi corazón se estruja de dolor, Molly es lo que más amo y quien sea que la halla hecho llorar la pagara.
Logro recostarla en la cama, acaricio su espalda y su cabello rojo igual al de su madre, hasta que logro calmarla.
—¿Que paso pequeña? — miro sus ojitos rojos y como frunce su ceño en señal de confusión.
—¿Es verdad que mi madre no me quería papá? — mis ojos se abren como platos y una furia descomunal me hace apretar los puños.
—¿Quien te dijo eso? — la niña me mira debatiéndose entre hablar o no — claro que tu madre te amaba hija, tú eras su todo, solo que estaba confundida era joven y los jóvenes hacen tonterías. Pero ella ahora es un ángel que te cuida desde el cielo, siempre te lo he dicho. Además me tienes a mi, sabes que te amo con mi vida pequeña. — termino de hablar y con cautela depósito un beso en su frente, y la acorralo entre mis brazos.
—fue Madison papá, ella me dijo que mi madre me odiaba y que su hijo si tendría una madre, no como yo. — siento mi cabeza colapsar y todos mis músculos tensarse.
Que Madison se vaya al diablo con mi hija nadie se mete.
ESTÁS LEYENDO
Te Pertenezco (Editando)
RomanceMadison Smells y Madelaine Gruh tienen en común dos maldita cosa, ambas son pelirrojas y ambas son el capricho de un hombre roto y perdido. ¿Qué final puede tener una niña que fue abandonada a sus 3 años en un orfanato, con tan solo un peluche de f...