Capítulo 18: ¿Fuera de peligro?

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  CAPÍTULO 18: ¿FUERA DE PELIGRO?

ALEX DANVERS

18 de marzo del 2017.

Las luces blancas oscilaban en aquella habitación, demasiado pequeña, 3.03 metros de largo x 2.23 metros de ancho. Tres paredes de concreto y una de vidrio que parecía tapar la vista aun estrecho pasillo con las mismas luces blancas que vibraban. Alex estaba encadenada inconsciente a una cama, con los ojos cerrados totalmente apagada, había un buró aun lado del pequeña cama individual con un pequeño reloj que indicaba el relativo paso del tiempo mientras en una esquina una mujer con una con la pistola de Alex sobre una correa de enfundada por piel de cocodrilo, agrietada y áspera. Sus jeans estaban rotos de las rodillas mostrando la palidez de estas y lo que parecía una cicatriz que parecía seguir avanzando. El rostro era joven y los ojos mostraban la vejes de la inmortalidad, el amplio conocimiento del paso de las ultimas décadas. Una mancha de sangre seca que se extendía atreves de su hombro formando un circulo mal trazado con la mano izquierda de una persona diestra, había otro pequeño círculo dentro de este donde se mostraba que había impactado la bala que antes había sido sacada de su cuerpo, no había cicatriz solo rastros de sangre seca en aquella rotura de la camiseta gris, la chaqueta era roja de piel que parecía quedarle grande, prácticamente las mangas largas y ásperas se bajaban casi a sus brazos, dejando los hombros visibles. Se había remangado las mangas rojizas dejando ver que sus pálidos y sudorosos dedos que sostenían una inyección con un sedante reluciente dentro, la tapa está cubriendo la aguja, parecía que apenas sería utilizada. El tiempo pasaba en lentitud, oculto por su chaqueta estaba un cuaderno forrado de cuero color marrón con grabado dorado en el que estaba transcrito AN-LA-AMB le causaba cierta quemazón y una profunda revoltura en su estomago. Su frecuencia cardiaca estaba luchando entre acelerarse o ser estable mientras Alex parecía revolverse en la cama con incomodidad. No tenía sus zapatos, estaba en calcetines con una esposa contra su tobillo, los pantalones negros y una camiseta sin mangas del mismo color, su cabello estaba revuelto y sudoroso, había un ligero temblor en sus extremidades.

Alex había abierto sus ojos de un momento a otro, lo primero que hizo fue cerrarlos por inercia al mirar directo al brillo parpadeante de las luces que estaban colgadas en el techo, llevó las manos a su rostro totalmente confundida mientras comenzaba a restregarlas intentando desesperadamente volver a recuperar la conciencia totalmente. Una punzada en su nuca le advertía la fuerza del golpe que había recibido y la había dejado inconsciente. Incluso se sentía mareada por su visión tambaleante mientras lograba sentarse en la cama, intentó arrastrar sus pies de mala gana pero la esposa de cadena que tenía un largo de 60 cm. Se quedó con las piernas extendidas y comenzó a mirar hacía todos lados parpadeando, llevó su mano detrás de su nuca para sentir el ligero chichón que había originado atreves del golpe certero. Alex intentó rememorar todo lo que había pasado exactamente aquel 17 de marzo, no había mucho que decir, recabar pruebas experimentales de CADMUS con embriones sub desarrollados y también un ligero y achispado encuentro con Lois Lane. Su mirada se quedó puesta en la joven mujer que la vigilaba como un centinela, los ojos demostraban cierto cansancio y paranoia mientras jugueteaba con la jeringa en sus manos. Alex comenzó a registrar toda la habitación desde las tres paredes de concreto con la pared de vidrio cubierto por una persiana que estaba frente a ella. Estaba totalmente indefensa, sin armas más que sus puños limpios, inmóvil de las piernas y aun estaba abrumada por el golpe, con ligero temblor en su visión.

—Nunca en mis mejores pesadillas imagine esta situación—la voz de la mujer rompió el silencio revelando el acento irlandés que prácticamente sonaba con ironía, cierto toque juguetón como una pequeña y sencilla explosión—, Usted esposada a la cama y yo con cierta satisfacción, ni siquiera en mis oscuras fantasías, aun que debo reconocer que pensé que usted era un poco más salvaje—Alex arrugó el rostro ante la burla de la mujer de ojos traslucidos, eran grises, uno era claro y el otro oscurecido, algo muy extraño, no era un efecto de la luces y las sombras, eran exacto el color. Logro reconocerla, entre aquella mirada oscurecida y sombrea que ocultaba mil vidas y mil noches sin dormir, el desgastado estado su postura, todo lo indicaba.

Secrets and Family (Supercorp y Sanvers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora