Secrets and Family (Supercorp y Sanvers)

Capítulo 28: Estrellas del universo.

CAPÍTULO 28: ESTRELLAS DEL UNIVERSO.

LENA LUTHOR

25 de mayo del 2017.

Las estrellas son masas de gases, principalmente están compuestas de hidrogeno y helio que emiten luz. Se encuentra a temperaturas muy elevadas. Existen reacciones nucleares en sus núcleos. No es algo que quieras saber cuando eres una niña, niña que no tiene creencias alguna en que haya algo más que polvo y oscuridad, que solo exista el espacio vacío y puntos concentrados en el centro del universo. Mientras los demás es oscuridad. No quieres pensar en las estrellas como masas de gases o que están compuesto de hidrogeno y helio. Cuando eres una pequeña partícula a comparación de todo el vasto universo, solo un pequeño punto microscópico, o más pequeño como un átomo, no quieres sentirte tan insignificante. Pero aun así los seres humanos han aprendido a brillar más alto que el sol. Han prendido a ser más grande que todo el espacio. Lena lo sabía mientras miraba las luces del planetario que proyectaban las estrellas, algunas brillaban más y otras eran tan carentes de brillo. Punto tras punto, trazo las constelaciones desde Orión hasta Quirón, sonrió al mirar a géminis. Pensó que las estrellas aun estando tan lejos emitían ese brillo que viajaba por todo el espacio a cientos de años luz solo para ser tan soberbias y demostrar que no eran solo una masa de gases caliente. Lena también podía ser soberbia a veces, quizás no soltó lagrimas, ni su corazón dolió cuando recordó lo que Lex le había dicho cuando habían ido al observatorio Mauna Kea. << ¿Sabes Lena?, tu puedes ser una estrella, en vez de solo ser oscuridad. Puedes brillar, emitir una luz que pueda cruzar el universo para que pueda ser vista en cientos de años, por eso no dejes que nadie apague tu luz>> Lena se rió de aquello, en esos momentos no sabría que su hermano planeaba un atentado para asesinar a un hombre hecho de acero que fue concebido en lugar lejano y criado en la tierra. Lena sonrió levemente mientras se paraba del aquellas bancas acolchonadas. Dejó que las estrellas se fueran cuando prendió la luz con el control remoto. Un hombre con un brazo robótico le miraba desde los escalones que estaban cerca del umbral de las puertas color caoba.

­­­­­­­­­­­­—Jeremiah—le saludo al doctor Danvers mientras este tenía en su brazo una tableta que apoyaba contra su pecho. Los ojos cansados le sonrieron. Lena desdibujo la sonrisa en sus labios y caminó subiendo las escaleras hacía en doctor Danvers, justo a unos cuantos escalones se detuvo. Parecía querer decir algunas palabras, lo cual no le sorprendía, los Danvers siempre se caracterizaban por tener las palabras correctas cuando más lo necesitaban las personas a su alrededor. El cuerpo del doctor Danvers estaba algo relajado, normalmente siempre estaba tenso, eso era una buena señal, extraña pero buena.

— ¿Por qué ver las estrellas desde aquí cuando puede ir a buscarlas a fuera?—Le preguntaba mientras estos salían fuera de la habitación y caminaban por los pasillos de la mansión Luthor. No había optimismo en sus palabras, parecía más como si le estuviera alentando a desaparecer lejos de eso. Era lo que más quería hacer, pero había algo que le hacía detenerse a pensar.

— ¿Cómo esta ella?—Jeremiah parecía exasperado ante el cambio de tema mientras Lena recordaba cada momento de su vida atreves del pasillo. Cuando caminaron donde estaba la matriz artificial, Lena se quedó estática mirando todos esos monitores, aparatos, cables por todos lados. Hombres en bata comprobando cada segundo si el pequeño bulto que se formaba en lo que parecía ser un ultrasonido aun tuviera vida. Quería llevar sus manos a su boca y ahogar el sollozo. La sangre se calentaba en su cuerpo, Jeremiah lo comprendía. Mirar aquel bulto, ese pequeño bulto.

—A salvo—Lena negaba mientras se secaba las lágrimas que rodeaban sus ojos, con sus dedos, con mucho cuidado de que el maquillaje no se corriera. Aun estaba erguida con esa forma tan misteriosa e intimidante de actuar. Lilian estaba tomando el té afuera, disfrutando de las flores de Lex como si eso le trajera el consuelo que Lena no encontraba nunca. Lena nunca sería capaz de poder llevar aquel pequeño bulto en su vientre, no sería capaz de sentirlo dentro de ella, de saber que la vida se estaba gestando. Que cada paso que daba estaba con ella, que siempre estaría ahí, porque desde el momento que nació estuvieron hechas para estar unidas, para nunca alejarse.