5. UNA MUERTE INSTANTANEA.

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Soy una fiel creyente de que, si algo suena después de tanto tiempo, significa que anda mal. Ya tenía tiempo sin escuchar el apodo feminazi que Wesley invento para salvarse el trasero cuando lo golpeé en la cara dejándole el ojo morado después de que quiso besarme al día siguiente de encontrarlo con Julie en la fiesta de Halloween en casa de James. Y aunque ya ha pasado tiempo, aún me sigue sorprendiendo la basura de personas en que puede convertirse alguien por quien antes jurabas quererlo sin importar nada.

—¿Cómo es que ya tienen una cita? apenas empezamos con la apuesta—Barbara las observa negando parpadeando un par de veces.

—Creo que necesitamos hacernos una limpia con algún chaman.

Vuelvo a ver a la pelirroja y esta solo se recarga en mi hombro viendo a las dos brincar en el colchón de mi habitación. Mi madre va a matarme por el ruido que seguro se oye bajo el piso, y quisiera ahuyentar su felicidad de mi cama. que digo de mi cama, de la casa.

—¡TENEMOS UNA CITA!
Lily canturrea por quinta vez en el momento.

—¡KARLA YA NO ES UNA ORUGA FEA Y SOLITARIA, AHORA SOY UN LINDA MARIPOSA!

La coreana se halaga a sí misma haciéndome poner la cabeza pesada en la mesa detrás de mí. Mia las observa metiendo puñados y puñados de gomitas en forma de gusanos a la boca todavía más depresiva que nosotras. Las tres aguantamos verlas como bailan y brincan por todas las partes de mi habitación tratando de ser lo más maduras posibles ante esta catástrofe, pero comienza a ser molesto después de casi cinco minutos así.

—No sé cómo sentirme con esto.
Barbara repite.

Me encojo en hombros mientras miro a una Mia tristona, pero festejando feliz por ellas. No puedo negar que se me hace difícil no creer que tienen un pacto con el diablo o algo, solo ha pasado un día y ya tienen una cita ¿qué clase de brujería es esa y por qué yo no la tengo?  Karla saldrá con Matt y Lily involucró no sé cómo a Apolo en todo esto.  Desgraciadamente Dylan no le habla a Mia, mientras que Barbara y yo estamos más solas que un cajero a la madrugada, todavía sin encontrar nada.

Están colapsando mi paciencia.

—Ay que golpearlas, quiero golpearlas —le contesto haciéndola reír e instintivamente señalo a Mia—Y por lo visto no soy la única.

Mia se coloca unas mascarillas de barro en la cara con una pala de goma tan fuerte que casi se arranca la piel. Aun con eso su expresión es diferente a la de nosotras, hasta podría decir que está decepcionada y siendo la más frágil de todas me cuesta trabajo no pensar en algo que decir para ayudar.

—Por cierto, me contaron sobre lo que ocurrió en el salón de química ¿todo está bien? —Barbara me saca de mis pensamientos haciéndome menear la cabeza antes de responder.

—Creo que sí, ya me siento mucho mejor que hace un rato, gracias.

—En realidad hablaba de Peter, pero no importa.

Abro la boca sorprendida dándole un golpe en el brazo haciendo que se le caigan un par de gomitas que traía en las manos a la alfombra verde.

—¡Oye! tranquila, también me interesa tu vida amorosa. así que tengo que preguntar ¿Peter o Brent? —parpadea con sus enormes ojos negros y entonces entiendo su pegunta.

—Wow no, no te vayas por lados erróneos.

—Vamos solo quiero saber con quién de los dos te vas, porque ahora Brent está más atractivo y Peter ni se diga—se muerde el labio.

Que ahora esté tratando de decir que estoy enamorada de mi mejor amigo no me parece lo mejor para iniciar una charla de chismes.

—Olvídalo, todo sigue igual y nada sobre eso se moverá de lugar—la apunto con el dedo—Mejor busca que hacer y deja de pensar en babosadas. Comienzas a pegármelas.

El club de las chicas solteras© (YA EN FÍSICO) NO EDITADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora