48. ¿SORPRENDIDAS?

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—¿Estás diciendo que ella sigue saboteándonos? —Barbara me ve desde el espejo y le doy la razón

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—¿Estás diciendo que ella sigue saboteándonos?
—Barbara me ve desde el espejo y le doy la razón.

—Aunque menos mal ya escaparemos de todo mañana—veo por la ventana—Necesito relajarme.

Casi susurro esto para mí misma. Mia viene a un lado de Karla a mi costado, pero ni siquiera la miro, estoy sumida en mis pensamientos intentando pensar en algo que me haga ilógicamente dejar de pensar tanto. Últimamente he estado repasando en todo lo que nos trajo a esto. peleas, anónimos, apuestas. Y aún seguimos aquí, intentando reiniciarnos desde cero; intentando saber lo que somos cada que hacemos una tontería.

—Necesito un vestido lo suficientemente lindo para que nadie se fije en mi peinado—.Lily susurra.

—Pero no vas a estar peinada, digo, por si se te olvidaba que no tendrás cabello—Mia se burla e intentó no hacerlo también.

—Yo ya pensé en los minutos que me ahorrare con el cabello corto—Karla sonríe—Veamos el lado positivo, ya nos graduaremos.

Lily asiente—Aunque voy a extrañarlas.

Barbara rueda los ojos—Todavía seguiremos aquí medio año más. ¿Verdad?

Me observa tajante. me quedo sin mencionar nada dejando de lado que su pregunta está siendo todavía más directa para mí que para las otras.

—Aún no me llega la solicitud, todavía no lo sé.
—me escudo en mi lugar—Igual si me voy prometo venir seguido.

—Eso siempre dicen los que no vuelven—Lily niega.
—Aparte, con esto qué pasó con Evan ¿para qué volverías? dudo que solo por nosotras.

Mia se remolonea en el asiento incomoda por lo que acaba de decir. La observo de reojo sin darle ninguna pauta de que estoy igual o más incómoda, simplemente le doy la razón a Lily para evitarme futuros problemas y dolores de cabeza.

Cuando llegamos al estacionamiento vamos directo a las tiendas de vestidos asfixiantes y cero cómodos. Las chicas se adelantan para comenzar a ganar lo que según ellas son los mejores vestidos peleando por ellos contra otras chicas que ven los mismos. Por otra parte, estoy esperando a que esto acabe para poder dejar de lado mi depresión sintiéndome menos contenta que en los bailes pasados.

Hace un año, casi cinco días después de lo que ahora sería el baile en ese entonces, las cinco escogíamos vestidos todas para todas. nos reíamos de cómo nos veíamos antes de siquiera imaginar cómo bailaríamos con esos atuendos en la fiesta. Escogíamos los vestidos más extravagantes para ser el centro de atención, nos gustaba llegar horas después de que ya había iniciado la fiesta para bailar descalzas las últimas canciones que por más extraño que suene son las mejores, y bebíamos los últimos tragos de ponche hasta perdernos entre nosotras sin importar el exterior. Corríamos por el campus carcajeándonos de cualquier tontería ignorantes a lo que pasaría un día después, ignorantes a lo que hoy ya no se puede ignorar.

El club de las chicas solteras© (YA EN FÍSICO) NO EDITADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora