17. SE TE ACABO LA FIESTA.

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—¿Porque estás tan arreglada para ir al infierno? ¿Ya sientes el empoderamiento? —sonrió mirando a Karla delinearse los ojos.

Esta se arregla como si fuéramos a ir a un parque de diversiones cuando pasó por la puerta con mi flojo cuerpo a estas horas de la mañana. No puedo evitar fruncir la cara al ver el diminuto short fosforescente que trae puesto como si fuera primavera.

—Solo trato de animarme—se rasca la nariz—Tu dijiste que sacara mi yo interior y eso voy a hacer. No más depresión.

—Y te apoyo en eso, pero jamás pensé que incluiría ese outfit tan devastador a la pupila.

—Vamos, mi cara de tonta siempre es parte de mi outfit.

Niego volteando los ojos. La apresuró para irnos a la escuela porque no quiero llegar tarde como siempre y necesito mejorar en eso si no quiero un castigo parecido a organizar el baile, tengo tan buena suerte.

—Siento las fosas nasales sin aire, creo que voy a morir justo ahora.—me lanzo a la cama recostándome sintiéndome enferma.

—Muy devastada, pero qué tal cuando se trata de besar a amigos de tus amigos en fiestas sin contarme—cruza los brazos viéndome mal.

—Fue un error que no volverá a repetirse.

—¿Según quién? ¿Tu? Deja de decir tonterías y mejor acepta que estás deleitada por sus deslumbrantes bíceps.

—Eso jamás—la señaló—Me conoces y no pienso avanzar en esto, ambos quedamos en ser amigos. A parte, ni me cae tan bien.

La coreana niega juzgándome de loca poniéndose calcetas de maya.

—Aja, quiero creer que ya sabes qué ser "solo amigos" no va a funcionar—me detiene—Es un viejo truco de ligue para que te relajes y luego ¡Boom! la bomba de la atracción te explote justo en la cara.

Rechistó despreocupada—Deja de crear historias en tu cabeza que no pasaran, apenas es lunes y ya me estás arruinando la semana.

—Entonces deja de ser tan despistada porque a ese chico le gustas más que la noche y sé que lo sabes.

Me niego a pensar en que pueda tener la razón solo por un simple beso y que ahora solo me hace plantearme en la cabeza una y otra vez el cómo se me ocurrió siquiera besarlo y que fuéramos amigos. eme aquí de nuevo buscando un porqué de mis decisiones como siempre.

—Ese es un mal conjunto de ropa para alguien que parece estar enferma de gripa—me mira acomodar mi blusa mostaza de mangas anchas con un prominente escote en V haciéndome abrir la boca.

—¿Que te pasa? Mi piel necesita aire fresco.

Se ríe mientras ve su celular.

—Que atrevida. por cierto, si no te enteraste, Barbara esta que explota; se salió hasta del grupo de mensajes anoche.

—Ya lo suponía, seguro creyó que por hacerlo a media noche no nos daríamos cuenta—tomo un esmalte morado del tocador—Y que quede claro que yo no voy a abogar para que la metan de nuevo.

—Yo menos, se quiere hacer la víctima.

Suelto una risa escuchando un celular vibrar y miro la pantalla del mío esperando que sea este, pero pasa justo lo contrario. Karla ahora tiene una sonrisa de oreja a oreja ignorando mi presencia susurrando cosas como poseída mientras le ruego a los cielos irnos ya.

—La verdad es que dormí de la mierda.

Arrugo la nariz escuchándola hablar sola sin sentido mientras corazones se reflejan desde el espejo cuando está se pone de espaldas al tocador. El nombre de Matty me hace rodar los ojos siguiéndola con la mirada por un rato y esta parece sentirlo porque enseguida me encuentra infraganti.

El club de las chicas solteras© (YA EN FÍSICO) NO EDITADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora