Mi esposo~ creada.

Capítulo veintidos.

Llegué a mi casa, abrí la puerta despacio, eran las 23:46hs, lo más probable de que Liz ya esté durmiendo.

Divisé la casa de donde estaba parada, y no vi a nadie, solte mis cosas dejandola en la mesa que estaba allí, subí al cuarto me pegué una ducha rapida, para ver si podía olvidarme un poco, o relajarme, mi cuerpo estaba demaciada tenso, demaciados nervios.

Me cambié y puse mi sueter largo, y caminé a la terraza que estaba allí, dejandome la vista de una ciudad hermosa, mientras una leve viento pegaba a mi cuerpo, eso era lo unico que me entendia cuando tenia un día malo en mi trabajo. Me apoyé sobre la punta mirando hacia abajo, pensando, no podia dejar de pensar, habia golpado muy fuerte en mí, es más la llegué a querer demaciado. A lo mejor, solo me ocupaba en salvar su vida, intenté lo mejor que pude. Mientras que unas lagrimas caian unos brazos rodeaban mi cintura, si era el. Justin. El sabia lo que me pasaba cada vez que me encontraba alli.

-Tranquila.- dijo el, y se enterró en mi cuello, sentia su respiración.

Mis ojos volvian a las lagrimas, no podia dejarlo.

-Todo va estar bien.- dijo el y besó mi mejilla.

-No lo puedo creer.- dije secando mis lagrimas.

-Tranquila, todo va a estar bien.- dijo el.

-¿Como sabes todo esto?.- pregunté mirando al frente.

-Giuli me contó.- me respondió. -Me dijo que estabas estresada por lo de hoy, que te ayude.- dijo el.

Suspiré profundo.

-La encontrarán ten fé, ella estará bien.- dijo.

-No lo puedo saber.- dije.

-Traje café.- dijo el, y me giró haciendo que quede mirandolo, junto nuestras frentes mientras que mis lagrimas seguian cayendo, el con una mano secó esas lagrimas y me besó cortamente.

-Ven.- dijo y me agarró la mano y me dirigió a la mesa que estaba alli en el mismo lugar en el que estabamos. Se sentó y me hizo seña de que me sienta sobre su regazo, y obedecí, alcanzó dos tasas de café, y me la entregó, y le dí un sorbo, debo admitir que el era bueno haciendo café.

-Relajate amor.- me dijo.

-No puedo.- dije llorando.

-Ella estará bien, la encontrarán, esta más que dicho, tienen más información de la que siempre tienen.- dijo el. -Confía en mi, todo estará bien ¿si?.- y me besó.

-No todo es facíl allí Justin.- dije.

-Amor, entiendo lo que te cuesta salir adelante con estas situaciones, pero quiero que entiendas que te relajes, mañana será un día nuevo, y todo estara bien.- dijo.

-Ella me dijo que le deje un saludo a su mamá.- y lloré de nuevo por eso y me abrazó, haciendo escuchar su corazón.-Me dijo qie su madre era perfecta... que la amaba.- y me abrazó aun más sentia que el me entendía. -Eso me partió el alma.- dije con mi voz quebrada.

-Te entiendo.- dijo el.

-No se merecia esto.- dije. -Aun no entiendo el porqué hacen esto, cuando sera el maldito día en el que terminen con tanta maldad, y con el maltrato.- dije llorando, y Justin me besó.

-Tranquilizate, vamos a dormir ¿si?.- dijo.

-No puedo Justin, no puedo.- dije mirandolo.

-Bien me quedaré contigo.- dijo. -Te amo.

-Y yo a ti.- y lo abrazé más fuerte de lo que lo estaba haciendo.

-Puedes desquitar la bronca, la tristeza, vamos hazlo, aprietame.- dijo y me desquité.