EXTRA: Cumpleaños de Draco Malfoy.
DRACO LUCIUS MALFOY BLACK
Bostecé por octava vez, frotándome los ojos con las manos, me dirigía hacia la sala común de Slytherin. El camino a las mazmorras jamás se me había hecho tan cansador, los párpados me pesaban y arrastraba levemente los pies, por la falta de sueño.
Aquella era otra de las noches en las cuales no había podido dormir porque debía reparar aquel horrible y apestoso armario evanescente. Si seguía de esta forma, iba a enfermarme de gravedad.
Aunque cualquier cosa era mejor que hacer un trabajo para el estúpido calvito sin nariz.
Volví a bostezar mientras caminaba por las mazmorras, buscando a tientas la pared de que abría paso a la sala común. No podía esperar por recostarme en los sillones de cuero negro que estaban frente a la chimenea, con la única presencia de Arts a mi lado.
Sonreí como tonto cuando conseguí la pared indicada.
— Merlín –murmuré la contraseña, pasándome una mano por el cabello.
La pared se movió, dándome el acceso a la sala común. Por suerte, no había nadie dentro.
<< ¿Cómo se supone que habrá alguien a las cinco de la mañana? >>
Conduje mis pasos hacia la escalera que conducía a los dormitorios de los chicos. Y al dormitorio de mi novia. Volví a sonreír como idiota cuando recordé a Artemisa. Siempre, desde que la conozco, con tan sólo pensar en ella, me convertía en el hombre más patéticamente enamorado del mundo.
Sus ojos, aquellos ojos tan peculiares que tanto adoraba. Su cabello liso con suaves ondulaciones, de un hermoso color castaño avellanado. Sus labios gruesos, rosados, que tanto me gusta probar. Y, sobre todas las cosas, esa espectacular sonrisa.
Abrí la puerta de mi habitación, caminando como un muerto en vida. Sin cambiarme, me lancé en la cama. Mis ojos se salieron de sus órbitas cuando escuché el crujir de algo en mi espalda, me giré con velocidad, encontrándome con una carta arrugada.
En letras de color verde esmeralda, estaba escrito mi nombre.
Draco Malfoy,
Estúpido hurón, feliz cumpleaños.
Tengo una sorpresa para ti, así que necesito que sigas atentamente estas instrucciones.
Fruncí el ceño, mordiéndome el labio inferior con fuerza. Había olvidado mi propio cumpleaños, Merlín.
Continué con la lectura:
1. Este será una especie de juego donde tendrás que seguir una serie de pistas para ir encontrando tus regalos de cumpleaños. No todos los días se es mayor de edad, huroncito.
2. Cada vez que consigas una pista, estarás más cerca de hallar el regalo final.
3. La primera pista es: un recuerdo doloroso puede demostrar muchos sentimientos, así que ve al lugar dónde sellamos nuestra relación con una única frase.
Nos vemos dentro de poco,
Artemisa Slytherin.
Sonreí como idiota, sintiendo un fuego abrazador crecer dentro de mí. El lugar donde le dije, por primera vez, te amo.
De pronto, todo el sueño que tenía se desvaneció. Saqué la varita de la parte interna de mi chaqueta, agitándola con rapidez para poder cambiarme de atuendo por algo más apropiado para mi cumpleaños.
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Artemisa Slytherin y el Misterio del Príncipe Mestizo ➂
Hayran KurguLUMOS... Definitivamente no puedo vivir en un mundo normal, ni mucho menos seguro. Mi vida está repleta de circunstancias insólitas, es como si el creador del mundo estuviese burlándose de mí. Soy la heredera de un poderoso mago, ganadora del Torne...