Tres Hombres Y Una Kunoichi

Capitulo 13: Evitando miradas

-Sakura...-llamó para que ella levantase el rostro

Sus ojos se encontraron y comenzaron a trasmitir un sin fin de cosas que ninguno podía entender. Con lentitud sus rostros comenzaron a acercarse y disminuir la distancia entre sus labios. Era algo que ninguno podía controlar, que ninguno podía detener y que tampoco deseban hacerlo...Era como si sus labios estuviesen gritando, exigiéndose uno al otro que se unieran por fin...

Estaban a poca distancia, podían sentir su respiración chocando con los respectivos labios del otro, el calor de su aliento y la intensidad de sus miradas...

Solo faltaban un par de milímetros para por fin unir sus labios cuando...

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Mierda...

Masculló mentalmente por enésima vez mientras pateaba las piedras que encontraba en su camino, intentando así calmar la frustración que sentía al ver que su plan había fallado...

Hizo una mueca de irritación para luego mirar a la chica que caminaba delante y que ni siquiera se dignaba a mirarlo. Bufó unas maldiciones por lo bajo y aceleró el paso hasta quedar a su lado.

Sakura sintió un leve estremecimiento al sentir la fuerte presencia del Uchiha a su lado. Tragó con dificultad y desvió su mirada al mar intentado ignorarlo por completo. Una vena palpitante se situó en la sien del vengador... ¿Por qué no le daba la cara si al fin de cuentas no había pasado absolutamente nada...? La miró insistentemente intentando incomodarla, pero parecía que por más que la mirara ella más lo ignoraba. Finalmente soltó un suspiro de frustración y centró su atención en el cielo, sentía que ardía en rabia y podía apostar que su aura de batalla podía sentirse a más de mil kilómetros de distancia.

¿Por qué demonios el destino le jugaba esas malas pasadas...? ¿Por qué si le había otorgado la oportunidad para por fin deshacerse del idiota de Yusei tenía que arruinarla de esa manera tan...tan...perturbadoramente asquerosa?

Una mueca apareció en sus labios. Podía sentir un escalofrió recorrerle la espalda con solo recordar la incomodísima situación que había pasado, jamás en toda su vida se había sentido tan asqueado y avergonzado...

-malditas solteronas con sus malditos gatos de nombres ridículos...-gruñó internamente mientras recordaba como había sucedido todo

-flash back-

Estaban a poca distancia, podían sentir su respiración chocando con los respectivos labios del otro, el calor de su aliento y la intensidad de sus miradas...

Solo faltaban un par de milímetros para por fin unir sus labios cuando...

-disculpa guapo...-dijo una voz gastada ante él

Sasuke parpadeó confuso al ver que la imagen de la kunoichi era remplazada por una horrible anciana vestida de un apretado corsé negro y minifalda mostrando sus escuálidas, huesudas y arrugadas piernas. Sintió que un tic se apoderaba de su ojo mientras que intentaba controlar sus nauseas...

La mujer sonrió coquetamente mostrando su perfecta dentadura, la cual de un momento a otro se había caído dejando ver su boca desdentada. El vengador sintió que las nauseas aumentaban, carraspeó intentando controlarlas y a la vez alejar a la mujer que estaba prácticamente colgada sobre su cuello. Con disimulo buscó a la pelirosa, ignorando la insistente y lasciva mirada de la anciana.

Cuando pudo divisarla sintió que su rabia iba en aumento. La chica se veía confusa, como si intentase aclarar su mente, como si intentase convencerse que lo que estaba a punto de suceder realmente había sido un sueño. Sus miradas se encontraron de repente. La chica sintió que sus mejillas se pintaban de un furioso color carmín por lo que rápidamente la desvió para luego darle la espalda.