Capítulo 8: Miradas que provocan.

211 12 13
                                    

Mónica estaba un poco nerviosa, no entendía muy bien el porqué, pero lo estaba, en cambio Laura parecía una niña pequeña que va camino a un parque de juegos, Mónica la ve de reojo y suelta una risita por debajo, pero Laura se da cuenta.

-¿De qué te ríes?- le pregunta Laura.

-Pues, es que pareces una niña.- esta vez Mónica suelta una carcajada.

-Jajaja, déjame, no había salido con un hombre hace como…- Laura se queda pensando- Tres semanas.

Ambas se ven y sueltan a reírse. Así pasan el camino, entre risas y bromas, hasta que por fin llegan a la casa de Óscar la cual deja sorprendida a ambas porque era muy hermosa y grande. Se bajan del auto y van directo a la entrada, Laura toca el timbre, de inmediato le abre Alice.

-Buenas noches señoritas, adelante- les dice Alice amable a ambas.

“Gracias” se escucha al unisonó.

Al entrar en aquella casa pueden notar que es mucho más linda por dentro. En ese momento baja Natalia por las escaleras con un vestido rosa pastel, con el busto apretado y falda volada, se acerca a ambas con una sonrisa de oreja a oreja, hasta que fija la mirada en Mónica.

-Hola…- dice Natalia sin apartar la mirada de Mónica.

Mónica se está empezando a incomodar al notar como la mira, no sabría definir su mirada.

-Hola- dice Laura extendiéndole la mano a Natalia.

Es en ese momento que Natalia ve a Laura y le estrecha la mano en forma de saludo, luego le extiendo la mano a Mónica volviendo a verla.

-¿Qué tal?- pregunta Natalia al ver que Mónica le estrecha la mano también.

-Muy bien… ¿Tu eres…- le dice Mónica.

-Yo soy Natalia, la hermana menor de Abreu y Óscar, ¿y tu guapa?...- le pregunta Natalia- Bueno, ¿y ustedes…- Rectifica la pregunta al darse cuenta que no solo esta Mónica presente.

-Yo soy Mónica y ella es Laura- responde Mónica con una sonrisa.

En ese momento notan que Abreu y Óscar bajan las escaleras. Ellas al verlos sonríen amable, pero algo que para Mónica fue inevitable es quedarse viendo a Óscar, y él no se queda atrás, porque no le quitaba la vista de encima, pareciera que se la estuviese comiendo con la mirada.

Todos se saludan, al darse cuenta de que ya era hora de cenar le piden a Alice que sirva la cena y toman asiento en la mesa, ya todos sentados, tomando algo de vino mientras comen, Abreu lanza una pregunta hacia Mónica.

-Oye Mónica, ¿y tienes pareja?- la pregunta fue sin filtro, cosa que casi hizo atragantar a todos.

Óscar le pega un codazo a su hermano, fue muy imprudente la verdad, pero Mónica se aclara la garganta y decide responder.

-No- mientras toma un sorbo de vino.

-Se esta divorciando- dice Laura de repente, en ese momento Mónica la fulmina con la mirada.

-¿Enserio? Mi hermano también- responde Abreu señalando a Óscar, el cual se pasa una mano por la frente.

Óscar trata de aflojar un poco el nudo de su corbata ya que de repente le empezó a dar algo de calor, y como no, si no quitaba la mirada de Mónica, ni de su escote. Mónica se da cuenta y se mueve en su asiento algo incomoda.

-Óscar cuenta algo de ti, ¿Cuál es tu apellido, en que trabajas, tienes hijos?- Laura le hace preguntas a Óscar bombardeándolo un poco.

-Pues…- suelta una carcajada ante tantas preguntas- Mi apellido es Tarruella, soy empresario, pero tengo la comodidad de trabajar desde casa, y no, no tengo hijos- le responde Óscar.

-¿Y tu Mónica…- Óscar le pregunta con la mirada directa a la de Mónica, Laura se sorprende un poco, pensó que le preguntaría a ella.

-Mi apellido es Naranjo, soy escritora, y tampoco tengo hijos- finaliza Mónica dedicándole una sonrisa a Óscar.

Mientras en los pensamientos de Óscar, “Dios, esta mujer me va a matar, es hermosa, tiene un cuerpazo… Y ese vestido…ese vestido le queda estupendo…

Los pensamientos de Óscar son interrumpidos cuando Laura dice:

-Mi apellido es Blanco, soy abogada y tampoco tengo hijos- dedicándole una sonrisa a Óscar.

-Mónica me gusta mucho tu vestido- dice Natalia viéndola.

-Gracias, el tuyo también- contesta amable.

-¿Mónica y que te trajo por Roma?- pregunta Abreu esta vez algo serio, ya que había notado como su hermano miraba a Mónica.

-Solo vine de vacaciones por un tiempo- responde rápido, no quiere dar explicaciones al respecto.

Ya una vez retirados los platos de la cena, Alice aparece con el postre, unas fresas con nata… ¿Es que acaso la tensión de estos dos no podía empeorar?... y ahora con este postre tan…

-¿Me permiten el baño?- dice Mónica levantándose.

“Claro”, dicen Abreu y Óscar levantándose al mismo tiempo, Laura, Natalia y Mónica se les quedan viendo, hasta que Natalia se levanta y dice.

-Tranquilos fieras…- suelta una risita- Yo la acompaño.

Mónica sigue a Natalia, entran en una habitación la cual deja sorprendida a Mónica porque nota que es la habitación de Natalia, le pareció súper raro que la llevara al baño de su habitación y no al de la casa como tal.

-Pues aquí está el baño, yo te espero aquí- dice mientras se sienta en la cama y ve a Mónica con una mirada algo extraña.

Mónica asiente y entra al baño, al cerrar la puerta se recuesta de espaldas y piensa “¿Qué le pasa a esta niña, porque me ve de esa manera?”.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

NOTA: Hola lectores! Les quería recordar que en el principio de la historia mencioné que sería una novela llena de matices diferentes, por eso es que todo esta cambiado incluyendo las profesiones reales de los protagonistas, mas haya de sus nombres todo lo demás es pura ficción. Quería aclararlo para que no les resulten extraños los cambios... Mañana seguiré con otro capítulo, gracias por el apoyo, besos!💋

ATT: Mariom

Pasiones Encontradas I Donde viven las historias. Descúbrelo ahora