Pasiones Encontradas I

Capítulo 64: Mentiras.

Aún no habían llegado al pueblo cuando el móvil de Carol suena, era David.

-Hola cariño, ¿Qué sucede?- responde de inmediato.

-Carol, ¿Dónde están?- se escucha preocupado.

-Em…ya casi llegando a casa, ¿Por?- se había puesto nerviosa, no quería revelar que habían estado haciendo.

-Óscar está furioso, se encontró a Clara y le dijo que tu le enseñarías a usar un arma a Mónica- lo dijo casi susurrando.

-Joder…Ya estamos por llegar, ahora hablamos- finaliza la llamada.

Carol se le quedo viendo a Mónica y ella de inmediato noto su preocupación.

-¿Qué pasa mujer,  y esa cara de susto?-musita.

-Óscar sabe lo que estábamos haciendo- lo dice sin más.

-¿¡Qué!? Pero… ¿Cómo se ha enterado?- estaba sorprendida.

-Veras…Se consiguió con Clara y ella se lo dijo, supongo que él se lo pregunto y bueno…- le cuenta Carol.

-Mónica, ¿Pero tú le dijiste a Clara que no dijese nada?- pregunta Romina.

-Joder no, tampoco le avise de la mentira que me invente para que Óscar me prestase la camioneta.- toma el teléfono y marca el numero de Clara.

No contestaba, lo volvió a intentar y esta vez contesto a la tercera.

-¿Mónica?- pregunta extrañada.

-Sí, hola, oye, ¿Exactamente que le dijiste a Óscar?- fue directa.

-Pues me lo encontré en la plaza del pueblo, me saludo y yo a él…- la interrumpe.

-Vale, ¿Pero que le dijiste?- estaba irritada, Clara lo noto y fue breve.

-Me pregunto que porque no estaba con ustedes en el museo, no sabía de lo que hablaba y él lo notó, así que me preguntó que estarían haciendo y le conté lo que Carol te enseñaría.- se escucha un “Joder” de parte de Mónica.

-¿La he cagado?- pregunta Clara apenada.

-Un poco si cariño…- le responde Mónica sincera.

-Lo siento Mónica, no pensé que Óscar no supiese de lo que harían- de verdad estaba apenada.

-Vale, ya no te preocupes nena, hablamos luego, un beso.- la chica se despidió y finalizaron la llamada.

Mónica se apresuro a llegar al pueblo, pasaron fugases por Sara al colegio y luego fueron directo a la oficina de Óscar. Las demás se quedaron en la camioneta, Mónica fue la única que se bajo y fue directo a donde estaba Óscar.

-¿Se puede?- pregunto bajito entre abriendo la puerta, Óscar se encontraba en el escritorio viendo unos papeles.

-Sí, pasa- medio levanto la mirada para fijarse que era Mónica pero a los dos segundos se volvió a ocupar de los papeles.

-Cariño yo…- ni siquiera pudo terminar de hablar, Óscar la interrumpió.

-¿Por qué me mientes?- de repente la observaba fijamente, una mirada que ponía nerviosa a Mónica.

-Cariño a mi no me gusta mentirte, pero esta vez tuve que hacerlo porque sabía que no te gustaría lo que íbamos a hacer- Mónica se le notaba nerviosa, Óscar solo la veía.

-Mira, por más que no me guste, sinceramente, prefiero que me digas la verdad- se levanta de su asiento y se acerca a Mónica apoyándose en el escritorio.- Me quiero casar con alguien que sea cien por ciento sincera conmigo.- su mirada se relajo un poco y ahora la miraba con ternura.