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N/A: Durante el capitulo hay una parte de mensajes de texto, la letra en cursiva es Vanessa y la letra en negrita es Ruggero

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N/A: Durante el capitulo hay una parte de mensajes de texto, la letra en cursiva es Vanessa y la letra en negrita es Ruggero. Nuevamente cuando aparezcan los *** reproduzcan la cancion, disfrutenlo

          

El camino a casa de Vanessa se me hizo eterno mientras pensaba en qué decirle cuando lo viera, en cómo explicarle que nada de lo que había visto esta noche era real, que lo único verdadero e importante de esa maldita noche había sido nuestro baile; las aceras estaban casi vacías a medida que me acercaba al edificio al final de la calle y con mis nervios y ansiedad me armé de valor y entré sin pensarlo mucho, el vestíbulo seguía siendo igual de pequeño y las escaleras igual de gastadas pero la verdad es que nada de eso me importaba a medida que subía lo más rápido que podía en dirección al último lugar donde sabría podría encontrarlo.

El color rojo intenso de la puerta de Vanessa estaba frente a mis ojos hacía al menos diez minutos pero yo todavía no podía obligar a mi cuerpo a que reaccionara, sentía un miedo intenso y una sensación de desasosiego que no me dejaba pensar o actuar con claridad, quería verlo y explicarle pero tenía miedo a que nuevamente huyera sin darme tiempo a nada, no quería que las cosas entre nosotros se salieran de control y no tenía tiempo para tener una conversación común, solo tenía que ir y decirlo, decirle lo que pasaba dentro de mi cuando lo tenía cerca y lo mucho que me importaba.

Toqué la puerta con mis manos temblando y mis piernas perdiendo la capacidad de sostenerme, no pasó mucho tiempo cuando la pelirroja abrió la puerta y me miró con sorpresa para luego rodar los ojos y cerrarla nuevamente en mi cara; me sorprendió su actitud pero eso solo podía significar que había hablado con él y que si no estaba allí entonces ella era la única que sabía dónde estaba.

-Vanessa por favor ábreme- pedí tratando de no levantar mucho la voz pero no obtuve ningún tipo de respuesta –déjame explicarte, las cosas no son como crees- supliqué apoyando mi cabeza en la fría madera de la puerta.

-¿Entonces cómo demonios son?- preguntó abriendo de un tirón, su expresión era enojada y fastidiada.

-Yo no sabía que eso sucedería, ella solo lo anunció pero yo no- traté de explicar pero ella levantó su mano interrumpiéndome.

-¿Tu no sabías que estabas comprometida? Si claro- se burló con ironía.

-No te miento, no sé qué te ha dicho Ruggero pero las cosas no son como el cree por eso estoy buscándolo...- le dije tratando de que comprendiera lo que había sucedido.

-¿Quieres que te crea cuando dices ese tipo de cosas? Te lo advertí Karol, te dije que Ruggero no era un maldito juguete pero no te importó y lo usaste- me recriminó con rudeza.

-¡Claro que no! Cuando él me conoció sabía lo que sucedía en mi vida, sabía que estaba perdida, en ningún momento lo use- expliqué.

-Eres una estúpida, créeme que si por mi fuese no verías a Ruggero nunca más, lo has destrozado y ahora pretendes venir aquí a exigirme que te lleve a verlo- escupió con enfado.

Luces de Roma [RUGGAROL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora