Pretty [Pennywise/Bill Skarsgård] [Español]

V

En un impúlso me puse de pie, al ver un hermoso piano de cola color negro. Me acerqué rápidamente y con delicadeza toqué los finos detalles de madera.

—Es bellísimo—murmuré— ¿Tú tocas?

—Em...no, mi tía—contestó colocando sus manos en sus bolsillos—Pero por lo que veo tú sí. Toca algo—exigió.

—Ya es tarde, otro día...

—Entonces toca y luego te acompaño a tu casa.

Luego de unas cuantas respuestas negativas y mucha insistencia de su parte, terminé sentada a un lado de él en el largo taburete rectangular. (Canción en multimedia, imaginen que en esa época existía)
Víctor observaba cada movimiento que yo hacía con suma atención, recuerdo que cuando Georgie tenía cinco años tocabamos alguna melodía de cuna juntos, él se sentaba en mis piernas, ya que de otra forma no llegaba a las teclas. Sonreí al recordar aquello. George no merecía la muerte, sin duda, era un niño tan puro, mamá siempre lo decía. En casa mis padres trataban de seguir como si nada hubiera pasado, como si su hijo más pequeño jamás hubiera muerto, como si mi único hermano fuera Billy. Lo que no sabían era que las paredes eran muy finas, por lo tanto, antes de dormir escuchaba como papá consolaba el llanto de mamá, o al menos eso trataba. Gracias a Dios Bill no sabía eso, ya que su habitación estaba lejos de la mía.
Al tocar la última nota, me encontré con Vic en una especie de trace, su mirada ya no estaba en el piano, sino en mí. Sus ojos verdes me ponían algo nerviosa.

—¿Cómo se llama esa canción?

—I wanna be yours—dije sin pensar en que lo podía llegar a tomar como una insinúacion—Victor, ya debo irme.

Me puse de pie y él me siguió.

—Déjame acompañarte a tu casa—se ofreció, lo miré de forma desaprobadora—Sólo son dos calles, déjame hacerlo.

Todo el transcurso del camino me sentí observada, al pasar por al lado de los pozos de desagüe sentía que alguien me jalaría del pie y me mataría al igual que a Georgie. Al llegar a la puerta...

—Muchas gracias, por todo Vic—suspiré.

--No es nada—me sonrió—, adiós.

《Vic, ella nunca lo había llamado así...》

[...]

Al otro día lo primero que hice fue ir a la bibliotaca, necesitaba conseguir algunos libros para la clase de literatura. Tomé un par totalmente aburridos sobre temas como la poesía y cosas por el estilo. Me senté en una de las mesas y, al levantar la mirada, me encontré con el mismo niño de ayer, me sorprendí bastante, ¿no se supone que debería de estár jugando afuera? Me acerqué rápidamente...

—¿Puedo?

—Claro.

—Veo que tenemos gustos similares, ayer no me dijiste tu nombre.

—Soy Ben—contestó con una sonrisa.

—Un gusto Ben, me llamo June—le devolví la sonrisa—¿Henry, Belch y Victor te molestan seguido?

-—Sí, bastante.

—¿Tienes amigos?

—No muchos, en realidad ninguno.

—Bueno Ben, ¿tienes algo que hacer en este preciso momento?—él negó con la cabeza—Genial, porque mi hermano estará feliz de jugar contigo.

Los ojos de Ben se llenaron de sorpresa y felicidad, también de nerviosismo. Espero que Bill quiera jugar, porque si rechaza a éste pobre niño lo ahorco.