Pretty [Pennywise/Bill Skarsgård] [Español]

I

La lluvia caía en gotas gruesas y espesas, ese día para June y Bill estaba pintado de negro y gris.
Teo abrazaba a June mientras que el club de los perdedores hacía lo mismo con Bill. Henry Bowers no apareció –Teo le pidió que no lo hiciera–.
En ese momento la castaña se sentía protegida en los brazos de Wayne, él la reconfortaba, la hacía pensar que eran ellos contra el mundo y que, aun que sus padres ya no estuviesen, seguía teniando una familia al lado de Bill y Teo.
Estaba mal, no lo negaba, pero habían dejado de ser una familia desde hacia ya un año cuando Georgie murió. Sus padres trataron de fingir que su hermano menor jamás existió, cuando vieron que eso no funcionó trataron de ignorar a June y a Billy para no recordar el amor que habían perdido y el sentimiento de abandono que les había dejado.

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La seremonia funebre había terminado, fueron al que era su nuevo hogar. Según la ley June era tutora de Bill y Teo le propuso vivir juntos como una pareja.
Ni bien entraron a la casa de Wayne todas las cosas ya estaban en su lugar, y con eso me refiero a las cosas de la casa en que vivían con sus padres.

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L

a pareja estaba en la cocina. Teo preparaba la cena mientras June sólo se dispuso a firmar algunos papeles del testamento sentada en la mesa que se encontraba allí. Por alguna razón ya no tenía melancolía, no se sentía mal. Soltó un bufido y apoyó su mentón en la palma de su mano.

—¿Qué sucede?—preguntó Teo mientras encendía el horno.

—Nada, es sólo que...—se limpió una fina lágrima que pasaba por su mejilla izquierda—me siento mal por no poder extrañarlos.

Entonces, sin darse cuenta, rompió en llanto. Era la verdad, hacía un año que June estaba tan falta de amor por parte de sus padres que los sentía unos desconocidos.
Teo dejó al instante lo que estaba haciendo y se acercó a abrazarla.

—Soy lo peor en éste mundo—sollozó.

—Eso no es verdad, por Dios June.

La tomó de la mejilla con suevidad para que lo mirara.

—Eres la menos indicada para decir que eres una mala persona, todo lo que has hecho en éste verano por Bill lo demuestra.—continuó—Haces todo para que no sufra y estoy segura de que por George también lo hacías, tal vez tus padres eran tu mayor familia, pero no creas que la perdiste cuando ellos murieron, aún nos tienes a Billy y a mi.

June le sonrió con lágrimas en los ojos, acarició su mano levemente y con delicadeza con sus dedos y lo besó.
Él tenía razón, ella acababa de perder una familia, pero el destino le había dado otra –o mejor dicho la tortuga del cosmos se la había dado–.

—Tienes razón, yo ya no tengo a mis padres y a George—suspiró cuando finalizaron el beso—pero ahora te tengo a ti y a Bill, te prometo que eso jamás va a cambiar, a partir de ahora estamos juntos y haré lo posible por quererte cada día más.

Eso aumentó la felicidad dentro del payaso. June era suya, nunca le pareció que la vida humana le podía hacer sentir tantas cosas.