Pretty [Pennywise/Bill Skarsgård] [Español]

VIII

P L A Y L I S T: Human (multimedia)

Había llegado el lunes, entré a la escuela, no dormí en toda la noche, me la pasé llorando. Tenía los ojos rojos, mis mejillas no tenían una gota de maquillaje, no tengo imperfecciones en la piel, pero en partes tiene distintas tonalidades y la emparejo con un poco de base, nada muy grande. Pero hoy no quería hacerlo.

...

June caminaba por los pasillos de la escuela con la mochila colgando sobre su hombro derecho, su mirada estaba clavada en el suelo, su mente divagante, los repitentes y alumnos que debían estar cuatro semanas recuperando la observaban con atención, algunos la miraban con pena, otros con curiosidad, algunos chicos pensaban en lo bonita que era aún sin maquillage.
Los pensamientos de June fueron interrumpidos de golpe. Henry Bowers había caminado hacia ella y la empujó bruscamente probocando que cállera al suelo al igual que sus libros los cuales se desparramaron por a un lado de ella.

-Miren lo que tenemos aquí, ahora no pareces tan violenta y autoritaria June-le dijo Henry de brazos cruzados.

June lo miró sorprendida, observo su alrededor, todos los miraban, no le dió verguenza, era sólo el hecho de que no llegaba a comprender del todo la situación. Estaba demasiado atontada el día de hoy como para sentirse avergonzada por una estúpida caída.

El matón se acucliyó frente a ella y le sonrió con arrogancia.

-¿Qué pasa, June? Parece como si la muerta fueras tú y no tu hermano menor--bromeó morvosamente.

June estaba aturdida y somnolienta, no comprendió muy bien el "chiste", se dispuso a recoger sus libros ignorando a Henry sin darse cuenta.

-¿No me contestaras?

Ella se puso de pie y trató de esquivarlo, pero el rubio la tomó del brazo y la atrajo a él con brusquedad.

-Ni se te ocurra ignorarme niña estúpida...-habló entre dientes.

-¿Qué está pasando aquí?

Ambos adolescentes se dieron vuelta. June se sorprendió, era el chico con el que había hablado hacia ya tres noches, más o menos, sus ojos estaban clavados en Henry con odio y rencor.

-¿Quién eres tú?-habló de forma bulgar Bowers.

-Tu profesor, la señorita Wheeler está de vacaciones y yo estoy a cargo de Matemáticas y Literatura-explicó con un tono serio-Así que suéltala si no quieres reprobar...

-No tienes el derecho de hacerlo...

-Y tú no tienes el derecho de tocar a alguien y menos a una mujer, así que sé un poco hombre y suéltala-Henry lo hizo-No quiero ver que la vuelvas a tocar, porque en cuanto lo hagas me aseguraré de que jamás te gradúes de la secundaria.

El rubio se dio la vuelta y se machó. Teo no dejó de observarlo hasta perderle de vista. Entonces miró a June con una sonrisa.

-Hola, que bueno verte de nuevo-comentó con dulzura.

June lo miró son expresión.

-Gracias-murmuró.

Se dio la vuelta y entro en el salón.

En esos momentos ella odiaba al mundo, extrañaba a George, lo quería devuelta, lo necesitaba devuelta. Quería volver a ver a su dulce hermano correr por la casa junto con Billy, quería escucharlo escondido tras la pared observando cómo ella tocaba el piano, quería verlo reír y llorar pidiendo galletas siendo que ya había comido un tarro entero. Quería acompañarlo de la mano hasta el sótano para demostrarle que allí no había ningún monstruo que pudiera herirlo. Pero eso ya no era posible, su hermano menor estaba muerto.

-June, ¿estás bien?-le preguntó Elle Miller, una de sus compañeras, la rubia era anorexica, tenía problemas de autoestima y era muy tímida, le costaba comunicarse pero siempre estaba pendiente de todos.

June la miró, no había escuchado nada de lo que le dijo, miró su alrededor, todos prestaban atención a la clase de matemáticas, ella había estado jugando con un lápiz durante media hora sin siquiera sacar su anotador. Tomó sus cosas y se puso de pie, se dirigió a la puerta interrumpiendo la explicación de Teo Wayne.

-June, ¿a dónde vas?

Ella no respondió, simplemente salió del salón dejando a todos atónitos y a Ella y Victor preocupados. El profesor la siguió.

-¡June!-gritó no muy alto, ella continuó con su camino-¡June!-corrió hacia la chica y la tomó levemente del brazo-

En un brusco sacudon instintivo la castaña se soltó del agarre del profesor. Los ojos de June estaban llorosos.

-¡No me toques!--dijo con histeria--No lo hagas--murmuró.

Entonces la chica salió por las anchas y gruesas puertas de la escuela.